-¡Oh vamos, chicos! Ustedes no quieren pelear- Fue lo primero que dije, mientras me ponía en medio de los dos hombres fornidos. Mis pequeñas manos se posaron en sus trabajados abdómenes. Una en cada uno. Mire a Justin quien miraba al chico, con demasiada rabia. Incluso daba miedo.
-Linda, muévete ¿si? No quiero que una chica, tan sexy como tu salga herida.
-¡Mierda! ¡Cállate!- Grito Justin, y después le tiro un golpe en la boca. Hizo que esté derramara sangre. Lo mire con los ojos a tope, y la gente se empezaba a acumular en el pasillo.
-¿Qué jodidos te pasa? ¡Justin, mira lo que hiciste!- Me arrodille al piso, y tome la cara del chico entre mis manos. La sangre salía de su boca, y sus ojos echaban chispas. -¡Y ustedes que ven, par de idiotas! ¡Muévanse! Esto no es un jodido circo!- Grite enfurecida, y regrese la mirada a el chico.
-Soy Joseph- Dijo sonriendo. Me saco una sonrisa. Decir su nombre, cuando sangraba. Se llevaba un gran aplauso. Lo ayude a levantarse.
-No me vuelvas a hablar, eres un idiota. ¿Qué pasa por tu mente?- Le grite a Justin, dedicándole una mirada furiosa. Justin levanto las manos, como si dijera '¿Y que hice yo'? Tome la chaqueta de Joseph, luego tome la mano de Joseph.
*
-¡Oh! ¡Arde!- Se quejo Joseph, mientras lo limpiaba con el algodón.
-Se que arde, pero debo hacerlo- Seguí limpiando su labio inferior, y fue imposible no mirarlos eh imaginar besarlos. ¡Si eran irresistibles!.
-No me haz dicho tu nombre.
-______ Stew- Sonreí y el hizo lo mismo, pero se quejo al sonreír. Lo cual me hizo reír.
-¿Por qué no me dejaste defenderme?.
-La violencia no es buena- ¡Claro _____! Lo dices cuando, hubo momentos, en los que quisiste matar a Justin Bieber!
-Sea como sea. No debí quedarme así, debí defenderme.
-Fue todo su culpa- Murmure.
-No. Fue la mía, yo empecé con las idioteces.
-Fue la culpa de los dos, tu por decir esas palabras y el por dejarse llevar.
-Se ve que te quiere.
-¿Qué?- Lo mire y presione su labio con el alcohol, haciendo que gimiera. -¡Lo siento!.
-¿Tu sientes algo por el?
-¡No!- Negué al igual con mi cabeza.
-Entonces- Retiro el algodón y lo tiro, me tomo de la cintura, atrapándome entre sus piernas, ya que el estaba sentado y yo de pie, frente a el. Lo mire algo aterrada. -No se molestara por hacer esto- Y junto nuestros labios.
Tenía mis ojos bien abiertos, y mis labios tensos. No podía asimilar bien lo que estuviese pasando. Joseph gruño ante lo tenso que estaba. Solté un suspiro y cerré mis ojos. Estaba mal, no lo conocía. Y me vería demasiado dejada, pero ¡Diablos! Esos labios estaban hechos de delicia.
Un golpe interrumpió el beso, y me quite bruscamente de ahí, mire hacía la puerta y encontré la mirada de mi mejor amiga, junto a la de Christian.
-Yo, yo, yo...
-¡Lo sentimos!- Me interrumpió Charlotte con los ojos bien abiertos. -Te veo en clases _____.
-Bi... Bien- Charlotte aún asombrada miro a Christian quien estaba pálido. Luego le dio un golpe en el brazo, sacándolo de su trance y se lo llevo. Segundos después estábamos solos de nuevo.