INFERNO 3

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Capítulo 3

No codicies su hermosura en tu corazón, ni dejes que te cautive con sus párpados. Porque por causa de una ramera uno es reducido a un pedazo de pan, pero la adúltera anda a la caza de la vida preciosa. ¿Puede un hombre poner fuego en su seno sin que arda su ropa?

ADVERTENCIA : SITUACIONES DE ADULTOS

La sensación del metal frio contra su piel desnuda fue lo primero que percibió Yuri cuando la niebla de la inconciencia fue desapareciendo de su mente , sus sentidos despertaron de manera rápida , el pánico recorrió cada célula sensible de su cuerpo desde sus cabellos hasta la punta de los dedos , lo primero que noto fue que tenía los ojos vendados la oscuridad de la tela lo obligaba a residir en el reino de las tinieblas quien sabe hasta cuanto tiempo , sus manos dolían y ardían como la voz de infierno que lo trajo hasta ese purgatorio de pecados y mentiras , no podía percibir nada de luz , no podía ver , no podía moverse pues sus manos atadas de lado a lado y sus piernas un poco separadas igualmente obstaculizaban cualquier tipo de movimiento , ni si quiera podía producir un balbuceo pues sobre sus labios se encontraba una cinta que no permitía que sonido de angustia o plegaria absurda saliera de aquellos músculos que fueron creados solo para sonreír.

Una ráfaga de frio recorrió su cuerpo de manera más violenta que la anterior ,no escuchaba ningún tipo de movimiento en el lugar donde se encontraba , solo el sonido de un goteo proveniente de seguro de una humedad del techo , el recinto fue reinado por un silencio interrumpido solamente por el goteo de la humedad o simplemente por un balbuceo casi inexistentes producidos por el joven que yacía en una cama metálica expuesto como un animal al lado perturbarte y mórbido de aquellos lideres demoniacas del campo 432 , la mirada de Viktor vino como un recuerdo roto que viene solo para avivar las llamas del infierno que Yuri está viviendo, tan solo una vez en su vida lo había visto pero por una razón fuerte que desconocía esos ojos del color del cielo y el frio hielo de Rusia y sus cabellos color plato de un cielo gris apunto de llover lo hacía temer , hasta el punto de querer esconderse , dejar de existir o simplemente volverse ceniza junto a las llamas que producía ese hombre , para evitar ser sometido nuevamente ante esa mirada .

Ahí atado en la oscuridad ,desnudo en un lugar desconocido para el nuevamente pensó en su familia , en el olor de la comida de su madre , el tacto de su hermana sobre sus cabellos cuando terminaban de pelar , los abrazos de su padre cuando bebía y dejaba esa fachada de seriedad y dejaba fluir todo lo que su alma ya cansada guardaba , oh en que maldita situación se encontraba , cuanto dolía recordad que hace dos noches lo tenía todo pero en estos momentos sería sometido a la perversión de estos hombre , ya sin darse cuenta las lágrimas corrían libremente por sus ojos chocolate vendados , libre sin remordimientos ya sin miedo de perder lloro como el maldito cobarde que había sido toda su vida , como el idiota que alguna vez tuvo esperanza por un mundo mejor y por la conciencia que de seguro pronto perdería como lo hizo alguna vez el joven con la sonrisa más hermosa que había visto en toda su vista , su mejor amigo, a cada y uno de ellos los pensó hasta saciarse en las mieles de su pensamiento hasta que el salado de sus lágrimas se confundía como una segunda piel y el miedo se apoderaba más de su conciencia y la felicidad se escapaba de las manos para jamás volver.

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