Inventario de Sentires

¡Revolución! (Odio a discreción)

¡Levanten las armas, Revolución!
Sentimos presencia enemiga.
Nos atacan de Siria, de Iraq,
vienen mutilados, muertos de miedo.
Vienen a matar, a destruir
así como hicimos en su país.

Nos devolverán el favor
somos inocentes, todo tiene una razón
No es el oro, no es el Tío Sam,
es una causa justa.
Es amor a la bandera
y nada más.

El Dios que nos mira sabe
que el suyo está mal.
Ellos matan por un bien
¿Y quién no lo hizo ya?
¿Quién no se marchó con el cordero?
¿Quién no quiso ser Mesías?

Vienen en barcos pesqueros,
buscando robar nuestros sueños
a la gente de mi patria.
Que tanto ama, que nunca daña,
que también muere por pan,
que solo está austado, como él.

Una frontera infranqueable.
Un muro infinito se piensa hacer
¿Y ya no está ahí?
Tiene forma de plomo, pólvora
y horror.
Tiene forma de extranjero.

No logro comprender
que hicimos mal.
La madre es una, a amarlas por
igual.
Dibujamos más fronteras,
que países.
Mas países que hermanos,
más guerras que medicinas.

Ya solo espero que baje
y vea cual fe vale más
¿Acaso vale esperar?
Correrá la sangre de mil hombres
todavía,
mientras, otros van por su bandera,
otros van, por lo que quieren.

¿Tiene cuadros, tiene estrellas,
barras, leones o emblemas?
No pienses que es amor,
eres una pieza más
de unos pocos que juegan,
solo juegas a ser ciervo de otro cazador.

Atacan las madres, los niños
que nunca pudieron jugar.
¡Disparen, fuego a discreción
que no quede una ni uno!
Que muera hasta la última esperanza,
si que ya no hace mucho murió.