Capítulo 3

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Los días fueron transcurriendo y se acercaba una jornada especial entre acilos, pasó algo que me dejó sin nada para decir, ella estaba conmigo en el acilo pero era por ordenes de sus "superiores" por así decirlo, y tenía que estar con su grupo para esa jornada especial, le dije varias veces que se quedara conmigo en aquel acilo, pero ella no le hizo mucho caso, vino la juramentación .- Raro, lo sé -. y allí estaba ella, apenas tuve tiempo nos sacamos unas fotos y pasamos un tiempo juntos, vino un sujeto con cierto grado de importancia en el país personalmente a juramentarnos .- Emocionante, no? -.  y luego de eso nos trasladamos a un, cómo decirlo, un lugar más grande donde estarían presentes políticos, atletas, entre otros participantes, ella debía estar con su grupo y yo con el mío, nos escapábamos de a ratos a dar unas vueltas por los alrededores y conversar un poco.

El evento estaba llegando a su fin, y ella y yo quedamos para irnos juntos, me cuenta que su grupo le hacía malas caras al verla conmigo y otro chico de mi grupo, puesto que ambos grupos no se llevan para nada bien, "rayos" .- Pensé -. pero no le di mucha importancia ya que ella se las sabe arreglar muy bien por si misma, de camino a su casa, hablamos todo el camino, para ponernos al corriente de nuestras cosas .- Días sin vernos -. y al llegar a su casa, un gran abrazo fue de las primeras cosas que nos dimos .- La extrañaba demasiado -. luego llegó su madre y estuve charlando con ella hasta las 7:45 pm, debía agarrar un bus para mi hogar, su madre me dio una rica botana antes de irme, me despedí de ella con un buen abrazo y me fui, seguimos la conversación al llegar a casa, para mí, había sido un gran día, claro, ella había hecho que así fuese.

Perdona si te hieroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora