YOU ARE MY DESTINY; Hyuuga Neji. [1] ✓

002.

La encargada del segundo examen nos hizo entrega de unos formularios de consentimientos para que así no se le culpara de cualquier muerte o accidente que hubiera en el bosque de la muerte.

—¿Has averiguado algo, Shizuka? —pregunté al verla llegar a mi lado.

—Por supuesto.

—¿Dónde está Mei?

—Aquí estoy —dijo llegando a nuestro lado—. También he averiguado varias cosas.

—Eso nos facilita más las cosas —dije—. Andando debemos de dirigirnos a nuestra puerta.

Las tres nos hemos ido a nuestra puerta asignada donde estuvimos esperando un rato hasta que finalmente aquella reja que impedía el paso hacia el bosque de la muerta ha sido abierta. Nosotras nos hemos adentrado a aquel bosque de manera rápida para comenzar a buscar el pergamino que nos hacía falta y así luego dirigirnos a la torre.

Encontrarme con Neji y que volviera a mencionarme que debía de retirarme me estaba molestando bastante.

Sinceramente no esperaba encontrármelo una vez me he separado de mi equipo para hacer la búsqueda más fácil. Creí que me encontraría con un equipo de novatos o con alguno que estuviera descansando, pero encontrármelo a él no lo imaginé.

Él tampoco se encontraba con su equipo, él estaba solo e imaginaba que era por la misma razón. Ambos hemos pensado en separarnos de nuestros equipos para buscar el pergamino faltante.

—No te gusta que se metan en tus asuntos —dije—, pero si te metes en los asuntos de los demás. Eres un hipócrita.

—Solo...

—No me vengas con que estás preocupado porque te aseguro que te golpearé.

—No puedes golpearme.

—¿Estás seguro de ello?

—Sí.

Oírlo me hizo enfadar e iba a golpearlo, pero escuché unos ruidos por los arbustos por lo que he lanzado un Kunai en esa dirección ocasionando que alguien chillara.

—Salgan de ese lugar.

—¡Oh! Que sorpresa encontrarme en este lugar al novato número uno del año pasado, Hyuuga Neji —dijo una chica rubia que salía de aquellos arbustos junto a sus dos compañeros—. Incluso está acompañado de la otra sobreviviente del clan Uchiha.

—¿Nos dan su autógrafo?

Oír aquello hizo que me enfadara más de lo que ya estaba.

Nos encontrábamos en un examen donde podíamos hacer lo que quisiéramos para obtener el pergamino faltante por lo que podría desquitarme con estas personas y nadie me diría nada.

—Fuera de aquí —dijo Neji con un tono serio—. Si uno de nosotros le robara el pergamino a unos fracasados como ustedes se reirían de nosotros.

Aquellos muchachos me miraron un momento para luego huir y ante aquello me he frustrado debido a que no podría desquitarme con ellos.

—No hables por los demás —le dije seriamente—. A mí me da exactamente igual lo que los demás piensen de mí.

—Sé muy bien que querías desquitarte con esas personas.

—Deja de meterte en mis asuntos. Yo no me meto en los tuyos —dije—, y no me vengas con ese discurso de que somos amigos porque no lo somos.

—Tranquilízate —dijo mirándome fijamente y como siempre mirarlo me calmaba. No entendía el por qué con solo mirarlo hacía que toda mi tristeza y la rabia que sentía se esfumara como si nunca hubiera existido.

—He tenido suficiente.

Antes de irme he vuelto a escuchar unos ruidos entre unos arbustos por lo que he creído que se trataba del mismo u otro equipo, pero lo que salió entre esas hojas ha sido una serpiente. Aquella serpiente se ha detenido frente a nosotros mientras nos miraba a cada uno, pero sus ojos se han fijado principalmente en mí.

—¿Con quién debería de quedarme?

La sorpresa en nuestros rostros no ha tardado en llegar en el momento en que hemos oído hablar a aquella serpiente.

—¿Qué...?

Inesperadamente aquella serpiente comenzó a escupir a una persona, la cual no dejaba de mirarme con una sonrisa que hacía que todo mi cuerpo se paralizara. Un miedo inmenso comenzó a apoderarse de mí tal como la vez en que encontré los cuerpos del clan Uchiha.

—Me pregunto cuál de los dos sobrevivientes del clan Uchiha será el más adecuado —sonrió de manera siniestra y de manera inexplicable su cuello se alargó hasta llegar a mí—. Esto es un regalo de mi parte.

He sentido sus dientes aferrarse en mi cuello. Mi cuerpo comenzó a calentarse, mi respiración se volvió agitada y mi mente comenzaba a nublarse.

Aquella persona que se movía como una serpiente ha reído para luego desaparecer entre aquellos arbustos como si no hubiera sucedido nada. ¿Quién demonios era?