THOUSAND SUNNY HIGH SCHOOL

CAPÍTULO 3 - MONKEY D. LUFFY

Nami: Entonces... ¿Trajeron alcohol? ¿Eso no está prohibido dentro del instituto?

Robin: Así es. Pero parece ser que a las chicas de segundo les da igual, imagino que su lógica les dice que es la mejor forma de llamar la atención.

Nami: ¿No bastaba con un simple refresco? Es que no entiendo a los de segundo. Hasta ahora sólo sé de uno que no parece ser igual que el resto, por lo menos lo que aparentan ser. -Dije abriendo mi taquilla, dejando algunos libros para no ir demasiado cargada.-

Robin: Ya, pero de Ace tampoco sabemos mucho todavía. Imagino, o quiero creer, que habrá más chicos buenos.

Y aquella fue nuestra conversación desde que nos levantamos hasta que fuimos a clase. No hablamos de otra cosa por los pasillos. Robin me había prestado algo de ropa y me prometió ir de compras al terminar las clases. La verdad era que necesitaba un cambio en mi armario. A todo esto, nuestra conversación fue interrumpida por un idiota que me empujó contra las taquillas.

(?): ¡Cuidado!

Nami: ¡Si has sido tú, imbécil! -Dije fingiendo que el golpe no me dolió.-

(?): ¡Estás en medio!

Nami: ¡¿De qué hablas?! -Miré a mi alrededor. Todos los de segundo parecían estar allí, unos se reían y otros apartaban la mirada. Justo cuando vi a Kid ahí parado entendí la situación.- ¡¿Has sido tú, no?!

Kid: ¿Yo? -Empezó a reír con su compañero, el que ''chocó'' conmigo y provocó que me golpeara contra la taquilla.-

Nami: ¿Además de tonto eres ciego? A ti te estoy hablando.

Kid: Chica, si estás en medio no es mi problema.

Nami: Tú le has empujado a propósito, que no me chupo el dedo. -Vi como su compañero se reía, así que supe que estaba en lo cierto.-

Kid: ¿Y?

Nami: ¿Esta es tu manera de molestarme? Cuanta madurez, Kid.

Kid: Ts. -Se largó sin decir nada más, con su orgullo y ego por las nubes, la cabeza alta y una sonrisa de oreja a oreja.-

Robin: Menuda pandilla de borregos.

Nami: Y que lo digas.

Entramos en clase, la primera asignatura del curso. Estaba algo nerviosa, pero ansiosa a la par. Me senté detrás, al fondo, junto a Robin. Al cabo de poco llegó Vivi, la chica de pelo azulado que conocimos la noche anterior. Poco a poco fueron llegando todos, éramos bastantes. Las personas que más llamaron mi atención fueron varias. Dos chicos rubios y dos morenos. ¿Alguno de ellos sería Luffy? ¿O Sabo? Me apetecía conocer a los hermanos de Ace.

El profesor llegó al aula, el último. Era un viejo de largo cabello blanco, igual que su barba. Llevaba gafas y una vestimenta algo rara. Pese a ser un anciano, parecía estar en forma y sus ojos reflejaban, de alguna manera, sabiduría, experiencia, inteligencia.

Recordé que mi padre estuvo buscando información de todos los profesores de ese instituto en la red. Quería saber el nivel que tenía el profesorado que iba a darme clases a mí, y quedó muy satisfecho con lo que leyó. Pero yo seguía sin fiarme de nada ni nadie en ese centro, sólo de Robin y Ace, por el momento.

(?): Buenas a todos. Soy el profesor Rayleigh. -Dijo en tono seco, frío y sonoro. Se ganó el silencio de todos los alumnos al instante.- Espero que la adaptación en este centro os fuera bien ayer, pero lamentablemente para muchos hoy toca empezar con la materia y así lo vamos a hacer.-