Me acoste sobre el pavimento, pegue mi oreja al piso
y pude escuchar a las piedras llorar.
[de mal de amores]La lluvia habia dejado su rastro
y la grama mojada al cortarse huele de manera
mas grande que lo que puede llegar a sonar un laùd.senti los pasos de tus zapatos golpear el cemento
[del cementerio]Y me pare a escuchar, estabas volviendo, tal vez?
tus pasos se acercaron, cada vez mas fuertes
repetian su ritmo cual violin, serentando tu llegada
[a mi estancia]"te diste cuenta de tu error?", susurre
"yo no cometo errores", respondisteMe tumbaste contra la pared y me besaste
y la musa vuelve a ser poeta de telas sonantes
[palabras de fuego]a veces aunque no los cometamos,
el error calla nuestra acciones hasta que
los encaramos y solucionamos.
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Poemario en si bemol, lo negro.
PuisiPoemas que describen mis pensamientos. Los poetas somos harapientos peregrinos en busca de musas a quienes amar. Sin embargo, ¿puede una musa dejar sus paños de seda para volverse un poeta?.