El sepulcro blanco.

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Después de aquella trágica tarde del 27 de diciembre, el cielo se torno trágico y oscuro. Simplemente era como si el cielo también hubiera entristecido por la pérdida del joven, que por siete años consecutivos ocupaba una identidad que no le correspondía.
Ese mismo dia Yugi junto con su familia y la familia Romanov, no aceptaban la perdida del joven que siempre había logrado vencer todas las adversidades. Por otra parte Kaisa, quien había sido la madre de Yami por siete años aun no comprendía el porqué de la muerte de su verdadero hijo y de la injusta muerte de Yami. Pero en realidad quien se encontraba mas destrozado por aquella pérdida era Yugi.

-¡Por favor, devuélvanme a mi hermano! -gritaba desesperadamente.

Sora y Solomón al ver la gran tristeza de Yugi sufrían en silencio, ya que tenían que mostrar fortaleza para no dejar caer en depresión al pequeño Yugi.

-Mi niño, por favor ya cálmate -dijo Sora mientras abrazaba tiernamente a Yugi.

-¡Perdóname madre, perdóname! -decía Yugi mientras abrazaba a su madre con fuerza.

-No tengo nada que perdonarte Yugi, porque todo lo que a sucedido no es culpa de nadie -respondio mientras acariciaba el cabello de su hijo con ternura.

-¡Claro que sí es culpa mía! ¡¡ por mi culpa Yami murió!! -grito con fuerza mientras su voz se quebraba en llanto.

-No fue culpa tuya, así que por favor, ya deja de culparte injustamente -dijo Solomón mientras tomaba el hombro de su nieto.

-¡¡¡Te equivocas, ya que a sido por culpa de mis estúpidos actos que Yami decidiera alejarse de la mansión y muriera -dijo llorando mientras se alejaba de los brazos de su madre.

Después de aquellas palabras, Yugi se formó gran sentimiento de culpabilidad y de odio hacia su persona, ya que en verdad no soportaba la idea de que su hermano continuara con vida si lo hubiera dejado continuar como David Romanov.
Pasaron las horas, para entonces era una nueva mañana en aquel país. Ese dia era una mañana fría y completamente blanquisca, ya que del cielo caía blanca nieve que la hacia una mañana hermosa. Sin embargo para la familia Muto y la familia Romanov era un mañana trágica y triste, ya que ese dia se estaba llevando a cabo el funeral de Yami bajo la fría nieve del cementerio principal de Magadan. Aquella mañana en verdad que era deprimente para los que valorarán al joven Muto Romanov, y más aun cuando observaban el hermoso ataúd blanco que contenía el cuerpo inerte de un gran chico.

-¡Yami, regresa! -gritaba mientras se aferraba con todas sus fuerzas al ataúd de su hermano.

Sora al ver la actitud de su hijo sufría en cuerpo y alma, ya que no tenía idea de como ayudar a su pequeño. Pasaron algunos segundos, para entonces Sora se acerco a Yugi y al ataúd en donde se encontraba descansando su difunto hijo. Toco el sepulcro al mismo tiempo que su hijo menor, recordando con ello un pequeño recuerdo sobre la infancia de Yami.

....RECUERDO......

Era 10 de mayo de 1997 en neo city domino. Ese dia era una fecha muy especial para Sora, ya que se celebraba el dia de las madres. Para entonces Yami tenía tres años de edad, mientras que Yugi apenas los cumpliría en julio. En el trascurso del dia, Yami coloreada en el piso de su sala tranquilamente, mientras su madre preparaba la comida y Yugi dormía en la habitación de ambos hermanos. Eran aproximadamente las 2:00 de la tarde, para entonces Yami estaba tan entunciasmado dibujandose junto a su madre con palitos y bolitas como lo haría todo niño a su edad.

-Lito... ya temine el dibujo para mi mamita -dijo con ternura mientras observaba el dibujo que había creado para su madre, para después de ello dirigirse a la cocina impaciente y lleno de alegría.

Lazos del Destino [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora