Mi Historia Favorita

Capítulo 6

-Muy bien chicos, como ya saben, ustedes han salido seleccionados para representar a cada grado de esta institución. Lo único que les pido es que den todo de sí, nosotros por nuestra parte los apoyaremos con todo lo que necesiten, lo que implica prepararlos académicamente. El plan que tenemos para ustedes es simple: hora y media después de clases y ejercicios extras para que resuelvan en casa, hasta aquí ¿Tienen alguna duda?- Preguntó la directora, a lo que todos se miraron entre sí, pero nadie respondió.- Bien, eso significa que quedó todo claro. El concurso será dentro de 8 semanas aproximadamente, competirán contra colegios de mayor categoría, y si quedamos tan solo entre los veinte primero puestos iremos a ligas mayores; pero si ganamos, el premio será personal: a cada vencedor se le entregará el mejor de los equipamientos académicos, lo que incluye útiles escolares para todo un año, una laptop, y un viaje todo pagado a las Bahamas, además de una atribución económica a la institución que representa. Cabe decir que sólo habrán dos ganadores por cada grado, es decir, serán diez ganadores en total. Escuchado todo esto, pueden retirarse.

En realidad, ninguno de esos premios me sonó tentador. Pero quizá haya sido la costumbre a concursar o el orgullo lo que me motivó a seguir adelante. Ahora también debía quedarme casi dos horas después de clases para prepararme...
¿Y la terapia grupal?- se me vino a la mente. - supongo que tengo que hablar con la directora sobre esto.

Volviendo al salón (luego de perderme el receso), las chicas me bombardearon con preguntas, a las que intenté responder una por una.
-¿Qué te dijeron?¿Cuándo será el concurso?¿Qué están ofreciendo como premio?¿Cómo les prepararán esta vez?¿Cuántas escuelas serán?... -preguntaron de tal manera que se me hizo confuso saber de quién provenía cada pregunta. Así que decidí contarles todo lo que la directora nos había dicho.

-... y eso es todo lo que nos dijo.

-¿Cómo harás con la terapia grupal?

-Eso quiero preguntarle a la directora después de clases.

-Waw... ojalá les vaya bien a los cuatro amiga, pero tú tienes que ganar.

-Nosotras te apoyaremos con lo que necesites- agregó Alice.

-Gracias... espero no decepcionar a nadie.

Luego de la conversación solo intentamos atender a la clase, aunque me fue un tanto difícil hacerlo debido a las dudas que llegaron a mi cabeza.
¿Cómo haré para estar en las clases de preparación y en la terapia grupal a la vez? ¿Aceptará la directora Schent que deje la terapia o qué dirá al respecto? ¿Qué pasaría si no gano ni quedo entre los veinte primeros puestos? ¿Podrá Steve recogerme todos los días tan tarde?- eran solo algunas de las preguntas. Y entonces sonó la campana.

Me dirigí a la oficina de la directora, y mientras me acercaba podía escuchar cada vez más los gritos de una discusión, eran las voces de dos varones y parecían provenir justamente de la oficina de la directora...

-Eres un imbécil ¿cómo te atreviste a hacerlo?

-A ti que te importa. No es tu vida

-Es parte de mi vida y me meto lo que quiera- discutían las voces. Espera... esa es la voz de... ¿Steve?- me preocupé al reconocer su voz, por lo que me decidí en tocar la puerta. La directora abrió, así que pude ver un poco del interior y efectivamente estaba Steve.

-¿Sí señorita Bachiarelli? ¿Sucede algo?

-Ah sí, lo que pasa es que... quería saber como iba a llevar la terapia grupal ahora que también tengo que prepararme para el concurso.

-Cierto, olvidamos de hablar de eso. Enseguida la atiendo ¿sí?, quiero terminar con estos chicos primero. - dijo cerrando la puerta detrás de sí, entonces decidí quedarme tras la puerta para escuchar lo que sucedía.