Kristen
Lo que ella acababa de decir me tomo por sorpresa, ¿Era cierto? ¿La había hecho sentir tan bien con aquel beso? Porque podría volver a repetirlo justo ahora sobre esta cama.
Pero no era el momento, o al menos eso crei.
Ya que Alice me estaba confesando cosas crei que podía aprovechar el momento y hacerlo yo también.
-¿Re-recuerdas el dia de la fiesta de Simon?- Le pregunté. Ella asintió.- Te mentí.
Su rostro cambio de curioso a sorprendido y luego a triste.
-¿Recuerdas que estuve llorando? ¿Y te dije que no tenía que ver contigo?- Volvió a asentir.- Lloraba por ti.- Baje la mirada con las mejillas encendidas.
-¿Por mi?- La oi preguntar.
-Te estaba buscando y te vi con Nick en el jardín, lo estabas besando y me sentí horrible. Ahi me di cuenta de lo mucho que me gustabas.- Concluí.
-Kristen yo...
-No, dejame terminar.- La interrumpi.- Me lo he estado negando a mi misma pero es que no puedo...- Suspire.- Me gustas Alice, me gustas mucho.
La estaba mirando directo a los ojos y sólo espere que no me echará de su habitación. Vi como trataba de hablar pero nada salía de su boca.
-Oh, mierda.- Dije cuando me di cuenta de lo que sucedía.
Ella probablemente no me quiera de esa forma ¡Por supuesto que no! Sólo soy su mejor amiga.
-Alice, olvida lo que acabo de decir. Esta bien si te sientes confundida y sólo quieres que seamos amigas, puedo aceptarlo pero por favor no te alejes de mi. Te dare tiempo puedo irm...
Intente levantarme de la cama e irme antes de hacer esto mas incómodo pero ella me atrajo a su cuerpo y atrapó mis labios en un beso corto.
-No podría olvidar lo que acabas de decir ni aunque me borrarán la memoria.- Habló sobre mis labios para despues volver a besarme.
Esta vez si seguí el beso inmediatamente tomándola de las mejillas.
-Dios mío, cuando te he extrañado.- Me separe un poco para poder decir eso y luego seguir.
-Lo siento... siento no haberte creído.... sobre lo de Simon... ni lo de Nick... lo siento...- Dijo entre besos.
-Siento haber sido tan idiota.- Dije para después dar el último beso.
-No eres idiota.- Dijo sonriendo mientras tocaba mi nariz.
-Si lo soy, y cobarde. Podría haberte dicho todo esto antes.- Me regañe mentalmente.
-Yo tampoco dije nada y te aseguro que cada dia me tenías más enamorada.- Beso mi mejilla.
-¿En serio?- Asintió.- Vaya...- Sonreí.- ¿Y que hay de Nick?- Tenía que preguntar.
Ella fruncio el seño.
-No tuvo importancia en absoluto, creo que yo también estaba intentando negar que me gustabas.- Bajo la cabeza.- De todas formas no funcionó.
Reí y le di un pequeño beso cerca de los labios.
-Debo admitir que me ponía muy celosa.
-¡Y tu a mi con Simon! Lo odiaba... Pero es un buen chico ahora que no está contigo, vi como te defendió.- Me acaricio la mejilla.
-Se ha vuelto un buen amigo.
-¿No debo preocuparme por el?- Rio.
-Claro que no.- Tambien rei.- Creo que es bisexual o algo así, todavía no me lo cuenta pero le dare tiempo.- Me encogi de hombros.
-Bien.- Dijo.- ¿Y tu?
-¿Yo que?- Levante una ceja.
-¿Qué eres?
No lo había pensado hasta el momento.
-No lo se, nada me llama la atención. Sólo tu.- Me encogi de hombros.
Sus mejillas se tornaron un poco rojas mientras sonreía y volvía a acercarce a mi para besarme.
-Siento que no puedo dejar de besarte...
-Entonces no lo hagas...
Sus labios eran tan suaves y la forma en la que ella me besaba me hacía perder la cabeza.
Me empujó un poco quedando encima de mi sobre la cama. Recordé cuando dijo "me molesta cuando no me tocas" y bajé despacio mis manos hasta su cintura.
Ella tenía una de sus piernas entre las mías y no sacaba sus manos de mi cuello.
Se sentía tan bien tenerla sobre mi besandome pero quería más de ella, así que tome el control de la situación y la voltee quedando yo encima de ella con cuidado de no aplastarla.
Un suspiro salió de sus labios antes de acercarme más a ella.
Sentí sus manos bajar por mi espalda muy despacio hasta que llegaron a mi trasero dando un apretón, me sorprendí pero pensaba separarme de sus labios, al menos por un rato hasta que baje por su cuello.
Sus manos se enredaron instantáneamente en mi cabello mientras besaba su cuello despacio sin preocuparme por dejar marcas.
Ella dejo escapar un pequeño gemido cuando succione su mandíbula y supe que si seguía no me detendría.
-¿Estás segura de esto?- Pregunte cerca de sus labios.
-Jamás estuve tan segura de algo.