No soy ella...

5 0 0
                                    

Yo no era así. Yo tenía mucha autoestima. Yo amaba mi vida. Pero ya no más.

Antes era feliz, mi familia y yo convivíamos alegremente, no teníamos problemas y peleábamos lo normal. Con mis hermanos jugaba bastante, me la pasaba bien y estar en medio de ese ambiente era agradable. 

Antes tenía amigos, por así llamarlos, y no me importaba mucho si ellos se distanciaban de mí o no. Sabía que alguna vez regresarían, al fin y al cabo, yo tendría una vida por delante y mucho tiempo para disculparnos, perdonarnos, querernos y volver a pelear.

Antes tenía un novio. Al que amaba con todo mi corazón. Al que nunca dejaría por ninguna otra persona en el mundo. Lo amaba, lo amaba de verdad, y pensaba que distanciarme de él para siempre significaría muerte. Que mi corazón fallaría y que nunca volvería a amar a nadie mas. Lo amaba, de verdad lo amaba. Por y para siempre.

Ahora, ya no tengo familia. Nos ignoramos y no nos importa lo que hagan los demás. Todo eso cambió de repente. Cuando una hermosa persona entró a mi vida, pero para mis padres, él estaba prohibido para mí. Pero no me resistí a estar con él. Arriesgué todo para que pudiéramos estar juntos y vivir felices, con mucho amor, pero eso me llevó a meses de sufrimiento. No tengo ni papá ni mamá, solo personas que me mantienen y están conmigo por obligación.
Y perdónenme, no sé si me explico, pero quería ser feliz. No pensé en ustedes y lo siento. Lo siento tanto. Los quiero a todos.

Ahora me duele cuando algún amigo me deja de hablar. Sé que no estaré mucho tiempo aquí para perdonar, disculparme, y volverme a pelear. Se que no. Que mi tiempo terminó y que tendré que irme. Pero lo que me fortalece es saber que conseguí que también ellos me odiaran y olvidaran, para que no les duela. De algunos provoqué problemas en sus relaciones amorosas, y aunque eso me partió el alma tuve que hacerlo porque los quiero. De otros inventé chismes sobre su vida personal, y juro, que tuve que reunir toda la fuerza que me quedaba para poder hacerlo. Yo nunca, en mi sano juicio lo habría hecho, pero ahora puedo tener por seguro que ellos no me necesitan, que no me quieren y que no me llorarán. 
He notado la vergüenza de estar con ustedes, de tener que mirarlos una última vez antes de irme, de liberarme. Lo siento, lo siento mucho. Perdón por todo aquel daño que les causé, lo siento mucho, de verdad, no saben cuanto. Los quiero.

Ahora, me mata, me mata haber terminado con el amor de mi vida. Me duele en los máximo que un dolor puede ser, es tan horrible, desastroso, terminable. Nunca había sentido tanto odio por mí misma. Nunca había tenido tantos deseos de irme, de desaparecer y no provocar daños a mas personas pero, ¿en qué estaba pensando cuando le dije que sí? Me pude haber ahorrado sufrimiento, les pude haber ahorrado sufrimiento ah todos, pero mire que mi amor por él fue mas grande que todo. No me importaba en lo absoluto tener que sufrir, no me importaba si eso significaba estar con él. No tenía ningún sueño mas grande que estar con él. Lo amaba como a nadie. No me importaba perder a todo el mundo si lo tenía a él. No necesitaba otra cosa. Sólo ah él. Pero todo eso ya no importa. Toda mi vida la deseché. Todo mi futuro junto al amor de mi vida lo hice a un lado. Todas las promesas las romí. Todo lo que ya tenía lo perdí. Perdiéndolo a él, lo pierdo todo. No quería nada mas que ah él. Lo siento amor, lo siento por todo. Perdón por haberme enamorado de ti tan perdidamente. Perdón por haberte hecho creer que no te amaba cuando eres la persona que ocupaba todo mi corazón. Perdón por haberte prometido tantas cosas y no poder cumplirlas. Perdón por no saber sufrir sola. Perdón por necesitarte. Perdón por obligarte a amarme. Perdón por haberte hecho daño. Perdón por todo. Te amo.

Y eso mas cambió. Antes no me cortaba, ahora sí. Antes me daban miedo las alturas, ahora no. Antes  comía, me gustaba comer, ahora no. Antes reía sin tener que fingir, ahora no. Antes me encantaban las cosas coloridas y llenas de vida, ahora no. Antes soñaba, ahora no. Antes creía que tenía una vida por delante, ahora no. Antes amaba mi vida, ahora la odio.

Al que está leyendo ésto, hay muchas probabilidades de que no me conozca, que ésto que menciono no le haga daño, pero si estoy equivocada y se siente mal, perdón. Necesito desahogarme con alguien, y dicen que los seres humanos confían mas en un extraño por el hecho en que no hay muchas posibilidades de que las vida los reencuentre y no vuelvan a hablar del pasado, pero pido, por favor un poco mas de su atención, además de alguna forma ésta carta le beneficiará. Le estoy dando consejos, y usted puede observar los errores que yo cometí para que usted no los cometa, pero en fin, aquí va el tercer consejo:

No haga cosas malas que parecen buenas. Siempre habrá una solución para todo.
Si alguna vez te equivocas puedes solucionarte muchos problemas futuros con solo decir "Perdón".
Si alguna vez alguien te hace daño, puedes perdonarlo, pero no quererlo de la misma forma. Exponer tus límites y hacerte sentir importante. Que no cualquier persona puede llegar a tu vida, hacerte daño, disculparse y volver a estar igual, esa no es ninguna muestra de amor propio. Por mucho que te duela debes darte a respetar y hacerte valer. Quiérete.
Si alguna vez alguien superior ah ti te prohíbe hacer algo que ah ti te gustaría es mejor ganarte su confianza, mostrarle tu madurez y negociar para que se te permitan muchas cosas de las que ahora no eres capaz de hacer.
Si alguna vez tienes algún problema que no puedes solucionar solo busca ayuda, tienes amigos, familia, novio (a), incluso con ayuda de un psicólogo puedes salir adelante.
Y, ni mencionar si alguna vez te dejas lastimar, porque nunca debes dejar que eso pase. Siempre que sea una de tus metas dejarle en claro al mundo que vales, y que vales mucho, igual a todos. Que no eres inferior y mucho menos debes de aceptarlo. Toda persona es genial, magnífica y única. Vales demasiado. Nadie debe lastimarte jamás, y si lo hacen no lo arregles ignorando el daño que te causan, guardarlo no es bueno. Grita. Llora. Destruye cosas. Pero jamás te hagas daño a ti mismo. Fue otro de mis errores.



CartasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora