Corazón Robótico / Parte 3

26 0 0
                                    

Después de que la adaptación del delerium estuviese terminada, quedé prácticamente inconsciente. Cerré mis ojos, sentía el ardor en mis nervios; estaban al rojo vivo. Antes de la operación no quería cortarme un brazo, ahora pagaría para que alguien lo hiciera, solo para poder calmar mi dolor.

Tenía dificultad para respirar, necesitaba más aire del que mis pulmones podían soportar, mi corazón era el mas afectado, sentía que estallaría en cualquier momento.
Necesitaba hacer algo y pronto, después de todo, morir a éstas alturas del experimento era mala idea.

Mi cabeza trabajaba a su máxima capacidad para buscar una solución, pues no podía simplemente morir, me rehusaba a hacerlo.

La primera solución era poner una válvula de presión sanguínea y una de oxigeno en la prótesis, pero la idea era estúpida en todo aspecto, era imposible, mi corazón estallaría al primer momento de activarla. La solución era obvia, pero hacerla era jugar al muertito en la plancha.

Debía remplazar mi corazón y mis pulmones, pero, ¿cómo? No puedo hacerme un trasplante a mi mismo, obviamente.

Confiar en los robots era una posible solución, era algo seguro, pero a la vez estaba jugando con mi propia vida, necesitaba un médico clandestino con experiencia, aunque era igual o peor en el sentido de mi propia seguridad.

Terminé buscando un médico de verdad, pero que hubiese perdido su prestigio y su trabajo, encontré un ex cirujano experto en trasplantes, su nombre era Ayrton Haxwell, quien perdió su trabajo, después de que su último paciente terminara en la morgue después de que el Dr. Haxwell hiciera mal un trasplante de corazón. Revisé todo el caso antes de ponerme en contacto con él, quería mi vida, costase lo que costase; después de todo no quería terminar como un chiste irónico de la medicina y la ciencia.

Viendo las pruebas, me di cuenta de que había sido error de Haxwell, pero fue accidental, la sutura en una de las arterias no la realizó correctamente, eso fue lo que le costó la vida al paciente, sabía qué es lo que yo debía hacer para evitar que algo así me sucediese.

Gracias a mis brazos robots, tuve la idea de hacer un corazón robótico con las conexiones entre venas y arterias en delerium para evitar problemas durante la cirugía.

No pensaba hacerlo completamente de delerium, pues no sabía que ocurriría realmente con mi cuerpo, respecto a que el delerium siempre quiere mas.

Mi nuevo corazón funcionaba, logré encontrar la forma de engañar a un cuerpo para que lo pudiese aceptar, por esa razón las venas, arterias y conductos eran de delerium, para que pudiesen fusionarse con mi cuerpo.

Contraté a Haxwell de forma clandestina, lo llamé y acordé una reunión con él, en mi cabeza todo apuntaba a que aceptaría mi oferta, pues no había algo mejor que él pudiese hacer.
La reunión fue en una casa abandonada, a falta de mejores opciones, pues los medios de transporte del buen doctor Haxwell eran sus piernas.

Una vez en la casa, entré, vi toda la madera desvencijada y rota, cediendo ante las inclemencias del ambiente, se podía ver parte de la luz de la luna entrando por las múltiples fisuras y agujeros en el techo.
Escuché los pasos del doctor acercándose a la entrada de la casa para concluir con un empujón fuerte contra la puerta, aplicando su peso en la misma, apoyándose en su hombro.

-¿Hay alguien aquí?- dijo al aire justo después de entrar.

Me acerqué a él desde las sombras-Mucho gusto, mi nombre es Hadrien Gothorst -

-¿Hadrien Gothorst? ¿El hombre que busca la policía por fraude?- dijo Haxwell en tono asustado y preocupado.

-Sorpresivamente, si, soy ese Hadrien, he venido a proponerte un trato-

-¿Qué clase de trato?-

-Necesito tu experiencia y tus dotes de médico para que me ayudes-

-Lo siento, me retiraron desde hace mucho, no puedo ayudarte-

-Por favor, eres mi última esperanza, mi vida depende de que me ayudes-

-¿Qué necesitas que haga?- dijo Haxwell un tanto desconcertado

-Necesito que me hagas un trasplante de corazón-

-No, cualquier cosa menos eso-

-Confío en ti, revisé lo que sucedió en ese quirófano, al más mínimo detalle, sé que no fue tu culpa, se te inculpó, pues el hospital nunca se pensó hacer responsable, aunado a que otros doctores ya no te querían como competencia, puedo darte dinero suficiente para que vuelvas a vivir casi como antes, pero necesito tu ayuda-

-Ah, mi antigua vida- Dijo Haxwell en tono melancólico y un tanto sensible - Siempre he querido mi vida de vuelta-

-No puede ser igual, sabes que no puede, pero será muy parecida, es lo que te ofrezco a cambio de tu ayuda-

-De acuerdo, ¿qué debo hacer?-

Historias fuera de tiempo y contextoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora