La chica del salón de alado.

¿POR QUÉ EL AMOR ES UN LÍO?

CAPITULO IV

-05:00am-

No quiero levantarme, tengo aún mucho sueño, pero sé qué debo hacerlo, así que me pongo en pie y decido darme un baño, el agua al principio se me hace muy fría, después mi cuerpo entra en temperatura y disfruto de las gotas de agua que me recorren, termino y tomo una toalla para envolverla a mi cuerpo y otra a mi cabello, entro a mi cuarto y empiezo a poner crema humectante en todo el cuerpo, luego me empiezo a vestir. Con mi uniforme que consiste en una falda gris hasta la rodilla y mi camisa blanca con el logo de la escuela, calcetas largas blancas y mis zapatos escolares, me desenredo el cabello y antes de eso como siempre, o bueno solo a veces, me pongo crema en el cabello, y me pinto de rosa los labios, y en todo eso ya me dan las ¡6:00 de la mañana! Así que alisto rápidamente mi mochila, aunque lo hice en la noche antes de dormir, pero verifico. Me despido de mi madre y salgo de mi casa directa a la parada, espero el transporte, ya que mi primer clase es a las 7:00, y si salgo más tarde no logro alcanzar el carro que me lleva a la escuela, pero ya son 6:20, y el transporte pasa justo a tiempo, llego a la escuela, y pareciera que en el carro hay una plaga de estudiantes, ya que al llegar a la escuela el carro queda casi vacío con uno que otro trabajador u estudiante de otra institución.

Llego un tanto emocionada, y nerviosa, no quiero pasar frente al salón 16, pero es casi imposible, porque ¡mi salón es el 17! Así que paso, con la mirada al frente, no volteo hacia ningún lado, y si, también yo pienso que parezco robot, pero es que me da mucha pena, no sé qué pensará de mí. Lo chistoso, es que no sé si ya esté en el salón, pero de pensar que si, me dan ganas de brincar, reír como loca, correr, y bueno un montón de cosas. Pero me controlo, subo los escasos escalones y me dirijo según yo, tranquila y disimulando a mi salón.

Me siento como de costumbre en la segunda fila, como a 3 metros en diagonal de la puerta, y con la vista perfecta hacia el pizarrón, pero como para que los maestros no me vean cuando coma algo durante la clase, y...

¡¡¡¡ÉL ME ESTÁ OBSERVANDO!!!! Ahí justo donde están unos barandales que quedan justo en diagonal a la puerta de mi salón y mi asiento, me doy cuenta, y no sé cómo actuar, no sé si ignorarlo o quedarme viendo a sus ojos, aunque sé que no podría mantener la mirada de él, ya que me sonrojo muy rápido, y se me escaparía una sonrisa, y no quiero aparentar ser coqueta, mucho menos fácil, así que opto por cerrar la puerta, aunque por el cristal me sigue viendo, pero creo que se da cuenta que lo caché viéndome y desvía su mirada, lo que ocasione que me ría, y mis amigas que se sientan justo alrededor mío, me preguntan de que me río y observan hacia donde yo estoy viendo a Javier....y siento la cara caliente, y les cuento de la conversación de anoche con el, y ellas no lo podían creer...

Espero con miedo y ansías el receso, ya que no sé si él se atrevería a hablar conmigo, quizá le daría pena o quizá quién me contestaba en el chat anoche, era alguien más, bueno mi mente se imagina una y mil cosas. Y prefiero ir a comprar mi desayuno, y lo topo en la cafetería junto a uno de sus amigos, que me imagino es con quién se lleva mejor ya que casi siempre los veo juntos, pro como si ambos no estuviéramos buscando, nuestras miradas se cruzan y siento un cosquilleo dentro de mí, pero el rápido sale de ese mundo de personas llamado cafetería, y yo aún me quedo con mis amigas, comemos como siempre, y no lo veo durante el tiempo que resta.

Ya es la hora de la salida, y que más quisiera llegar a mi casa, pero no, tengo que ir directa a mi servicio social junto con Arly y Dammy. Durante el camino pienso, y si, pienso en él, en que apenas lo conozco pero me hace sentir muchas y miles de cosas, que es como si fuera alguien con quién me completo, me siento viva, solo de saber que me ve, que está lejos pero cerca de mí, de pensar que le puedo gustar, que le intereso, y hay algo en él, que despierta un gran interés por conocerlo más, por llegar a tocar sus manos, por ser más que la chica del salón de alado.

Pero a alguien que yo no estaba tomando en cuenta es...a Manuel, que le diré, como le explicaré que alguien más me gusta, que aún lo quiero, pero ya no siento lo mismo que antes, en donde dejaré aquellos planes que teníamos juntos, viajes que pensábamos hacer, como podré verlo a la cara, y no sólo a él, sino también a su familia, aunque él me dejó caer, se alejó de mí, solo me dejo que abordara el barco y en la marea alta, me dejó sola, ahora no se hacía dónde dirigirme, no sé qué decisión tomar, a Manuel lo quiero, y sé que es el chico perfecto, lo que toda chica desearía, porque lo tiene todo, en cambio Javier, no es el más guapo, y apenas lo conozco....pero me gusta, tengo que admitir, que me gusta.

No sé qué rumbo tomar, ¿Por qué esto del amor es todo un lío?....