¡Ho-ho-hola!~ Sé que no es sábado en la noche, pero no me pude aguantar¿?XD Me gustó demasiado cómo quedó ésta parteee~ e.e
Inesperadamente, el capítulo quedó más largo que los anteriores, es casi el doble! No sé si es algo bueno o algo malo, pero bueee... (Lo siento, pero es que me inspiré siendo Ten¿? ¡Hahaha!XD)
(*) En un momento del capítulo, hago referencia a algo (no los quiero spoilear, so, no les puedo dar más detalles, pero sé que lo entenderán¿?) Me inspiré netamente en el video que les dejo un poquito más abajo. Si quieren hacer real lo que intento expresar, échenle una miradita, que está muy bueno (no sólo el video, también Ten e.e) ¡Hahaha! De ustedes depende si lo quieren ver antes o después, pero entre nos, les recomiendo que despuésXDDDD
Link: https://www.youtube.com/watch?v=HdVxYyE65Oo
Sin más preámbulo, les dejo el capítulo de hoy<3
PD: ¡Por favor déjenme comentarios! Quiero saber sus opiniones al respecto e.e
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Ten
No les mentiré, tenía la pequeña esperanza de que nadie lo aceptara y Johnny se quedara solo, triste y abandonado por el resto de su vida académica. Hubiera sido ÉPICO, verlo comer solo todos los días a la hora de almuerzo, y quedar sin pareja cada vez que tuviéramos que asistir al baile anual, o hacer un trabajo en grupo. Estaría tragándose su propia medicina por haberme rechazado, pero no, el destino tenía planeado algo completamente diferente.
El diablillo con cara de ángel de tan solo 11 años logró encantar a todo el colegio; y por todo el colegio, me refiero a TODO EL COLEGIO. Las chicas, todas hormonalmente revolucionadas, caían enamoradas ante el "extranjero" y todos sus exóticos rasgos americanos. Los profesores, impactados por el impecable desempeño académico que Johnny "el primero de la clase" obtenía, no podían estar más alegres por tener tal ejemplar alumno ¡Hasta luchaban por ser su profesor tutor! ¡¿Qué diablos?! Los chicos, literalmente SE PELEABAN por ser elegidos por el estúpido oso para formar parte de su equipo de básquet en clase de deportes. Hasta la señora del casino le daba porciones extras de una comida que lucía mucho más deliciosa que la de todos, debido a lo amable que se había mostrado el chico con ella los primeros días, al decirle lo "hermosa" que lucía con esa malla en el pelo. ¿Hermosa? ¡Qué va! Yo pensaba que el chico había perdido su voz en los primeros meses, pero ¡parece que también perdió su vista! No lo creerán, pero ¡hasta los apoderados lo adoraban! Recurrían a él cada vez que querían preguntar sobre alguna evaluación o necesitaban de su inmaculado y completo cuaderno (ya que, además, el chico tenía asistencia perfecta y una caligrafía envidiable). Si pudiéramos resumirlo, diríamos que Johnny era el chico perfecto. Digno hombre por el que toda madre se pelearía para tener de cuñado.
Una historia totalmente diferente era la mía. "El Sexy Rebelde", como me habían catalogado. No puedo decir que no tenía suerte con las chicas, eso sería una mentira, ellas iban y venían en mi vida, pero jamás ocuparon un lugar "especial" en mi corazón, sólo eran mujeres que satisfacían mis deseos carnales. Ni siquiera llegaba a prestarles atención fuera de la cama, ya que hasta allí llegaba nuestra "relación". Las madres de tales chicas eran todo lo contrario. Yo era una señal de "PELIGRO" para ellas, es por esa misma razón era que mantenían a sus preciadas hijitas lo más alejadas de mi. Lo que ninguna de esa mujeres sabía era que cada una de sus pequeñas princesas ya había pasado por mi cama, y se había llevado un corazón roto luego de que las desechara. Sinceramente, aún no entiendo cuál es el afán de las mujeres por crear fantasías unilaterales incluso cuando les marcaba la línea. Los profesores, bueno, aunque ellos aparentaban odiarme, yo sabía que en el fondo de sus corazones me amaban, ¿cómo no hacerlo? YO ERA TEN. Mis notas académicas no ayudaban mucho en ese sentido, ya que no eran ni por asombro parecidas a las de Johnny. De todas formas, siempre lograba pasar, y eso era lo importante ¿no? No se podía decir que tenía muchos amigos, pero definitivamente era popular. Desde niño mis fiestas de cumpleaños eran eventos anuales que nadie quería perderse. Eso si, luego del desastre que fue mi fiesta número #8, dejaron de ser fiestas de cumpleaños y pasaron ser fiestas nocturnas que organizaba de un momento a otro cuando sentía que necesitaba acción en mi vida o un motivo para echar un polvo rápido sin generar mucho escándalo.
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Novercae Filius | [JohnTen]
Teen FictionToda mi vida había sido dura, desde que perdí a mis padres en un accidente automovilístico a los nueve años, hasta que, a los 21, me enamoré de la persona equivocada. Maldito sea ese bastardo que jugó con mi corazón. El lograba tenerlo todo a sus pi...