Capitulo 1.

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Mamá está algo emocionada por la mudanza qué hicimos. En cambio yo, odio todo esto. Perdí a los únicos amigos que tenía y no sé si aquí se me de tener por lo menos uno. No soy muy social que digamos. Aunque podría intentar serlo. Lo malo de esto es que deje a mi mejor amiga y a mi única hermana en la otra ciudad. Mi hermana no pudo venir con nosotros tres, porque tenia que seguir estudiando la universidad. ¿Que si porque me mudé? Lo diré de manera simple. Un padre torpe. Un divorcio Y un padrastro para mi.

–Araceli, ¿quieres que te
muestre la casa?– pregunta, mi padrastro.

Sergio. Es simpático. Nada parecido a mi padre biológico. Está asomando la cabeza por la ventanilla del carro.

–Claro, en un momento voy–. respondo con una sonrisa forzada.

Me quité los audífonos. Cerré mi libro. Los metí dentro de mi mí mochila y me la colgué al hombro.
La casa parece grande. Tiene un hermoso jardín y hay una piscina en el patio trasero. Estaba en la puerta de entrada cuando llega mi madre y me toma por los hombros.

–Es hermosa ¿cierto?– se mira tan feliz.

–Es muy amplia– odio la. Casa nueva pero no se lo pienso decir. No quiero desanimarla–. Iré a bajar cajas del camión.

Aunque esta casa sea demasiado amplia, la siento vacía . Necesito a mi hermana cerca de mi. Necesitó que mi mejor amiga venga a disfrutar de una linda y divertida tarde.

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Estoy bajando la última caja del camión de mudanza. De pronto. Un chico sale a toda prisa de la casa de al lado. Parece enfadado, pero es un chico realmente lindo. Es alto. Su cabello es castaño. Esta un poco largo y desordenado. La camisa que lleva puesta hace que se vea realmente sexy. Se detiene y voltea a verme. Tiene ojos color marrón. Sonríe y yo le quito la mirada de encima. Con esa sonrisa se mira mucho más sexy. Levantó la caja para llevarla a dentro. Escucho sus pasos y una pequeña risa. ¿Está burlándose de mi?. No lo conozco y ya lo odio.

–Hola, linda ¿eres nueva por aquí?– pregunta, el chico.

Tiene voz gruesa. Volteo a verlo. Está de brazos cruzados. Con su irresistible sonrisa. De cerca es mucho más sexy. Pero a este chico se le nota que es un rompe corazones. Será mejor no meterme con él. Y ¡por la barba de merlín! ¿linda? ¿En serio? Llevo puesta una sudadera negra, que me queda grande. Y mi pelo está hecho un asco.

–Tengo un nombre, pero no es linda– evitó la mirada del chico y comienzo a caminar con la caja.

–Espera– se acercó y me quitó la caja de las manos–. Te ayudo, quiero caerle bien a mis nuevos vecinos– se alejaba hacía la entrada de la casa–. ¿Te quedarás admirándome ahí?– añadió.

–Cuanto más mantengas esa boca cerrada mejor, lindo– le hice una sonrisa más parecida a una mueca y comencé a caminar hacia la entrada.

Entramos a la casa. Mi madre estaba sirviendo la cena. Mientras sergio colocaba unos cuadros en el comedor. Mi madre y sergio observaron a el chico.

–Vive en la casa de al lado y quería conocerlos– explico.

Mi padrastro es demasiado celoso. No deja que los chicos se me acerquen. Por lo que espero que corra al chico más sexy que he visto. El chico, que ni si quiera se había molestado en presentarse conmigo. Se acercó a ellos y les tendió la mano a ambos. Primero a mi madre y luego a mi padrastro.

–Hola, soy angel. Mucho gusto en conocerlos– se presentó.

¿Es en serio? conmigo no fue nada amable. Aunque trato de decirme linda. Pero, ¿que no es eso lo que usan los malditos rompe corazones?

–Yo soy nora y mi esposo se llama sergio– dijo mi madre–. Mucho gusto en conocerte, angel.

De acuerdo. Esa fue mi mamá, sólo falta mi padrastro. Quiero ver que le espera a este lindo ángel.

–Espero que seas amigable, angel. A araceli le podría gustar un amigo nuevo– dijo, sergio.

¿Qué rayos acaba de ocurrir aquí? ¿Será el fin del mundo? ¿Se sentirá bien, sergio? ¿Estará tratando de burlarse de él? No lo creo. Se me ocurren dos opciones. Lo quiere conocer un poco mejor, para luego correrlo. O quiere que en realidad sea mi amigo y no quiere que me sienta sola.

–Claro que si, señor– respondió, angel–. Su hija es demasiado amigable–. añadió.

Odio que digan que él es mi padre. Por que no lo es. Él es todo lo contrario a mi padre biológico. Mi padre biológico no sabe valorar las cosas. Ni a las personas. No sabe lo que es vivir bien. Es un idiota. Adicto a las drogas. A los cigarros. Al alcohol. Se volvió un completo desastre. "Ohana: significa familia y tu familia no te abandona, ni te olvida" —frase de la película "lilo y stitch"— me prometió que cumpliría con ello. Y no lo hizo.

– ¿Qué tal si me ayudas a bajar unos cuadros que faltan del camión de mudanza, angel?–preguntó, ergio.

Parece que angel se dio cuenta del momento incomodo que acababa de causar, por que ahora la pensó dos veces en abrir la boca. Se ve que no quería hacer sentir incomodo a nadie, creó que podría caerme bien. Si le diera una oportunidad, tal vez seamos buenos amigos.

–Claro que si, señor– respondió.

Mamá siguió sirviendo la comida. Mi padrastro comenzó a caminar hacía la puerta. Angel me miró. Me guiñó el ojo y siguió a sergio.

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Soy nueva en esto de escribir, pero espero que les guste.

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