Capitulo 3: El refugio... 1/2

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Anteriormente:

- ¡ESTÁN PREPARADOS¡ - grito Alex.

- ¡SI! - gritaron la mayoría.

-¡ENTONCES, ES HORA DE LUCHAR!, ¡A LA CARGA! -

Ahora en el patio de baloncesto:

Todos se encontraban en la cancha escondidos detrás de las gradas.

— Tengo un plan que nos servirá, el único problema es que no tengo un automóvil para que podamos escapar — mencionó Alex.

— Yo tengo un auto muy espacioso en el parqueo.— Dijo Max.

— Ok, entonces nos dividiremos en grupos, pero juntos a la vez, así cubriremos más terreno —Todos asistieron — Entonces así sera; Andy, Pedro y Bíanca; Max, Marta y Michael; y los últimos Rodrigo y yo, ¿Ok? — terminó de decir Alex.

— Uhh, parece que somos el  equipo “M”, porque nuestros nombres comienzan con esa letra — mencionó Michael asiéndose el graciosos.

— Dejate de tonterías, vamos no tenemos mucho tiempo — dijo Alex.

Todos procedieron con el plan que ya había mencionado Alex.

Corrieron lo mas rápido que pudieron Alex y Rodrigo atacaban con mucha confianza de sí mismos, ellos dos trabajaban en equipo, parecía como si pudiesen leerse sus mentes. Eran El dúo temible ningunos de ellos podían derrotarlos, ellos eran máquinas de pelea.

En cambio con los demás... Bueno, ellos se mantenían ¿vivos? Bueno al menos no se dejaban comer.

Después de esa horrorosa pelea, (la cual solo Alex y Rodrigo se divirtieron), lograron llegar al parqueo. Buscaron el auto de Max, cuando lo pudieron divisar vieron a dos chicos arriba de él, uno era un chico con bate y la otra era una chica, la cual estaba muy apegada al chico, se notaba que tenia mucho miedo. La razón por la que están ahí arriba era porque estaban rodeados por ellos, para ser exactos eran cuatros.

Rápidamente Alex cogió su Katana y corrió hacia ellos, a uno lo corto por la mitad horizontalmente, otro le corto la cabeza por mitad y a otro le quitó la cabeza, le faltaba uno, el cual Alex no noto que se encontraba atrás de ella, Rodrigo, el cual se encontraba al frente de Alex, cogió su arma y le dio un disparo en la cabeza al caminante, la bala paso por el lado de Alex, para ella todo paso como en cámara lenta.

— Uff... Gracias Rodrigo, ese casi me muerde — le dijo Alex a Rodrigo mientras ponía su Katana en su lugar correspondiente.

— No hay de que, por eso somos un equipo ¿no? — Rodrigo le sonrió a Alex a siendo que dos chicos que los observaran se sintieran, como lo digo... Algo ¿celosos?

— Bueno, bueno, bueno, tenemos que irnos, sino vendrán un montón de esas cosas “vivas” y no quiero estar aquí para ver eso — dijo Michael, aunque en realidad lo dijo para que Rodrigo no siguiera viendo a Alex así, aunque en parte tenia razón.

— Ah si verdad... — dijo Alex y después miro hacia los chicos que se encontraban todavía arriba del auto — bueno me imagino que ustedes irán con nosotros ¿no? — ellos solo asintieron.

— Pero no vamos ha caber todos en el carro — dijo Max.

— Bueno eso no importa, yo tengo una motocicleta, Alex y yo podemos ir en ella y los demás en el auto — mencionó Roberto.

—Si es una gran id... — no pudo terminar de decir Alex por que fue interrumpida por Michael.

—Pero si van en moto puede ser peligroso para ustedes, es mas probable que sufran algún accidente o no puedan escapar si son rodean por ellos — terminó de decir Michael.  

— No me importa, a mí me gusta el peligro ¿y a ti Alex, que eliges, ir con ellos o conmigo? — dijo Roberto. Algunos sean quedado muy impresionados por estas aptitudes que a manifestado Roberto, parece que no puedes juzgar un libro por su portada ¿no?

— Bueno, yo elijo a la adrenalina— dijo Alex.

—Bueno ustedes dos en la motocicleta y nosotros en el auto ¡VAMOS! No hay tiempo que perder. — dijo Max.

—No es por nada pero ¿a dónde iremos?— preguntó Pedro.

— O si casi se me olvidaba— dijo Alex — yo tengo una bunque debajo de mi casa, ahí podremos refugiar nos por un tiempo — terminó de decir.

— ¡Eso es súper genial! Siempre quise estar en un bunque — dijo Max.

—Bueno, Max sigue nos a nosotros ya que no sabes donde vivo ¿ok? —dijo Alex, Max sólo respondió con un “Ok” de su parte.

— Mi-miren unos d-de e-ellos —susurro Bíanca, pero nadie la escuchó. Marta que observó a Bíanca muy nerviosa dirigió su vista a donde miraba la morena y pudo divisar a aquellos caminantes "vivos".

—Chi-chicos, ha-hay u-u-nos de e-ellos. —tampoco escucharon a Marta — ¡CHICOS AHÍ VIENEN! —Esta vez ella grito lo mas que pudo alertando a todo ser vivo o no "ser vivo" que se encontrase ahí. Todos los demás adolescentes se alertaron y se subieron a los medios de transporte que se encontraban ahí y marcharon a toda máquina, pero los "caminantes" también les siguieron.

The Virus Of The Dead. [CANCELADA :'v]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora