''ESTUDIARTE''

Parte 15

Dos semanas más tarde.

Estaba en mi habitación decidiendo qué iba a llevarme al hotel dónde pasaríamos el fin de semana Hugo y yo con su familia. Hugo me dijo que llevara algo elegante así que he metido un mono negro ajustado con mangas de campana junto con unos tacones negros. También he puesto un pijama largo, unas zapatillas, unos tejanos negros rotos (típico en mi) y una sudadera blanca ajustada a la cintura. Después de organizar toda la mochila la meto en el armario para que mis padres no vean nada y no duden, ya que ellos se van a un hotel y piensan que me quedaré en casa.

- ¡Lucía, baja! Hemos de hablar contigo. – Grita mi madre des de la cocina.

- ¡Voy!

Bajo las escaleras y veo a mis padres en la cocina mirándome entrar en la cocina.

- ¿Si? – Pregunto algo asustada al verlos que me miran tan fijamente.

- No vamos a ir al hotel, hemos dicho de no ir este fin de semana ya que es el cumpleaños de tu tía abuela.

¿¡QUÉEEEEE!? ¿Qué le digo yo a Hugo ahora? Vamos muy bien, no estamos saliendo pero siento que cada vez estamos mejor mas unidos y más confianza, aunque después de lo que hicimos en la ducha no hemos vuelto a hacer nada más, básicamente por miedo. No sabría decirle que no iría así que me inventé un plan.

- Voy a ir con Andrea a su casa el fin de semana, no me quería quedar sola y me dijo de ir, ¿puedo no? - Me salió bastante creíble ya que cuando miento se me nota mucho en la cara.

- ¿Mañana? – Pregunta mi padre algo confuso.

- Sí.

- Es el cumple de tu tía abuela, lo sabes ¿no? – Me dice mi madre.

- La felicitaré por móvil y estaremos hablando un rato, lo prometo.

- Bueno, y ¿qué vais a hacer? – Pregunta de nuevo mi padre.

- Pues, estar en su casa y puede que salgamos con sus padres a un restaurante, así que me llevaré algo para arreglarme.

- Llévate dinero.

- Si.

Salgo de la cocina y voy hacia mi habitación, cuando llego cojo mi móvil y marco el número de Hugo.

- ¡Enana!

- Feo, escúchame les he dicho a mis padres que voy con Andrea a su casa en vez de decirles la verdad, porque ellos al final no se van.

Escucho como ríe detrás del teléfono y me encanta como suena.

- La de cosas que haces por estar conmigo eh.

- Si quieres retiro el plan y me quedo en casa.

- Entonces traigo toda mi familia a tu casa. – Reímos por su comentario, y suspiro.

- Me gustaría estar contigo ahora mismo.

De repente cuelga el teléfono y me quedo mirando el móvil con cara de extrañada. Al minuto se escucha el timbre de la puerta de mi casa y voy corriendo a ver quién es.

- ¡Voy yo mamá!

- ¡Vale!

Abro la puerta y me encuentro a Hugo con una bolsa de mis patatas preferidas en la mano, lo miro sorprendida y le hago un gesto como que se vaya a la escalera que ahora iba.

- Mamá, es la vecina del sexto que antes me ha dicho por llamada que le ayude a utilizar un programa de ordenador.

- Vale, vuelve pronto que tienes que hacer cosas.

Cierro la puerta y voy hacia las escaleras con Hugo, lo abrazo fuerte y le doy un beso tierno en los labios.

- ¿Entonces me vas a ayudar con el programa? – Me dice bromeando y guiñándome el ojo.

- Eres tonto. – Le digo seria intentando no reír.

- ¿Lista para mañana?

- Sí, ¿Cómo vamos a ir?

- En coche. – Me dice riendo Hugo sabiendo que no era a lo que me refería. Lo miro y lo empujo hacia la pared. Me acerco a él y le vuelvo a repetir la pregunta susurrándole muy cerca de los labios. Me lo explica todo y acaba dándome un beso en los labios, luego pasa de los labios y me besa el cuello.

- Hu.. Hugo, me tengo que ir...

- Vale enana, mañana a las 7 de la mañana en el portal.

- Me vas a hacer madrugar.

- Qué pena. –Me guiña el ojo y me voy hacia mi casa.