5- Guardianes.

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A toda marcha volaba por aquélla carretera, completamente asustado, desconsertado, sin saber en que direccion ir, sólo conducía tratando de dejar a su espalda esas criaturas de tan grotesco aspecto.
"A que se referiran con que es el, que paso con Victoria y Jazmín, no entiendo absolutamente nada".
Perdido en pensamientos que atormentaban su lucidez al volante, trataba de unir nuevamente esas visiones con Los Caídos, con aquel muchacho que quería preparar la pérgola y contentar a su maestro. Muy pocas cosas cuadraban, pero seguian siendo confusas.
Continuaba viajando despavorido en dirección a la nada, sin tener dónde dirigirse.
Pisando aún mas el acelerador Dante mira por el espejo retrovisor y divida unas luces balizas, azul y blanca. "Mierda, la Policía", pero sigue conduciendo mientras que bajaba la velocidad como dejandolos pasar. Se ve que querían que se detenga, frena a un costado de aquella carretera que estaba rodeada por pinos frondosos, un oficial se dirije en dirección al vidrio del conductor golpeandola para que lo bajé.

-¿Porque iba a tan alta velocidad, no se da cuenta que esta es zona en la que cruzan animales podria ocurrió una trajedia? ¿porqué su cristal esta tan roto?

-Pperdon oficial es que llevo un poco de prisa, es que choque un pajaro. Tartamudea Dante.
"No puedo contarle lo de la fiesta, me trataran de loco" pensó.

-Permítame su permiso de conducir. Ordena el agente con tono altanero.
Dante saca de su billetera la licencia con mucha dificultad ya que no podia contener como le temblaban las manos, y se lo entrega. El policia va hasta su patrulla y de repente el tembloroso muchacho siente un fuerte dolor de cabeza, escucha un ladrido como de un perro proveniente del bosque. Una criatura enviste el vehículo del Policía aplastandolo contra uno denlos árboles dejándolo destruido, es entonces que Dante ve para atras donde yasia parada una criatura muy similar a Los Caidos pero esta si tenia ojos rojos, brillantes como luciérnagas, de ellos brotaba una especie de vapor color negro en su mano derecha empuñaba una espada curva color azul y en su mano izquiera una color roja. Esta alimaña montaba un perro enorme con pelaje pardo, muy similar a un lobo huargo.
Con los ojos abiertos como platós, rápidamente prende el motor del auto, escapando de aquélla escena. "mierda, mierda, vienen por mi estos bastardos" pensaba mientras apretaba el acelerador a fondo. Para su sorpresa a un costado venia esa bestia en su sabueso, y enviste con el un costado del Audi, provocando que éste se vuelque violentamente, cuando por fin deja de estrellarse contra el asfalto queda parado en sus ruedas. Dante estaba completamente bañado en sangre por revotar dentro del auto.
La criatura va con total tranquilidad ensima de su monta hasta el vehículo, entrella sus garras en la puerta dónde yasia él arrancandola con total facilidad, lo toma por el cuello como queriendolo sacar de ahi, pero afortunadamente se detiene ante el sonido de un relampago relámpago. La noche era totalmente oscura solo la iluminaban la Luna llena y los ojos de este Caido el cual tenia una apariencia muy distinta al de los otros, olisqueaba el aire como buscando a su presa, entonces estalla un grupo de rayos sobre la carretera, aclarando todo el panorama. Se veía sobre la ruta que venía un hombre de estatura baja, usando una capota color negra y una capucha, en su mano derecha llevaba una espada Katana con empuñadura blanca, a medida que caminaba aquellos estruendosos rayos caian detrás de él. Sacando su espada azul señala en dirección al caminante que venia hasta ellos.
-Atrápalo. Le ordena con voz ronca a su compañero de cuatro patas el cuál con un rugido se lanza, pero como si se ubiese desvanecido desaparese de enfrente de aquél huargo y con el los rayos, confundido olisquea el viento buscándolo, es entonces cuando aparece otra ves pero detrás de el con un pie delante y el otro atrás como si ubiese detenido ennuna corrida, con su mano izquierda sujetando la empuñadura de su Katana mientras que con la derecha sostenía la vaina, pero sin descubrir del todo la hoja de la espada, solo se veia un pedazo de la misma que resplandesia por voluntad propia, lentamente guarda ese brillante acero. Mientras el animal quedo inmóvil a sus espaldas, al terminar de envainar su espada el perro se parte perfectamente a la mitad y resuena un ultimo trueno que hace temblar el suelo.
Aquella criatura similar a un Caído penga un rugido bestial mientras corre, desapareciendo entre el bosque. Casi cuándo el muchacho misterioso de capota negra esta llegando al auto, Dante se desmalla.

Los caidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora