Confía en mí

Capítulo 5: Disipando sombras

Nunca pensé llegar a este extremo, éramos sólo nosotros, los x-men de siempre, al parecer los más jóvenes no vinieron por que es muy peligroso para ellos. Tenemos que detener a Jean, inclusive en mis pensamientos suena raro, hace unas horas pensaba que todo sería tan diferente...

La mayoría de nosotros concordo que Tormenta debía ser la primera en ir, ella por su parte estuvo de acuerdo, debíamos estar atentos a cualquier inconveniente.
Tormenta puso sus ojos en blanco y se elevó para estar frente a Je... al Fénix. Pude observar que en cuestión de segundos algunas nubes oscuras agregaban dramatismo a la escena. Quizás esto no fue buena idea, dado que de por si estaba inestable, alguien como tormenta posiblemente complicaria las cosas.
Primero empezaron a caer las gotas, luego comenzó el aguacero. Pude notar que a pesar de la lluvia el pelo de Jean seguía prendido fuego, nada podía pararla, tuve miedo de ese pensamiento. Con la ayuda de sus vientos, Tormenta trató de calmar el caos en el que se había convertido, pero lo empeoró. Je... El Fénix oscuro la miró a los ojos y de un "empujón" la mandó lejos de su vista. Guepardo se apresuró a amortiguar su caída.

En el medio del caos, el profesor dijo: *-¡Jean! ¡Soy el profesor, todo esto tiene que terminar ahora!*
La mirada del Fénix cambio, elevó al profesor sacandolo de su silla. Todos estábamos muy asustados. Lo dirigió frente suyo, si hubiese querido no quedaría nada de ese hombre, en ese momento escuche una voz familiar.
*-¡¿Qué está pasando?!* gritó, tomando su cabeza entre sus manos. En ese instante soltó al profesor, creo que a más de uno de nosotros le faltó el aire. Nocturno desapareció, lo tomó en sus brazos y volvió, justo en el medio del círculo que habíamos formado.
-¡Kurt! ¡Necesito que me lleves con Jean!
-¡¡Estás loco!! ¡Está fuera de control!
-Escuche su voz, era ella ¡Sólo déjame ahí!
Kurt tomó mi brazo y desaparecimos.