Capítulo 15

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Mientras más cerca estaba del comedor más ruido se escuchaba.
Cuando puse un pie en la habitación Carl no tardó en acercarse a mí y abrazarme.
-¿Qué pasa pequeño?- le pregunté mientras sobaba su cabeza y nos separábamos.
-Te extrañe tanto, tía- dijo mientras levantaba su cabeza y me miraba a los ojos.
-Pero solo tomé una ducha- respondí con una sonrisa.
-No me refiero al tiempo que duraste en el baño, me refiero a siempre- dijo mientras volvía a esconder su cabeza en mi cintura.
-Yo también cariño, pero ya estamos juntos y eso es lo que importa- le dije mientras acariciaba su cabecita.
-¡______, Carl!- nos llamó Rick y el pequeño se separó de mí.
-¡Vengan aquí!- nos grito mi amigo el coreano.
Agaché mi cabeza para mirar a
Carl- vamos- le dije.
Asintió y tomó mi mano mientras caminábamos hacia la mesa y cuando llegamos soltó mí mano y fue a sentarse al lado de Lori. Y por otra parte, yo fui y me senté al lado de Glenn y Daryl.
-Toma- dijo Glenn mientras me regalaba una sonrisa y me tendía una copa llena de...
-¿Qué es esto?- pregunté mientras tomaba la copa y miraba dentro de ella, levanté mi mirada y Glenn sonreía burlonamente y yo le devolví la sonrisa- yo no te cargaré cuando estés borracho- le advertí mientras tomaba un sorbo de vino, y al sentir lo amargo que era hice un gesto de desagrado pero de placer a la vez.
Escuché una carcajada a mis lados.
-¿De que se ríen?- pregunté mientras giraba la cabeza hacia la derecha y la izquierda.
-De tu cara- dijo Daryl que miraba al frente mientras llevaba su copa a su boca y tomaba un largo sorbo de vino, mis cejas se arquearon y mi boca se formó en una perfecta "O" ya que el no hizo ningún gesto al tener el líquido en su boca.
-¿Qué tiene mi cara?- pregunté fingiendo enojo- ¿A caso tiene monos?
-Olvídalo- dijo mientras se giraba a verme.
Lo primero que observé fueron sus ojos, eran pequeños y de un color azul muy llamativo, era como el océano pero con un hoyo negro en el centro. Esa parte de sus ojos me estaban revelando un pasado oscuro y un futuro quizá de la misma forma. Me perdí en sus ojos y al parecer el en los míos ya que ninguno apartaba la mirada.
Sus ojos se movieron por un segundo a mis labios, me sonrojé y ni siquiera sé por qué, y eso se convirtió en un momento incómodo, el no dejaba de mover sus ojos a mis labios y luego a mis ojos, por alguna extraña y estúpida razón me atreví a mirar sus labios, eran pequeños y de un color rosa claro, tenía pequeñas cicatrices en estos, de repente sus labios se curvaron en una sonrisa arrogante.
Sentí el calor recorrer mi cuerpo hasta llegar a mis mejillas. Levanté mi mirada y miré nuevamente sus ojos.
-¿Te gusta lo que ves?- preguntó mientas quitaba la copa llena de vino de mis manos y bebía un poco del líquido amargo.
-¡Oye! ¡Es mío!- le dije ignorando su pregunta.
Ignoró mi comentario y bebió todo el contenido de la copa.
Bufé molesta y miré al frente.
Era increíble como ese hombre podría hacer lo que quisiera conmigo y yo no hacía nada al respecto.

Flechados.  ~Daryl Dixon & ______ Grimes~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora