Capítulo 2: "El chico de pelo rosado"

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Narra Lynn.

—Ella siempre ignora a la gente ¿que se cree?— oigo los susurros de las chicas sentadas junto a mi. Ni porque estamos en la hora de almuerzo dejan de molestar y joder la vida.

Apago mi aparato con disimulo.

Desde que entre a preparatoria trato de evitar que la gente sepa que estoy sorda. Los únicos informados de mi condición son los maestros. Solo necesitó que ellos lo sepa. ¿Para que deberían saberlo los estudiantes? ¿para que me tengan lastima? ¿para que actúen hipócritamente conmigo? Lo siento pero no gracias.

Al terminar mi comida me levanto y tiro mi basura. Salgo de la cafetería.

Las clases siguieron como de costumbre. Aburridas. Al terminar la escuela decido salir a caminar por la ciudad antes de ir a mi fastidioso trabajo.

Voy pasando entre los locales que se encuentran en mi camino y me detengo frente a una dulcería. Supongo que un aperitivo no me vendría mal.

Entro a la tienda. Esta lleno de estantes con varios tipos de dulces. De chocolate, vainilla, menta, fresa, miel, maracuya, incluso hay dulces de vegetales. ¿Quien rayos compraría eso? Los dulces son la droga de cualquier niño con necesidad de azúcar, si no lleva azúcar entonces no es un dulce. ¡El nombre los dice gente! Dudo mucho que alguien compre esas cosas que se hacen llamar dulces.

—¡Unos con forma de champiñion!— el grito de alguien emocionado a mis espaldas hace que quite mis vista de los estantes de dulces.

Un chico de pelo rosado esta a mi lado tomando un a bolsa de bombones.

¿Que con su pelo?

Eso no Lynn.

—¿Porque se alegra tanto por unos tontos dulces?

—¿Porque no habría de alegrarme?— el chico de pelo rosado ahora me esta viendo con una enorme sonrisa.

—¿Eh?— digo con el ceño fruncido. ¿Acaso lee mis pensamientos?

Me mira un momento tratando de descifrar mi rostro con fundido.

_Creo que ni siquiera te has dado cuenta de que lo que dijiste antes lo dijiste en voz alta— hace una pequeña risa.

Hago un fuerte suspiro y me alejo de ese chico extraño de pelo rosado. Se ve q es alguien con quien no debo lidiar.

—¡Hey!— oigo un grito a mis espaldas. Giro y veo al pelirosa correr hacia mi.

Al llegar a mi me doy cuanta de lo enorme que es este sujeto. Apenas le llegó al hombro. Mi cuello duele al querer mirarlo a la cara.

Habre la boca para hablar pero el sonido de su celular lo interrumpe.

Contesta.

*¡¡¡¡ZAAAACK!!!!*

El chico de pelo rosas aleja el celular de su oído tras el grito que se oyo. Hasta yo lo oí. Pega de nuevo el celular y contesta.

—¿Que pasa Bri?

*¿¡Como que que pasa!? ¡Necesito que me ayudes con el treje para el concurso de cosplay y tu no contestas el celular!....¡Joseph deja mi traje pequeño enjendro que esto vale mas que tu vida! ¡Zack mi hermano me esta molestando!*

Kiss MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora