IV

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Sentí un leve ruido que llamó mi atención, saqué mi vista del televisor para enfocarla en la entrada principal donde la inoportuna castaña me sonreía ampliamente.

-Buenos días, rubio.

- ¿Qué haces aquí? -pregunté rodando los ojos, cada día era un infierno, estaba seguro de que la habitación ardía en llamas.

Ella me guiño un ojo y se metió en la cocina, frustrado la seguí.

-Una ya no puede visitar a su vecino sin que le pregunten qué hace ahí, qué hostil, dónde quedó el "siéntate como en casa".

-Primero-enumeré- es "siéntete", no "siéntate". Y segundo- dije sacándole el jugo de naranja que había sacado del refrigerador- nunca te he dicho eso.

-Igual ni me gustaba la naranja-rio encogiéndose de hombros.

Suspiré realmente irritado mientras volvía a sentarme en el sofá, podía sentir sus zapatos de tacón resonar detrás de mí siguiendo mis pasos.

-Vete. Estaba viendo un programa muy importante.

Por el rabillo del ojo pude observar cómo, sentada en mi sillón, su codo estaba apoyado en su pierna y su mano sostenía su cabeza. La sonrisa no se iba de su rostro.

-¿CSI? Qué dramático.

-Si no quieres verlo, te vas, pero no jodas.

-No me dejan salir.

-¿Quiénes?

-Tus amiguitos que juegan a los detectives prefieren que no salga.

En serio me cansaba su presencia, había algo en ella que quería pero no necesitaba, y claramente me guío solo por lo que necesito, para qué encapricharse con algo.

-Pues yo te doy permiso de salir, ve, sé libre.

-¿En serio?

-Vete.

-¡Muchas gracias, rubio! -saltó sobre mi intentando darme un abrazo, cosa que acepté pero rápidamente la alejé.

Ella corrió hasta la puerta y salió dando un portazo, creo yo, sin darse cuenta.

***

Los golpes en la puerta se repitieron nuevamente de forma insistente, y en ese momento caí en la cuenta de que sólo tocarían la puerta constantemente a las tres de la mañana si fuera algo importante.

Ni bien abrí la puerta sentí un cuerpo abalanzándose hacia mi. Me separé lentamente, que clase de persona toca la puerta a altas horas de la mañana a para abrazar a otra cuando no son nada; Laura Marano. Quién lo sospecharía.

La hubiera echado al instante si no fuera porque su maquillaje estaba corrido y no paraban de caer lágrimas de sus ojos.

- ¿Qué ha pasado?

Ella me miró directamente a los ojos y sentí como si me hubieran clavado una estaca en el centro del corazón, solo, me preocupé. Negó rápidamente y se volvió a aferrar a mi torso.

Todavía me faltaban cuatro horas para ir a la oficina, supongo que esa noche no dormiría.

***

- Entonces... ibas caminando y sentiste que alguien te perseguía ¿Nada mas?- asintió poco convencida- Laura...

- Bueno, está bien, me di la vuelta en un momento y había un hombre sonriéndome, pero, ya sabes, era perturbante.

- ¿Qué hacías caminando en la calle a esa hora?- pregunté mientras tomaba de mi café. Después de una hora completa de Laura completamente callada, y de dos tazas de café para no dormirme, había comenzado a contarme lo que había pasado.

- Eso no importa ¡¿Estas escuchando lo que digo?! ¡Un hombre me perseguía!

-Deja de gritar, vas a despertar a todos y dudo que se quieran despertar con tus gritos. El punto es que estas siendo vigilada por detectives, no te va a pasar nada.

- Parte de su trabajo es que no me pase nada, pero tampoco es que estes cumpliendo muy bien tu trabajo, tranquilamente podría no haberme pasado nada si no me hubieras dejado ir.

- ¡Tú no me íbas a dejar en paz hasta que te deje salir!

- Ajá.

- Como sea, tengo sueño, adiós, Laura.

- ¿Puedo dormir contigo?

- ¿Es necesario que te quedes aquí?

- Tengo miedo.

- Bueno, quédate, pero duermes en el sofá-hablé alejandome hacia mi habitación.

-¡Pero!

-¿Qué pasa ahora?

-No quiero dormir sola, tengo miedo-repitió.

-Ni lo pienses.

-Por favor-pidió agarrandome del brazo para que me gire a verla.

-Agh, bueno, pero no me toques.

Inmediatamente su sonrisa apareció, supongo que ya me había acostumbrado a esa curva en su rostro.

***

hOLAAAA, sé que es miércoles y no martes, pero, vinieron a arreglar mi wifi, y realmente, no arreglaron nada, y recién ahora tengo internet suficiente como para subir algo, lol.

Sé que es corto, pero es necesario que deje lo siguiente para el próximo capitulo y no junto con éste.

Quiero perdonarme otra vez por no actualizar en mas de un año, pero buenooo, ya estoy acá.

Las cosas se van a poner más interesantes, lo juro.

Próximo cap: 25 de enero. Promesa.

Bye mis hermosuras griegas.

Magui fuera~

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⏰ Última actualización: Jan 23, 2017 ⏰

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CSI: RauraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora