-Señor quedan cuatro días
El eco, retumbo por cada habitación del palacio, mas nadie se dignó a responder
-Señor...creo que es hora de sacarlo y que nos haga saber su decisión
Otra vez el silencio se dejó escuchar por todo el mundo, ¿Qué debía hacer ahora? ¿Debería añadir algo? ¿Esperar a que su señor hablase?
-Insolente, llama a Vaati, es sabe lo que hay que hacer
El pobre criado solo asintió
-¿Acaso no me has escuchado? ¡Lo quiero ya!- grito, atemorizando a todos los que se encontraban en esa sala
Una vez desierta, solo se escucharon sus propios pasos acercándose a un espejo gigante, en cuyo reflejo se podía ver a Dark junto a Link, mas Dark parecía distante, enfocado en otra cosa, o persona
-Maldito niñato, le doy lo que quiere y si siquiera se conforma-susurro lleno de rabia, aunque una pizca de maldad rebosaba entre sus gruesos labios
-¿Me ha mandado llamar?
-Acércate y mira
Con la arrogancia y superioridad dignas de su ser, se acercó hasta la imponente figura y miro con desagrado a aquella persona que le mostraba
-Estamos perdiendo el tiempo-Dijo al final, sin observar ningún cambio importante en el flujo del espejo- podríamos haber matado ya al Héroe del tiempo y a la princesa, estar gobernando ahora sobre Hyrule
-Siempre tan impaciente e insensato, fíjate bien Vaati
Vaati volvió a mirar aquello que con tanta insistencia le mostraba
-¿Sus sentimientos han cambiado?
Vaati regreso su vista, buscando una respuesta convincente que darle
-Curiosidad, yo diría que sus sentimientos siguen siendo los mismos
-Entra ahí y tráelo de vuelta cuando lo consideres oportuno
Vaati sonrió
-¿Puedo divertirme con el Héroe?
Ganondorf rio, antes de volverse a ver a Vaati por primera vez desde que había entrado en la sala
-Haz lo que quieras, pero trae a Dark Link, necesito su respuesta
Vaati asintió y se adentró en el espejo, que fue absorbiendo s cuerpo, hasta que en aquella sala solo quedo el portador de dos de las trifuerza.
-Solo cuatro días, no lo olvides Vaati
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-Dark ¿quieres que te ayude?
Dark se giró, mirando a Link quien ya estaba preparado
-Puedo yo solo
Y es que Dark llevaba más de media hora intentando atarse un Kimono color negro grisáceo, pero en un principio no había pillado ni por donde ponérselo, Link por otro lago llegaba el pelo recogido en una coleta aja, con un kimono azul claro, con pequeños círculos plateados.
Se podía decir que iban a llegar tarde
-Ya está, ¿Qué tal me queda Link?
Link se rio mirando a su pelinegro