13 de Agosto de 2015
Eran las 7:00 am cuando el despertador de Jason sonó, el lo apago de inmediato y pego un salto de la cama, yo seguía entre dormida y despierta, sin hacer mucho ruido Jason abrió la regadera y comenzó a prepararse para el trabajo.
Mi intención era seguir dormida, pero recordé que hoy era un día importante para el, asistiría a la inauguración de un importante hospital, así que a duras penas me incorpore de la cama, me puse mi bata y me dispuse a bajar las escaleras a prepararle el desayuno.
Omelette de jamon y queso, con un vaso se jugo natural de naranja, sabia que no era algo muy elaborado, pero bueno, mas vale una receta con la cual ya estaba familiarizada.
A las 7:42 am bajo las escaleras, con un traje azul marino (mi favorito), una camisa blanca sin corbata, y ese perfume que le regale para su cumpleaños numero 29, lucia tan guapo esta mañana, mas de lo de costumbre.
Buenos días amor -dijo con esa sonrisa encantadora - que guapa amaneciste hoy, a que debemos tu presencia en la cocina en esta encantadora mañana - note su tono de burla, ya que estaba despeinada, en bata y casi nunca me levantaba a preparar el desayuno.
Bueno ya vez, se que es un día importante, quise que lo empezarás con el pie derecho - mientras me preparaba una taza de cafe-.
Muchas gracias amor, comeré rápido, porque ya casi son las 8:00 y quede de pasar por Mike, tenemos evento a las 9:00 en punto - rápidamente se comió todo y se llevo el vaso de jugo para el camino-.
Se despidió de mi con un beso en la frente.
Te amo - le grite mientras se subía a su coche. Un Porsche 911 rojo que había adquirido unos meses atrás, odiaba ese coche, odiaba la velocidad, y como ni bien le aplastabas el acelerador salía disparado. Pero era algo que el siempre quizo, y yo no podia impedir que se diera sus lujos, al fin y al cabo era el quien madrugaba a trabajar.
Me regrese a mi habitación y me acosté otro rato, cuando abrí los ojos ya eran las 10:00 am así que me puse de pie, tome un baño y me arregle un poco el cabello, tenia que hacer el super de la semana, así que me dispuse a ir a Provigo, un supermercado donde acostumbraba comprar mi despensa.
Para las 13:30 ya estaba en casa de regreso, me prepare un sándwich de queso y me puse a ver television un rato, pensando en que le tendría de cena a Jason cuando llegara en la tarde.
Me parece que eran casi las 16:00 horas cuando mi celular sonó, era la oficina de Jason, me extraño porque el siempre se comunicaba conmigo a travez de su celular, pero de igual manera atendí la llamada.
Hola - respondí antes que la otra persona-.
Buenas tardes Jules, habla Mary - que extraño pensé, era la secretaria de Jason, pero ella casi no se comunicaba conmigo-.
Hola Mary ¿como estas? - respondí amablemente, aunque algo dentro de mi me decía que no todo era bueno-.
Jules hablo para - hizo una pausa, hasta me pareció escucharla sollozar- Jules lo que pasa es que Jason tuvo un accidente - lo dejo venir de golpe.
¿Accidente? Como que accidente, ¿que clase de accidente? - la empece atacar, no sabia que estaba pasando, porque no me lo decía de una ves, porque guardaba silencio, si no fuera algo grave, no fuera tan difícil decírmelo-.
Jules, lo siento mucho -dijo, y luego comenzó a llorar, y creo que fue eso lo que la obligo a colgar-.
Estaba paralizada, no sabia que hacer, comencé a llamar a Jason a su celular pero su buzón de voz entraba al instante, después de tres intentos decidí tratar de comunicarme con Mike pero su celular de igual manera me enviaba directo a buzón.
Entonces lo supe, algo dentro de mi lo supo, no se si fue mi corazón el cual sentía que se paralizaba, pero yo lo sabia, el ya no estaba, me había dejado, se había ido y yo estaba sola, ¿que esta pasando?, esto debe de ser una broma, si yo lo mire hace apenas unas horas, yo le serví el desayuno, yo me despedí de el esta mañana con un "te amo".
Salí corriendo de mi casa, por Saint Denis, rumbo al rio, en algún momento me detuve, caminaba entre la gente, sin entender en que situación estaba, porque me estaba pasando esto ami, tengo tantas cosas que decirle, tantos planes que concretar, una familia que formar, viajes, cenas, platicas interminables en la madrugada, y se había ido, sin mi, me abandono.
Eran las 16:48 del jueves 13 de agosto y yo acababa de perder a el amor de mi vida...
ESTÁS LEYENDO
Como decir adiós
RomanceNo hay mucho que decir, mas bien nada... Un relato sobre como la vida puede cambiarnos en cuestión de segundos, de como aveces estamos y al instante no. Por eso vive, ama, valora, pero sobre todo nunca te arrepientas de nada.