Thalia y el cuento magico

Capitulo 4: Descubriendo la verdad

     El sueño, que antes se veía tan cerca, ahora solo se notaba tan lejano que no lo podía creer, el insomnio era algo que ella nunca había experimentado, sin embargo aquella noche de luna creciente; hacia su primera aparición, haciendo que Thalia atesorara las horas de sueño que en un pasado no muy lejano lograba conciliar. Aquella noche no estaba siendo del todo productiva, en el buen sentido de la palabra, sin embargo Thalia que este momento se encontraba algo histérica con una carta en la mano, mejor dicho, una nota, daba vuelta en su habitación de un lado a otro, mientras tres personas mas la observaban y trataban de calmarla. Te preguntaras ¿Como aquella joven llego a ese extremo? ¿Que fue lo que paso? ahora bien, yo me encargare de hacértelo saber.

     Luego de dejar aquel libro misterioso sobre la mesa, se dirigió a su cama; subió la escalera en espiral y llego a su cuarto, nuevamente tuvo que entrar dando algunos saltos y esquivando algunos montones de ropa sucia o libros desperdigados en el suelo. Llego a su cama y se abalanzo sobre ella, dándole un fuerte abrazo a su almohada hecha de plumas de cisne; Sostuvo los ojos abiertos el tiempo suficiente para recapitular todo lo que había hecho aquel día, y ademas para pensar en todo lo que haría en el día siguiente, con aquellas tres personas mas, y ademas el libro misterioso, que había encontrado en un  árbol hueco de su jardín; a plena vista el libro ya no denotaba aquel resplandor extraño. ¿Seria prudente plantear el tema del libro mañana? a su parecer era la manera mas fácil de conseguir ayuda con respecto a lo podría significar tal obra literaria, pero aparte de eso Thalia tenia miedo de abrirlo estando ella sola, y que pudiese pasar algo mas extraño.

     Luego de unos minutos, Thalia ya se encontraba dormida en la cama; su respiración  calmada y su esbelta figura cautivaban el ambiente, sus escasos movimientos protagonizaban todo un ajetreo en aquel calmado cuarto. No transcurrieron mas de treinta minutos cuando aquella joven se encontraba nuevamente despierta, al parecer el hecho de encontrar aquel libro había causado gran impacto en la curiosidad de Thalia, pero nada podía hacer hecho para saciarla ya que el miedo por abrir el libro estando sola, aun estaba presente. Durante algunos momentos, se quedo sentada en el cuarto frotándose los ojos y en algunas ocasiones observando el horizonte a través de la ventana de su cuarto; que por decisión de ella estaba a la altura de la cama.  

     — ¡ah! maldición, quiero dormir, estúpida falta de sueño. - Exclamo Thalia, mas para desahogarse que para dar a entender el hecho que tenia bastante sueño, pero ¿a quien iba a darle a entender eso?-. 

     Los minutos seguían transcurriendo, y sin embargo Thalia todavía albergaba aquella curiosidad insólita de abrir aquel extraño libro pero puedo mencionar que ahora el miedo también había pasado a ser curiosidad. Sin mas que temer se levanto de la cama y con su paso decidido camino hacia la salida del cuarto. Abrió la puerta y salio con una rapidez que no era mas que ansiedad; ansiedad por averiguar todo ese libro, ansiedad por saber que hacia en su jardín, ansiedad por saber que era ese extraño resplandor. Bajo las escalera en espiral saltando los escalones de dos en dos, hasta alcanzar los últimos tres, que los paso de un solo brinco. Recorrió el corredor que dirigía hacia la cocina, en la cual había dejado el libro; justo encima de la mesa de comer. Al llegar la tensión dominaba el ambiente, estaba a punto de abrir un libro completamente misterioso, y que al parecer había llegado por arte de magia a su jardín ¿seria magia? ¿y si el libro era mágico? aquellas dos preguntas en su cabezo de abalanzo sobre la mesa, tomo una silla y se acomodo con una rapidez que casi, la hace caer. 

     Ahí se encontraba, al lado de un par de cubiertos un libro viejo con ambas caras hechas de cuero, ademas, estaba sellado con una tira igualmente hecha de cuero. en la portada se leían letras en un idioma desconocido pero a Thalia aquellas escrituras le parecieron muy parecidas al latín. Con su mano derecha tanteo la portada de el libro, hasta encontrar el cordón, lo desabrocho, y antes de abrirlo se coloco nuevamente de pie. ¿Que hacia? pues eso ni ella misma lo sabia. Nuevamente camino hacia su habitación, en cuanto estuvo en ella, se abrió paso hacia la cama y sin mucha demora se sentó en el centro de la cama. Coloco el libro en el regazo de sus piernas, aspiro aire en bocanadas exageradas y separo lo portada para dar paso a la primera pagina del libro. Una nota, si eso fue lo primero que se encontró, al pie de la primera pagina del libro se encontraba una nota escrita en Castellano, Sus manos con temblores que podían apreciarse a plena vista se enmarcaron en ambas partes de la nota, la tomo y la alzo a tiempo para que la luz de la luna, diera a descubrir sus palabras.

     ~ Libro perteneciente a la colección "black soul's" ~
~ Propiedad de la Familia Matius; Familia de Invocadores ~

     ¿Matius? pero si ese era su apellido, como podía ser ese libro perteneciente a su familia si desde que tenia pleno uso de razón jamas los había conocido, no sabia donde vivían, si habían muerto, si habían siquiera existido; contaba con un solo pariente que se había encargado de cuidarla, pero que lastimosamente había caído en la demencia hace mas de cinco años, desde entonces no lo había visitado en el internado donde se encontraba. Sin dar mucho crédito a aquella nota, la aparto y la coloco encima de un a mesa de noche que ademas de portar una lampara tenia un vaso de agua. Paso de de pagina ahora se leía claramente el titulo del libro, el cual estaba escrito en latín.