Capitulo 7

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Me pare y recogí el libro y me lo lleve conmigo al baño, necesitaba saber lo que estaba pasando y solamente había una persona que sabía que era precisamente lo que pasaba. 

Recogí las seis velas que decía que necesitaba y me fui a buscar algo para prenderlas. Cuando encontré algo, subí al ático, no sabía por que, pero pensé que sería un mejor lugar. Cuando abrí la puerta el cuerpo de mamá todavía estaba ahí, pensé en moverlo, pero cuando lo iba a hacer se movió solo y quedo en un esquina, no le di importancia, solamente quería saber que estaba pasando ahora mismo y no tenía tiempo de perder la cabeza.

Coloque las vela en un círculo y comencé a encenderlas todas, cuando finalicé de encenderlas comencé a leer lo que decía.

-"Espíritu del mas allá, a ti te llamo, cruza la línea divisora y ven a mi"- pero no paso nada, no lo entiendo, ¿por que no pasaba nada? Sentí a Amanda llegar a mi lado y tomo mi mano para hacer que bajará otra vez o no se por que lo hizo, pero no importo algo me decía que lo dijera otra vez, así que lo hice.

-"Espíritu del mas allá, a ti te llamo, cruza la línea divisora y ven a mi"- y esta vez comenzaron a aparecer unas bolas de luz y ahí estaba. Mamá igual que como estaba su cuerpo, estaba vestida igual, era como si no se fuera ido, pero estaba ¿flotando?

-¿M-mam-má?- pregunté ya que no estaba muy convencido de que era ella.

Ella solo abrió sus brazos para que la abrazara y salió del circulo de velas y se materializo, no se como lo hizo, pero no me importa solo necesito un abrazo de ella. Solté la mano de Amanda y corrí a los brazos de mamá y me refugié en ellos.

-M-mam-má, l-lo sien- no pude seguir hablando. Mamá solo me abrazó más fuerte y comenzó a dar vueltas con su mano por mi espalda.

-Lo sé cariño, no es tu culpa, no podías hacer nada, era mi destino y ni tu ni nadie podía hacer nada- me dijo, pero yo sentía que era mi culpa, yo traje a Jose a nuestras vidas y mira lo que paso por eso.

-Ya no tengo a nadie mamá- le dije 

-Eso no es cierto cariño, yo estaré para ti siempre que lo necesites, y también la tienes a ella- me dijo mirando a Amanda

-¿Amanda?- le pregunté, ¿por que decía que la tenía a ella? Si apenas la conocía

-Si, ¿no lo sientes?- bueno, si, lo siento, es una especie de atracción hacia ella, pero no románticamente es como si ahora la necesitará- estas más grande de lo que pensé- dijo mamá a Amanda

-¿M-mamá?, ¿la conoces?- le pregunté por que ya estaba confundido, deshice el abrazo.

-Claro cariño, la reconocería donde fuera, ella es tu hermana gemela- muy chistoso mamá, no estoy para chistes ahora. Pero cuando le vi la cara lo decía en serio.

-¿Qué?- dijimos al mismo tiempo- Es una larga historia, ¿por donde empiezo?, bueno nuestra familia por generaciones a sido bendecida con el don de la magia. Claro, somos brujos buenos, pero hay más allá de eso. Siempre lo he sabido desde que era pequeña, mi madre siempre estaba peleando contra demonios y hechiceros y brujos y brujas malas.

>Cuando tuve la edad suficiente yo comencé a hacerlo también, claro que siempre con el permiso y la supervisión de su abuela. Cuando llegue a la adultez conocí a su padre, un brujo malvado que solamente quería una bruja para que le diera un hijo para robarle sus poderes cuando naciera, para ser más poderoso. Cuando me enteré de esto mato a mi madre y me capturo y me tuvo secuestrada por seis meses. Un día logré escapar gracias a los poderes de los tres de nosotros, claro en ese momento pensé que solamente tenía un niño viniendo y no dos.

> Pero en fin, logré esconderme gracias a un hechizo que hice, pero solo duraba hasta que nacieran ustedes, al tiempo nacieron ustedes y quede muy sorprendida de ello, no podía cuidar a los dos así que le dije al doctor que entregaría a uno de los dos, pero que no quería saber cual y que me quedaría con uno. Antes de que se los llevaran les hice un poción para atarles sus poderes para que su padre no los encontrará. Cuando se iban a llevar a alguno, solo le dije a los padres que lo iban a hacer que tu nombre comenzará con A y ellos accedieron.

>En cuanto me cure de la cesaría comenzamos a correr para que su padre no nos encontrará y desde entonces no habíamos parado de hacerlo. Pero cuando morí la poción perdió su efecto ya que estaba ligada a mi vida, pero para que tuvieran sus poderes otra vez tendrían que estar juntos y hacer que el lazo de ambos se uniera una vez más.

En cuanto mamá terminó el relato observe a Amanda, estaba igual que yo, sorprendida, y cuando pensé que ya estaba procesándolo, se desmayo.

Alexander The Warlock Donde viven las historias. Descúbrelo ahora