delivery

༒

Capítulo diez:
Los amigos son amigos para siempre y por siempre dijo Barney

Takemichi luego de recoger al pobre rubio lo primero que hizo cuando lo vio agachado en em parque corrio para abrazarlo, Chifuyu sintio como toda su cara se aguado y lloró sin mas, Hanagaki jamás habia escuchado llorar asi a su mejor amigo ni cuando Peke J su pequeño gatito fue operado por un problema en el ojo o cuando su madre no le compro aquel manga edición limitada, esto era diferente. Este era un Chifuyu con el corazón destruido de verdad y eso hizo que algo dentro de Takemichi se revolviera, no entendia nada y no podia preguntar en el estado que se encontraba, asi que decidio llamar a sus fieles amigos, porque siempre iban a estar en las buenas y malas.

— Soy el pelotudo mas grande del mundo Michi. — Se aparto un poco de su amigo levantando la vista con una débil sonrisa, el de ojos turquesa quien no dejaba de tener cascadas saliendo de sus lindos ojos con la nariz roja y la boca temblando un poco.

Takemichi solo lo abrazo mas fuerte.

— No Fuyu, no lo sos, soy yo ese soy yo ¿si? — Le sobaba la espalda reconfortante y su amigo se aferraba a su camiseta sollozando mucho mas fuerte que antes — ¿Te acordas cuando en primer año meti un tenedor en el enchufe? o cuando fui a casa de Hina y su viejo me enseño a disparar rifles casi termino sin brazo, o cuando-

— T-te quiero muchwooo — Ahogaba sus mocos en el pecho ajeno.

— Vamos. — Takemichi giro su cuerpo montando a Chifuyu en su espalda, pesaba si, pero ¿saben que pesa mas? el dolor que se posa en el dulce corazón de Matsuno.

En medio de una tormenta a las seis de la tarde estaba Baji en su habitacion tenia el estómago revuelto, le dolia el estomala cabeza el corazón, le dolia existir, le picaban los ojos y las manos queria salir a la calle y reventar un tanque de gas para que explotara en su cara, todo aquello fue interrumpido por el ruido de la puerta.

Su madre.

— Hijo, ¿vas a comer?

— No ma... estoy cansado — Contesto dándose vuelta a la cama, la mujer solo apreto la boca con dolor, porque a sus ojos estaba haciendo lo correcto por el bien de su hijo, porque ella queria lo mejor para él queria ser una buena madre, lo estaba intentando. Estaba tratando de corregirlo pero no sabia como, estaba frustrada luego de todos aquellos comentarios en su trabajo acerca de su hijo diciéndole que era un vago, un bueno para nada.