Bad Things | Cameron Dallas

diez // maratón (2/5)

Capítulo narrado.

Luego de cruzar la entrada de la casa de Stassie junto a Shawn, la abracé fuertemente y entregándole su regalo, el cual consistía en mucho maquillaje de grandes marcas, sabía que eso le gustaría, esa chica amaba más el maquillaje que cualquier cosa.

De un momento a otro, ya Shawn no estaba a mi lado, y solo pude dirigirme hacia Sam para saludarlo, quien estaba con Hayes.

—Mira qué tenemos aquí —canturreó Wilk abrazándome.

—La pequeña de la familia —Hayes besó mi frente. —Aunque seas mayor que yo, eres más enana, eso te hace mi pequeña.

Sonreí y le saqué la lengua divertida, él rodó los ojos.

—Que cosas las de instagram —dijo Sammy sin apartar su brazo izquierdo de mis hombros. —Cameron sigue enamorado de ti, Ally.

Rodé los ojos. —Oh no, no lo creo.

—Sólo mira como te está viendo desde allá. —señaló a la izquierda con su mirada azulada, provocando que mi mirada se dirigiera a Cameron, quien se encontraba con Skate, Nash, Matt y Shawn, supuestamente en una conversación. De un momento a otro él se empezó a acercar y yo aparté mi vista de él. —Creo que deberían hablar, babygirl, hay muchos cabos sueltos por lo que sé y en instagram hay muchas indirectas e información sobre los dos, es mejor arreglarlo.

Asentí sin darle mucha importancia, y cuando sentí una presencia a mi lado, Sammy y Hayes se retiraron, no sin antes guiñarme un ojo.

—¿Qué quieres? —lo miré interrogante y él metió sus manos en los bolsillos de sus jeans, su mirada brillante estaba sobre la mía.

—Necesito que hablemos, ya sabes... en privado —propuso y asentí, estaba a sabiendas de que no sería más que una conversación, puesto que debíamos aclarar algunas cosas y cerrar esto de una vez por todas.

Ambos nos encaminamos a una pequeña sala donde no habían rastros de nadie, toda la fiesta era en la sala principal y en el patio trasero, pero por alguna extraña razón este pequeño y acogedor lugar estaba totalmente despejado.

—¿Y bien? —cuestioné cuando estuvimos solos.

Pero entonces, hubo un cambio de planes cuando él se acercó a mí desprevenidamente, tomando mi cintura con sus manos y acercándome a él violentamente, causando que un temblor recorriera por mis piernas, no pude evitar colocar mis manos en su pecho empujándolo un poco para que se alejara, pero no lo hizo.

—No hagas esto, por favor —pedí sintiendo como la manada de recuerdos del pasado abundaba todo mi cerebro, impidiendo que analizara con claridad esta situación.

—Tú no quieres a Shawn —besó la comisura de mis labios, provocando que cerrara mis ojos. —Siempre juntos, a pesar de las caídas, a pesar de todo, ¿lo recuerdas?

《 Reía mientras él me daba vueltas en el aire, la brisa de la playa provocando que mi piel se erizara, y mi cabello despeinado gracias a ella. Nuestras risas eran como una canción que no quería parar de escuchar nunca, y la diversión que traía el momento consigo era tan perfecta, que quería guardarla para siempre en mi memoria.

—Te amo —susurró bajándome, mientras acariciaba mi mejilla y me obligaba a mirar sus ojos marrones. —¿Lo sabes, verdad?

—Lo sé —besé su nariz, provocando que la arrugara un poco. —También te amo.

—Siempre juntos, a pesar de las caídas, a pesar de todo, ¿lo recuerdas?

Asentí y entonces sentí como sus labios se juntaban con los míos. Jamás me arrepentiría de salir con un desastre andante como lo es este chico, es el mejor desastre que alguna vez me pudo haber pasado. 》

—Jamás te he olvidado, Allyna —acarició mi mejilla suavemente. —Y estoy casi seguro de que tú tampoco me has olvidado.

—Nunca olvidaré nuestra historia, pero estoy con Shawn ahora —lo miré. —Quizás es hora de que busques a alguien más como yo lo hice, Cameron.

Él se alejó de mí bruscamente y frotó su cabello con frustración.

—Es horrible saber que mi único alguien más eras tú, y ahora estás con él —exclamó. —¿Cómo pretendes que me vaya con alguien más cuando quiero tenerte a ti?

—Cameron...

—¿Cómo jodidos pretendes que puedo estar con otra persona cuando la única para mí siempre vas a ser tú? —se sentó ahuecando su cabeza entre sus manos.

Sentí un hueco formarse en mi pecho, como si me hubiesen disparado, causando que apretara mis ojos con fuerza, para luego caminar hacia él y sentarme a su lado, comenzando a acariciar su cabello castaño con algunos escasos toques de rubio.

—Sabes que debemos aprender a salir de eso, ahora estoy con Shawn y he aprendido a quererlo —sonreí recordándolo, intentando que las lágrimas no se acumularan en mis ojos.

Él salió de sus manos y colocó una nuevamente en mi mejilla, levantando mi vista hacia sus ojos cristalizados y rojos.

—Dime que me has olvidado, dime que ya has olvidado por todo lo que pasamos juntos y que ya no me amas como yo a ti —pidió.

Miré sus labios color carmesí y apreté mis ojos por un segundo, analizando sus palabras.

—No puedo.