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NARRA  __

Cuando llegamos a Venecia los dos estábamos muy cansados, aunque habíamos dormido un poco en el avión habíamos terminados muy agotados después de todo lo ocurrido física y emocionalmente.

Al llegar al hotel, y que nos entregaran la habitación nos dirigimos a esta.

-Mm... bueno tu te puedes quedar aquí, yo veré si puedo conseguir otra habitación- Dijo Abraham nervioso.

-Nos mantienen vigilados- Dije mientras exploraba la habitación para familiarizarme con esta.

-¿Como?- Se notaba que estaba confundido, había notado al llegar que algunas personas nos seguían. Aparte digamos que escuche como la directora le recomendaba a la madre de Abraham (Ahora mi suegra) que era mejor que nos mantuviera vigilados durante el viaje.

  - Escuche como tu la directora le decía a tu madre que era mejor que nos mantuviera vigilados durante el viaje para tratar de que todo saliera bien-Dije mientras me sentaba en la cama.

-Entonces-  Me motivaba a seguir.

-Sera mejor  dormir en la misma habitación por el momento, claro a menos que quieras tener algún lió. Este tipo de matrimonios se hacen por un motivo, y en algunas ocasiones por un tiempo, si te quieres librarte de mi sera mejor que tratemos de hacer esto lo mejor y mas convincente posible-Mientras lo miraba a los ojos solo podía recordar todo lo que las chicas habían informado y descubierto de esos tratos, mas aun no sabían que tipo era el mio.

En sus ojos solo veía enojo, sin que me diera tiempo de reaccionar se dirigió a mi y me beso, pero no fue ese beso de pico que nos dimos en la iglesia, si no que fue un beso feroz pero a la ver tierno y lleno de amor, sin pensarlo me deje llevar por el momento. 

-Escúchame bien, no me quiero separar de ti por nada en el mundo, si se que apenas nos conocemos, pero eso no impide que te ame con locura. Te has robado mi  corazón desde el primer momento que te vi- Decía mientras mantenía nuestras frente unidas- Y no estoy actuando es verdad.

Había notado en mis ojos la ligera sospecha de que lo estuviera haciendo encaso de que nos estuvieran viendo, pero al saber que todo eso era real me alegro porque a los dos nos había pasado lo mismo, el se había robado mi corazón.

Al momento volvió a unir nuestros labios en un tierno beso... 

Casada a los 15(Abraham Mateo y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora