Capítulo 19

2.1K 175 24
                                    


Habían pasado unas horas de mi memoriosa charla con Travis, y la idea no dejaba de rondar en mi cabeza. ¿Robar una universidad? Había puesto los papeles sobre la mesa un millón de veces esas horas para encontrar la forma de aceptar su plan, pero por más que quisiera, lo veía casi imposible.

Luego de visitar mi casa no lo había vuelto a ver y el hecho de que ahora tuviese celular se hacía cada vez más molesto, porque no dejaba de mensajearme. Ya no era necesario que se parase en las esquinas de los lugares que solía frecuentar para encontrarme y poder charlar. Ahora sólo era cuestión de un click.

Me dirigía al instituto cuando me topé con Ana.

—Me duele hasta el más mínimo hueso de mi cuerpo —alegó—.

—Salir de fiesta un domingo tiene sus consecuencias amiga.

Ana se había decidido a ser más responsable este último año de instituto, pero cada día que pasaba demostraba más que no era capaz.

Al llegar al instituto, nos encontramos con Jo, que aún estaba un poco enojada conmigo, ya que siguía pensando que le ocultaba algo. No sabía cómo la situación, y me costaba demasiado evitar el tema cuando es de lo único que habla. No le podía decir la verdadera procedencia de Travis, porque aunque sé que se alegraría al saber que la Luna Azul cumplió mi deseo, también arriesgaría a que algo malo le pasase a Travis, y no me perdonaría si eso ocurriera. Ya tenía suficiente con haberlo alejado a él y a su hermano de toda su vida.

Unas cuantas horas después, nuestra jornada estudiantil por fin había finalizado y nos encontrábamos en el enorme patio principal, terminando algunas tareas de biología. Mi móvil sonó, era un mensaje.

«Estoy en la puerta de tu insti, podemos hablar?»

No respondí y le dije a las chicas que me esperasen, acto seguido me dirigí a la puerta. Travis estaba apoyado en la puerta del acompañante de su coche, observando atento la entrada. Cuando me vio aproximarme, se acercó rápidamente.

—¿Ahora qué? —me crucé de brazos y le pregunté—.

—Es el día. Te necesito —su mirada se tornó triste—.

Y por un momento, en verdad sentí que no tenía escapatoria. Ya no podía seguir negándome. Debía ayudarlo. Yo lo metí en esto y yo lo sacaré.

—De acuerdo. Te ayudaré. Pero tienes que prometerme que será sólo por ésta vez.

Su sonrisa deslumbrante y sus ojos brillando. Era lo único que necesitaba. Me abrazó y me levantó en el aire. Susurró "gracias" en mi oído.

—Necesito que vengas conmigo ahora. Pasaremos la tarde juntos y de noche me acompañarás, ¿qué te parece?

—Me parece genial —sonreí y continué diciendo—, espérame aquí, iré a avisarle a las chicas.

Él asintió y yo troté nuevamente al patio.

—Ana, necesito que le digas a tus padres que me quedo en tu casa. Déjame la ventana abierta, llegaré en la madrugada —solté apresurada—.

—Claro. ¿Está todo bien?

—Sí, tranquila. Necesito hacer algo con Travis y me demoraré. Y ya sabes cómo son mamá y pa... —dije y fui interrumpida—.

—¿Qué pasa contigo? —me cuestionó Jo—. Tú no eres así. Le mientes a tus padres, te vas con un chico que de repente pareces conocer mejor que a la palma de tu mano y nos ocultas cosas. ¿Quién eres y qué hiciste con mi amiga? —su voz destilaba enojo—.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 10, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Maravilloso DeseoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora