Jercy

4.7K 105 31
                                    

Pov; Percy

La noche estaba llena de sorpresas, llena de besos húmedos y suspiros, gemidos arrancados desde lo más profundo del pecho, mordidas que dejarían marca por varios días y chupetones que marcaban piel caliente.

Estaba sorprendido de la facilidad que poseía en ese momento para perder la poca capacidad racional que me quedaba, los pensamientos que tenía sobre todo se esfumaban, todo era Jason, su olor, su sabor, su calor, su cuerpo, mis cinco sentidos estaban acaparados en el chico en mis brazos, sus gemidos y jadeos hacían coro en los míos y toda la habitación estaba de pronto llena de su olor, de nuestros sonidos, de los sucios besos que repartíamos en cada pedazo de piel que alcanzábamos, las palabras estaban de sobra en ese momento hasta que no lo resistí más.

Jason enredo su lengua en la mía por quien sabe qué vez en la noche y yo chupe sacándole un gemido que me hizo temblar, estaba seguro de que podría venirme solo con escuchar los gemidos de él.

-¡JASON!—grito de pronto y yo me aleje de sus labios de mala gana para verlo a los ojos, sonreí de forma lasciva cuando el jadeo mi nombre una vez más echando la cabeza hacia atrás, yo lo mire intentando no perderme ninguna reacción mientras apretaba su erección en mi mano y lo masturbaba más rápido, me había colado dentro de sus jeans y ahora estaba masturbándolo tal como me gustaba cuando me hacia una paja yo mismo, rudo y sin pudor, Jason parecía fascinado y enteramente excitado si sus gritos de placer me decían algo

La cosa se estaba poniendo ardiente, los pantalones de Jason estaban debajo de sus rodillas, sus caderas se alzaban hacia mi mano moviéndose con fiereza, los sonidos que salían de su boca se perdían en la mía, básicamente estábamos respirando sobre la boca del otro, nuestras lenguas se encontraron de nuevo y yo solo pude besarlo sin control, la tensión sexual era evidente, Jason estaba frenético en mi regazo, yo estaba sentado en la cama en la habitación a la que Jason me había metido casi a rastras, no era como si yo huibera puesto mucha resistencia en realidad.

-P.per-cy—gimió largamente mientras se derramaba caliente y abundante en mi mano, seguí acariciándolo exprimiendo cada gota de semen, él lucia totalmente precioso allí, agitado, sudoroso, excitado, su erección no había bajado mucho a pesar del orgasmo por lo que mi meta era exprimirla por completo, me relamí los labios en anticipación, estaba tan excitado allí mismo, estaba tan duro y en lo único que podía pensar era en Jason, Jason y sus ojos azules, Jason y su piel suave y perfecta ,Jason, el chico que estaba en este instante sonriéndome travieso mientras se deslizaba de mi regazo al piso y bajaba mis pantalones, Jason, el chico que había habitado mi mente desde el primer instante, desde la primera palabra, desde la mirada más significativa hasta la más inocente—déjame devolverte el favor—susurro con una sonrisita y la voz baja y ronca, Jason sabia excitarme solo con su voz eso ya estaba claro, él tomo mi extremadamente dura erección en sus manos y sonrió, lo mire jadeante, mi respiración caliente y pesada era todo lo que se podía escuchar en la habitación, algo dentro de mi mente se removió inquieto y anhelante cuando vi el rostro sonrojado de Jason frente a mi necesitada erección

-Jas-AH—mi voz se cortó en un grito y su nombre no pudo ser totalmente dicho debido a que el travieso chico frente a mi había sumergido la totalidad de mi pene dentro de su boca, la húmeda cavidad me engullo de inmediato y yo solo pude echar mi cabeza hacia atrás y jadear con fuerza, el chico me hizo ver estrellas, estaba totalmente rendido, mi cuerpo cayó de espaldas al colchón y gemí ronco cuando Jason enredo su lengua y raspo un poco con sus dientes haciéndome delirar de placer, solté un sonido casi sollozante cuando Jason se apartó pero mis ojos se cerraron casi de manera automática en sumo placer cuando el chico deslizo su lengua por mis bolas, todo fue blanco en el instante en el que el regreso su atención a la punta de mi pene jugando con su lengua y volviendo a tomarme por completo, mis caderas intentaron moverse hacia arriba para enterrarme más profundo pero inteligentemente el chico me sostuvo impidiéndolo y retirándose sin antes dar una particularmente buena chupada a todo lo largo de mi erección.

-Aun no chico malo—murmuro excitado subiendo de nuevo por mi cuerpo hasta mis labios, sonreí un poco cuando sentí su aliento en mi rostro y rápidamente lo jale para un beso duro, el gimió y aproveche para colar mi lengua en su boca, nuestros cuerpos se frotaron juntos, su pene ya estaba erecto de nuevo y la sensación de este frotándose contra mi estaba causándome la locura.

Lo siguiente que supe después del ardiente beso fue como un sueño, calor, sudor, olor a sexo por todas partes, piel ardiente debajo de mí, una boca húmeda en mis dedos y ojos azules, siempre mirándome, siempre fijos en mi aun cuando me empuje dentro con el mayor cuidado posible después de prepararlo, el calor aumento en cantidad de una manera increíble, la estreches del cuerpo ajeno aprisionaba mi erección con fuerza, sus gemidos de dolor me hicieron poner el bienestar de él antes que mi propio placer, susurre palabras consoladoras en su oído mientras esperaba que él se acostumbrara a mi dentro de su cuerpo, pareció pasar una eternidad donde solo perduraban los besos lentos pero profundos que nos hacían suspirar antes de que el moviera sus caderas dándome pase libre para comenzar a moverme, todo fue mejorando a cada estocada, tocamos el infinito con los dedos, rosamos con nuestras pieles el universo y explotamos en luz blanca y cegadora casi como una explosión estelar, de nuestros pechos surgió un grito que pudo haber sido escuchado en el firmamento entero, Jason se corrió abundante y ardiente entre nuestros cuerpos manchando mi pecho y su estómago, yo en cambio llene con mi semilla su estrecho canal sintiéndome en la gloria.

Nuestras alteradas respiraciones era lo único que se escuchaba en la habitación, Jason estaba a mi lado aun intentando calmarse después del increíble orgasmo que compartimos y yo estaba igual. fue repentino el como Jason se giró a mirarme con una sonrisa avergonzada que desconcordaba con todo lo que habíamos hecho, aun así se la devolví enternecido, él se acercó acurrucándose a mi lado y yo de inmediato lo envolví entre mis brazos suspirando al sentirlo tan cerca de mí de nuevo.

-Jason—murmure contra su pelo cuando lo escuche y sentí bostezar al mismo tiempo que se acomodaba posiblemente para dormir—los chicos van a preocuparse mucho porque no llegamos—susurre apegándome más a él y acomodándome también sintiendo pesado el cuerpo y los parpados cerrándose.

-No me importa, esto es demasiado bueno como para no disfrutarlo—murmuro medio dormido, emití una risita antes de asentir y besar su cabello y luego su frente, sentí su sonrisa en mi piel antes de que el levantara la vista dejándome admirar sus hermosos ojos verdes—¿vas a besarme Jackson?—pregunto burlón cuando mi mirada paso a sus labios, sonreí con travesura.

-Voy a besarte Grace--dije divertido antes de inclinarme y tomar sus labios dulcemente, el me correspondió gustoso, nuestras bocas danzaron juntas acariciándose y reconociéndose, su sabor me embriago en cuanto nuestras lenguas se encontraron, no fue pasión ni deseo lo que nos movía, solo un beso lleno de cosas nuevas que ambos experimentábamos quizá por primera vez, no era la simple acción de besarse ni la excitación y locura del momento pero tampoco era amor...no aun al menos.  




Nueva Historia !!!Espero que les encante!!!!!!!!!!!!!!!!!

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 25, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

P.J. Lemons 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora