Hace muchos siglos, cuando gran parte de la tierra aún era virgen, cuando la naturaleza y el hombre vivían a la par, donde grandes y hermosos castillos adornaban las grandes montañas blancas por la nieve, y donde también los reyes de cada reino eran figura de respeto y admiración por su bondad e astucia para gobernar.
Cuenta la leyenda que hace miles de años llegaron a estas tierras 4 jóvenes hermanos, dioses exploradores; Hikari (Luz), Kai (Mar), Yuki (Coraje) y Shiro (Cuarto Hijo), quienes buscaban un lugar donde establecer sus asentamientos para proteger desde ahí a la humanidad y la naturaleza, concluyeron que a pie de la gran montaña sería fácil de localizar. Se dividieron las tierras en 4 partes, y Shiro al ser el menor de aquellos le cedieron la parte más alejada, atrás de la gran montaña, por lo que quedaba alejado del resto de los hermanos. Mucho tiempo después, cuando miles y miles de personas llegaron a estas tierras, se formaron los 4 reinos que llevaron los nombres de sus fundadores en su honor.
En uno de estos reinos, Shiro, gobernaban un rey y una reina muy queridos por la gente, era una tierra prospera, hacía muchos años en que no se desataba una guerra, aunque, a estar tan alejado del resto, no había demasiado contacto entre los demás reinos. De vez en cuando llegaban carruajes con vendedores exóticos, visitantes y mensajeros.
El reino se ubicaba a los pies de la cordillera, siempre hacia un clima muy agradable, 'primavera eterna' se le apodaba. Kilómetros al Norte se encontraba el reino más cercano, Kai, el cual se construyó entre diversos ríos los cuales hoy en día alimentan a sus habitantes.En Shiro la gente vivía contenta. En la entrada se colocaban mercaderes que ofrecían todo tipo de productos a los visitantes, desde ahí la ciudad se ramificaba en muchas calles, la más grande de ellas, y la que daba camino al castillo fue nombrada por la gente como 'Avenida de las Flores' debido a que cada año en primavera crecían en los bordes una flores que solo se veían en tal lugar. Aquí existían localidades de todo tipo; herrerías, sastrerías, carnicerías, entre otras. En las demás calles estaban los hogares de los campesinos y ciudadanos. Además, el pueblo se dividía en 3 grandes zonas, en la parte Este los agricultores, cosechaban sus propias verduras que después vendían en el mercado, había grandes terrenos de cosecha y cada hogar tenia además un huerto. La otra zona se encontraba el mercado, se ubicaba paralelo a la gran avenida, los comerciantes sedentarios colocaban diariamente sus puestos, donde intercambian generalmente los bienes mayoritarios de cada uno, el que cosechaba lechugas repartía lo que le sobraba, y recibía a cambio tomates y papas y así. Muy raramente había alguna clase de conflicto con aquello. Había partes del mercado donde se encontraba también casas, más bien, edificaciones de 3 o hasta 5 pisos donde vivían los mercaderes. La última parte se encontraba en el Suroeste5 del reino se hallaba la Escuela de Artes y Lengua, y también para los más estudiosos, la Escuela de Ciencias, eran edificios de arquitectura muy antigua. Más al Noreste se encontraba el hospital.
Por otro lado, avanzando por la Gran Avenida se divisaba al final el gran castillo, era considerado el castillo más antiguo del continente, y, a la vez, el más hermoso y mejor construido. Para entrar en él era necesario atravesar un enorme jardín, adornado con todo tipo de plantas y flores, también fuentes de agua muy lujosas donde las aves se posaban para beber. Había también piscinas, árboles podados con formas exóticas y en los márgenes del gran terreno unas pequeñas habitaciones donde residían los empleados del castillo.
El castillo era enorme, destacaban sus múltiples torres que se veían desde todo el reino, de color blanco y lleno de grandes ventanales. En la entrada una gran puerta de madera tallada, a los costados dos esculturas de corceles alados.
Ya dentro destacaban los grandes salones cada uno con cuadros de paisajes hermosos, candelabros brillantes y alfombras de miles de hilos. Muchas personas se encargaban de mantener ordenado y limpio todo.
El gran salón era donde se realizaban los encuentros de todo tipo, al fondo la escalera principal, también muy embellecido, pasamanos de madera tallada con increíbles diseños. A la derecha del gran salón se encontraba la cocina, casi tan grande como el salón principal, nunca faltaban especias ni carnes, los administradores se encargaban de que todo estuviera bien. Hacia la izquierda más salones, en uno había una gran piano donde era habitual escuchar a músicos famosos inspirar con sus melodías.
En la parte alta dormían los reyes, mientras que en la torre más alta, donde se tenía una vista espectacular de todo el reino, se encontraba la habitación de la pequeña princesa, heredera al trono, una niña de apenas 8 años en ese entonces. Una niña que siempre destacó por su belleza, sus ojos brillaban más que las estrellas y su piel tan blanca como la nieve.
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Hilo Rojo
RomanceUn hilo rojo conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, a pesar del tiempo, del lugar, a pesar de las circunstancias. El hilo puede tensarse o enredarse, pero nunca podra romperse. Esta historia no es mia. Es un libro escrito por mi h...