BREAKING POINT

36. Maldito disparo.

-Nat... Vale - Sonrío quedándome un poco transpuesta. Claro, era lógico que fuera ella. Todo está conectado. Desde que era una niña.

Esto parece, cada día más, una secta.

Miro a todos lados y ya no queda nada, solamente el guardia de negro.

-¿Damos un paseo? - Natasha interrumpe mis pensamientos con una sonrisa ancha.

-Como quieras...

Me hace una seña y comenzamos a caminar. Yo introduzco mis manos en los bolsillos mientras ella las tiene cruzadas a su espalda.

-Yo conocí a la señora Mary cuando era más joven.

-Ella es mi nana.

-Lo sé - Sonríe levemente girando su mirada hacia mi persona - Tú eras un bebé recién nacido - Su mirada toma un cierto tono triste- Sólo te dedicabas a comer y dormir... Aunque siempre eras el centro de atención.

-Eso me han dicho.

-Llegué con problemas a este país y me choqué con ella... Gracias a Dios, si no, no se que hubiera pasado.

-¿A que te refieres con esto?

-Yo venía sin mi hijo, lo tuve que dejar en Inglaterra por que si no, me lo hubieran quitado... Mi marido era un jeque muy importante, pero jodieron nuestra vida ¿sabes?, nos quitaron todo, nuestra casa, nuestros trabajos... Nuestra vida y nos dejaron en la calle... A mí y a mis hijos.

-¿Y su marido? ¿No le ayudó?

-Lo mataron... ¿Es lógico venir a vengarse no?

-¿Y aún no lo ha echo?

-No, pero lo haré... Y ya no tardare mucho...

-¿Y mi nana en que le ayudó?

-Me dio comida, techo y cariño... Algo que una joven necesitaba demasiado cuando su mundo se había destruido... Y se lo agradezco demasiado.

-¿Entonces usted sabe quien le hizo eso a su familia no?

-Sí, claro que lo sé... Lo supe desde el primer momento... Pero antes de seguir, me gustaría que dejases de llamarme de usted, tutéame.

-Vale... Natasha - Intento lanzarle una sonrisa - ¿Y que tengo yo que ver en todo eso que te ha pasado? ¿Por que parece que todos, Thomas y los demás... Y los rusos que me han secuestrado, buscan algo de mí, que ni yo sé?

-Bueno - Ríe abriendo la puerta, sin darme cuenta hemos llegado a la parte trasera de la casa. Ante nosotros hay una puerta que da a un pasillo - Creo que ya habrán terminado con Thomas.

No contesta mis preguntas, las tira directamente a una basura imaginaria. El pasillo esta iluminado, con bonitas pinturas y en el suelo azulejos lisos. Hay puertas marrones de las clásicas.

Sigo a Natasha mirando todo. Algunas puertas están entreabiertas pero no me da tiempo a averiguar lo que hay dentro.

Llegamos hasta el final y abre otra puerta, que da a otro pasillo pero en este caso tiene dirección perpendicular al anterior.

Esto parece un laberinto.

Ahora seguimos hacia la derecha y hay unas escaleras. Me giro hacia atrás mientras doy un paso sobre el primer escalón y en el otro lado del pasillo se abre una puerta. Veo a Marc llamando por teléfono. Él me mira y me sonríe para después girarse y entrar en la habitación de la que ha salido.

-Vamos...

Miro a Natasha y ya está arriba en las escaleras. Subo rápidamente y sigue. Parece que se conoce esto como su propia casa y pues ese confort me atraviesa.