Flechados. ~Daryl Dixon & ______ Grimes~

Capítulo 14

Todos mirábamos atentamente la puerta que se abría lentamente.
Fui la primera en moverme ya que me acerqué lentamente a la puerta.
Cuando todos entraron en razón comenzaron a seguirme.
Levanté la ballesta y apuntaba hacia todos lados mientras entraba al lugar.
Un tipo apareció apuntándonos con una metralleta.

Cuando todos sintieron la presencia del hombre le apuntaron.
Rick se acercó a él.
-¿Que quieren?- preguntó el hombre sin dejar de apuntar.
-una oportunidad- respondió Rick.
-Es mucho pedir en estos días- respondió el hombre, y poco a poco iba bajando el arma.
-lo sé- le aseguró Rick.
El hombre rubio bajó el arma.
-Traigan todo lo que usarán, una vez que las puertas se cierran no se vuelven a abrir- todos obedecieron y corrieron rápidamente a los autos.
Yo no salí del lugar, pero me acerqué a él hombre.
-¿Tu nombre?- sonó una afirmación.
-Edwin, Doctor Edwin Jenner- respondió mientras me tendía la mano- ¿Y el tuyo?
-______ Grimes- respondí mientras aceptaba su apretón de manos, y me acerqué a su oído- más le vale que no intente nada, si lastima a mi familia, se arrepentirá- le amenacé.
Escuché que traguó duro.
-¡Vamos, rápido!- dijo a los demás.
Me alejé de él y me acerqué a Rick para ayudarle con las cosas que traía.
Jenner nos guió a un elevador.

-Quiero hablar contigo- me dijo Glenn al oído- cuando tengamos privacidad.
-Claro- le respondí mientras le sonreía.
-¿Podría callarse?- nos dijo Daryl con cierto enojo en su voz, eso no se me hizo raro ya que él siempre está enojado.
Me crucé de brazos y me giré para ver a Dixon.
-¿Cual es tu problema?- le pregunté con tono borde.
-¿Qué si cual es mi problema?- preguntó y yo asentí. Todas las miradas del grupo estaban en nosotros- ¡mi problema es que tú y el chino no se callan!
-¡Eso a ti no te importa!- le respondí.
-¡Claro que me importa!- gritó.
Lo miré con confusión. Dejé caer mis brazos y decidí ignorar su comentario.
-llegamos- anunció Jenner mientras se giraba a vernos con una sonrisa que reflejaba incomodidad.
-Vi, prende las luces- gritó Jenner.
Fruncí mi ceño porque no había nadie en la habitación.
-¿Quién es Vi?- preguntó Carol mientras sonreía.
-Vi, saluda los invitados- gritó el hombre.
-Bienvenidos a CDC- dijo una voz.
-Es una computadora- respondió el científico-síganme.
Nos guió por un largo pasillo y se detuvo en el final.
-Si se duchan, no tarden mucho usando el agua caliente- todos sonrieron al escuchar que había agua caliente mientras el doctor se alejaba por el largo pasillo.
-Hay agua caliente- dijo una emocionada Carol.
Ignorando el espectáculo que había me adentré en una habitación.
Cerré la puerta detrás de mí y coloqué mi ballesta en el suelo mientras me tiraba en la cama. La puerta se abrió minutos después, como la ballesta estaba demasiado lejos, tomé mi revólver y me senté rápidamente en la cama y la persona se sobresaltó y levantó las manos.
-Tranquila soy yo- dijo la voz chillona del coreano- no sabía que estaba ocupada.
El iba a irse pero lo detuve.
-¡Espera!- le dije mientras salía de la cama en un salto.
El se giró a verme.
-¿Si?- preguntó mientras fruncía el ceño.
-dijiste que tenías algo que decirme, ¿Qué era?
El se rascó la nuca nervioso.
-¿Puedo? - señaló la cama.
-Claro.
Se sentó en la cama y me miró a los ojos.
-Solo quería hablar contigo, tener una amiga, y pensé que tú querías tener un amigo al cual contarle todo- volvió a rascarse la nuca.
Le sonreí tiernamente, me causaba gracia su rostro.
Iba a responder pero golpearon la puerta levemente.
Y a los segundos se abrió.
-¿Interrumpo algo?- dijo Rick.
-No, ya me iba- dijo Glenn.
-No te preocupes, solo quería avisarles que debemos ir a cenar cuando estén aseados- nos dio una sonrisa mi hermano y salió de aquí.
-Me encantaría ser tu amiga- le respondí a Glenn con una sonrisa.
Sin pensarlo dos veces nos abrazamos- tengo que ir a ducharme, adiós- me despedí del coreano y salí en busca de Lori.
-¡Lori!- le grité desde el pasillo ya que ella caminaba hacia otra parte.
Se giró a verme y me dio una sonrisa.
-¿Qué pasa cariño?- me pregunto amablemente.
- solo quería preguntarte si podrías prestarme ropa- dije algo tímida.
-claro, espera aquí
Sin esperar respuesta entró en una habitación, y a los minutos salió nuevamente.
-toma- me tendió la ropa que tenía entre sus manos- se te verá bien- me guiñó un ojos y sin esperar respuesta retomó nuevamente su camino.
Y yo fui en dirección a las duchas.
Cuando estaba limpia completamente me coloqué la ropa que me prestó Lori, y consistía en una camiseta de tirantes color negro, una chaqueta de cuero del mismo color, un pantalón ajustado al cuerpo color gris y roto de las rodillas. Me coloqué todo eso e incluyendo mis botas altas color negro.

Estando lista completamente me dirigí al comedor.