Mi Historia Favorita

Capítulo 11

Pasó una semana antes de que él comenzara escribirme, aunque siempre háblabamos en los descansos junto a mis dos amigas, pero nuestra relación de 'amigos' parecía profundizarse cada vez más.

Algo que fue notorio, es la cercanía que ahora ellas también tenían con el profesor, al punto de que ahora sólo le decían "Adams" cada vez que conversaban, algo que a mí nunca se pegó. Estábamos justamente en su clase cuando Mark se acercó a mí para hacerme una pregunta sobre la clase (como ya le era una costumbre) , algo que causó la preocupación del profesor.

-Alumnas Rouse y Alice, acérquense a mi carpeta por favor.

-Te juro que yo no hice trampa en la práctica, Alice lo hizo, pero yo no- susurró Rouse asustada una vez que llegó al lado del profesor.

-No las llamé por eso, aunque ya te delataste Rouse... pero hablaremos de eso después.

-¿Ah no?.- dijo Rouse avergonzada.

-No.- respondió serio

-¿Entonces?

-Las llamé por que ultimamente estoy viendo a Mark demasiado cerca de Mary.

-Pues... sí... nosotras también lo hemos notado.- dijo Alice.- pero... no entiendo que tiene que ver esto, no es que sea algo malo.

-No Alice, es peor de lo que imaginas... él no es lo que aparenta.

-¿Qué?.- preguntó Rouse totalmente desconcertada.

-Chicas... deberían cuidar a Mary, no les pido que no se hagan amigas de él, pero sí que eviten acercarse demasiado. Él tiene la mala costumbre de ilusionar a las chicas y jugar con ellas... sólo quiero hacer lo posible por evitar que ustedes y su amiga caigan y salgan lastimadas.

-¿Cómo sabe usted eso?.

-Por que es mi primo Alice, lo conozco desde que nació.

-¿Qué? Eso sí que no me lo esperaba.- dijo sorprendida Rouse.

-Cuídense de él por favor, y cuídenla a ella también... ¿De qué están hablando ahora?

-Creo que de algo de la clase.- Dijo Alice

-Bien, ahora vayan a sentarse.

-Está bien, lo tomaremos en cuenta.- dijeron obedeciendo.

-Alumno Mark... ¿Qué hace usted en la carpeta de la señorita Mary? ¿Acaso la está acosando?.- dijo provocando las miradas burlonas del resto de los alumnos.

-Ehm... no la estoy acosando, sólo le estoy pidiendo ayuda con un ejercicio.

-Sabe que aún estoy presente en en salón ¿no?

-Sí profesor.

-Entonces debería hacerme las preguntas a mí, no a su compañera. Vaya a su asiento por favor.

-Está bien profesor, disculpe.- dijo dirigiéndose a su lugar.

-Y bien... ¿Ahora qué pasó? ¿Acaso se dió cuenta que Rouse copió en la práctica?.- pregunté riendo en un susurro.

-No, fue por tu cercanía con Mark.- dijo Rouse

-¿Qué pasó con eso?

-Dice que deberías tener cuidado, porque Mark sólo quiere jugar.- Dijo Alice

-¿Mark? ¿Por qué dijo eso?

-Por que es su primo Mary, él lo conoce... y dijo que suele lastimar a las chicas.

-¿Qué? yo no lo creo, él no es así.- le respondí a Alice.

-Mary, por favor... no creo que Adams esté mintiendo.

-Alice... ustedes no conocen a Mark como yo, y el hecho de que el profesor sea su primo tampoco significa que lo conozca bien. Mark no es así.

-Mary... amiga... no quiero discutir contigo... sólo... ten cuidado ¿sí?.

-Lo tendré.- dije en tono molesto.

No voy negar que para entonces ya me había empezado a gustar Mark, que nunca hice caso a su advertencia y tampoco que ellas y el profesor tenían toda la razón.

Voy a evitar contar por ahora los detalles exactos de lo que pasó con Mark Terrens, sólo les diré que jugó conmigo, sí, lo hizo, y de la peor manera. Cuando eso ocurrió, corrí a los brazos de papá, y él me consoló gustoso, como a menudo lo hacía cada vez que me raspaba algo, o como lo hacía cuando algún niño me pegaba.

-Hija, no te quiebres por algo que no vale la pena, utiliza cosas como estas para fortolecerte y no volver a caer en lo mismo, ya verás que muy pronto llegará alguien que te quiera de verdad, y que nunca te lastime de ese modo. Nunca cierres tu corazón, porque si lo haces, cuando llegue esa persona quizá no la dejes entrar, y entonces la perderías para siempre. Prométeme que no le quitarás a tu corazón la hermosa oportunidad de amar, porque sin amor, no existe vida.
Cuando descubras a alguien que te ayude a encontrarte a ti misma, a definir tu personalidad, y a crecer de la mejor manera... entonces es que habrás hallado al amor de tu vida. No te impidas eso pequeña, no por gente como él. Prométemelo.

Por cosas como esta es que amo tanto a mi padre, es la única persona que sabe qué decir incluso en los peores momentos, y todo lo convierte en oportunidades para aprender.

Cuando el profesor se enteró de lo que pasó, golpeó a Mark dejándole una mejilla casi de color negro, algo que de algún modo me hizo sentir culpable por no haberle creído antes. Luego de eso, vino el concurso interescolar, pero tampoco ganamos, sólo quedé en el tercer puesto y me dieron una medalla. Alice se mantuvo en el teatro durante todo el año, aunque dijo que no le gustó tanto como creía que iba a ser, y Rouse ganó una medalla de oro en natación y quedó en el segundo puesto en atletismo.

Durante el verano, decidí no tomar las clases que mamá había prometido pues creí que se me haría demasiado dificil dejarlas después, en cambio decidí tomar un poco de clases de natación, porque pensé que sería la mejor opción para ayudarme a sobrellevar el intenso calor del verano, y después llegó mi último año de escuela...

Para los de último año, ya no se nos tenía permitido participar en el concurso interescolar, así que ya no me preocupé por eso; sin embargo, mamá sugirió que lo mejor sería que me prepare para postular a una de las mejores universidades de mi país, algo que yo acepté. No quise hacer promoción ese año, porque sólo harían una ceremonia seguida por una enorme fiesta, y pues... a mí, no me agradaba tanto la idea de utilizar un ceñidio vestido de graduación, y menos tener que bailar con tacos altísimos solo para no ser la más pequeña en las fotos... el mismo motivo por el que nunca organicé ninguno de mis cumpleaños (ni siquiera mis quince... además que nunca me gustó ocasionarle gastos innecesarios a mi familia) y mis padres aceptaron. Bien... mi vida no fue nada divertida hasta ahora ¿verdad?, pero yo ya estaba acostumbrada a esto, a que todo fuera como una rutina incesante que en solo unas escasas ocasiones presentaba algún tipo de variación, y ni siquiera mis amigas pudieron sacarme de ese profundo hoyo llamado aburrimiento, quizá por que ellas ya estaban concentradas en "cosas de adolescentes", algo que a mí aún no se me daba. Ah, cierto... Alice se enamoró de un chico ese año, pero fue de un chico que vive cerca a su casa, aunque eso no le quita el hecho de que la suya sí fue una hermosa historia de amor que persiste hasta el día de hoy, y Rouse... para ella ningún tipo es lo suficientemente bueno.

Quizás fue que se dieron cuenta que mi vida se volvía cada día más monótona el motivo por el cual mis padres decidieron que lo mejor sería mandarme a un campamento de verano junto con Alice...

Y créanme...
no saben cuánto agradezco haber aceptado.