La Bella Durmiente

Parte 8

Estaban a punto de marcar las 7:00 p.m. El rey Yoshiki y la reina Anna estaban en sus tronos, ya esperaban ansiosos el festejo de Mei. Kaoru le toca el hombro a Yoshiki, éste se voltea y lo escucha.

—Oye, tengo algo que decirte —dijo Kaoru.

—Sí, dime —dijo Yoshiki.

—Es sobre mi hijo, el samurái Ruki —

—Ah, es verdad, Ruki, bueno ¿Qué hay sobre él? —dijo Yoshiki.

—Ya viene en camino —dijo Kaoru

—¿Es todo? Yo pensé que era algo más relevante —dijo Yoshiki.

Allá afuera del castillo, se hacían presentes fuegos artificiales y todos los pueblos estaban reunidos, dispuestos a recibir a la princesa Mei.

Aoi, Reita, Uruha y Kai estaban en la torre más alta del castillo, viendo a Mei recostada en la cama con una rosa roja.
Ellos 4 lloraban inconsolablemente, sin saber quién la podrá despertar de ese eterno sueño. Luego se van al balcón a llorar.

—¿Qué hay del rey Yoshiki y de la reina Anna? —dijo Uruha con voz debilitada.

—Les partirá el alma al enterarse de eso —dijo Kai.

—No lo sabrán jamás —Aoi se limpió las lágrimas.

—¿Jamás? —preguntó Reita.

—Los mandaremos a dormir también; si Mizaki está en un eterno sueño, ellos también lo estarán. Y hasta que Mizaki despierte, igual, el pueblo despertará —dijo Aoi poniéndose los guantes, los 3 hicieron lo mismo.

—Vamos —Reita tomó la iniciativa.

🎶To Dazzling Darkness🎶

Ellos 4 se encargaron de dormir a todos.
Uruha desde el balcón durmió a los pueblos afuera del castillo lanzando estelas de magia con sus guantes.
Reita se encargó de dormir a los guardias y Kai durmió a los nobles invitados.
El ambiente en el reino se iba volviendo silencioso y muerto acompañado con una atmósfera grisácea.
Y Aoi... se encargó de dormir al rey Yoshiki y a la reina Anna, él intentaba dormir al rey Kaoru también.

—Y como te decía, Ruki se enamoró de una... aldeana —Kaoru hablaba dormido.

—¿¿Una aldeana?? ¿Quién es esa aldeana? ¿Dónde la conoció? —se sacó de onda Aoi y fue interrogando al rey Kaoru a pesar de que se estaba durmiendo.

—Este... La conoció en un... —Kaoru cerró los ojos y bostezó.

—¡Dime! ¡DIME! —insistió Aoi jalándole el bigote a Kaoru.

—En el bosque de sakura —dijo Kaoru y cayó dormido.

—¿En el bosque de sakura? ¡Es Mizaki!.... ¡OH DIOS, EL SAMURÁI RUKI ESTÁ ENAMORADO DE MIZAKI! —dijo Aoi con voz fuerte y de sorpresa.

Aoi fue corriendo hacia donde estaban los demás.

—Rápido, debemos ir a la cabaña —Aoi no dijo otra cosa más y se fue, Reita, Uruha y Kai fueron tras él.

Ya que abandonaron el castillo, emprendieron su viaje hacia la lejana cabaña.

Mientras tanto en el bosque de sakura...

El samurái Ruki iba cabalgando con Koron, dirigiéndose a la cabaña donde Mei vivía anteriormente. Ya al llegar a la cabaña, Ruki se bajó del lomo de Koron, se sacudió el poco polvo que traía en sus prendas y tocó la puerta.

—Pasa... —se escuchó la voz de Tsuzuku, y Ruki, ingenuamente, entró.

Cuando Ruki cerró la puerta, la cabaña estaba totalmente a oscuras y vacía; él estaba demasiado confundido que ya pretendía retirarse, pero él se percata de un sonido extraño que rápidamente volteó a ver.
Repentinamente, los peluches macabros (sirvientes de Tsuzuku) se lanzan hacia él y comenzaron a jalarlo, Ruki forcejeaba para zafarse de éstos pero fue totalmente en vano. Los sirvientes amarran a Ruki de los pies y brazos con una cuerda y lo amordazan.

—¡Miren! pero si es el samurái Ruki, me da mucha ternura tu ingenuidad para que hayas caído en la trampa —Tsuzuku habló barriendo a Ruki de pies a cabeza y luego soltó su macabra risa.

—¡LLÉVENSELO! —ordenó Tsuzuku a sus sirvientes, ellos accedieron y lo iban jalando de la cuerda.

Ya que Ruki, Tsuzuku y los sirvientes ya se habían ido, llegan los 4 madrinos.

—¡Oh no! —dijeron los 4 al unísono al ver una de las armas de Ruki tirada en el piso, Aoi la levantó del piso y sospechó.

—¡Tsuzuku! —gritó Reita entrando en pánico.

—¡Secuestró al samurái! —dijo Kai.

—Se lo llevó a la montaña de la rebelión negra —dijo Aoi.

—Pero ahí no podemos entrar —dijo Uruha aterrado.

—Claro que podemos, y debemos ir —se armó de valor Aoi.

Y los 4, dejaron sus miedos atrás y se han dispuesto a rescatar a Ruki.