Where are you now? (adaptada )

Capitulo 30

Al acabar de cantar la canción, volví a mirar al frente, ellos se estaban besando.

Sentí una punzada en el corazón, sentí que me moría, que mis lágrimas salían delante de mis fans.

Bajé mi cabeza y me tapé la cara con la mano que aún sujetaba el micro.

Mis fans comenzaron a aplaudirme, yo bajé del escenario con al cabeza agachada.

Me puse mi capucha y le dije a Scooter que no cantaría más.

-Scooter: ¿Estás loco? Da ahora mismo media vuelta y vuelve al escenario.

-Justin: No pienso volver –dije mirando el suelo-

Scooter levantó mi cara, haciendo que le mirara a los ojos, me quitó la capucha y me miró.

-Scooter: ¿Estás llorando?

No pude responder, me puse aún peor, ahora mis lágrimas recorrían mi cara con mayor velocidad.

-Scooter: ¿Se puede saber que diablos te pasa?

No dije nada, no podía. Me pasé las manos por las lágrimas y por mi nariz.

-Scooter: Justin ¿Qué te pasa?

-Justin: Me quiero ir al hotel, por favor.

-Scooter: ¿Y la actuación?

-Justin: No me encuentro bien, por favor...

-Scooter: Vale, ¿pero que decimos?

-Justin: Que me encuentro mal, de todas formas esto no es un concierto, nadie compró ninguna entrada.

-Scooter: Está bien –miró a su derecha- Kenny, llévate a Justin y a sus amigos al hotel.

Kenny, Chaz, Ryan y yo nos montamos en el coche, me puse también mis gafas de sol para que los periodistas no me vieran llorar. El trayecto fue rápido, llegamos a los 15 minutos.

*Yo*

Bob me estaba dando de comer, cuando entonces soltó el sándwich y me besó.

Al principio, sorprendida, le seguí el beso pero al momento me aparté, estaba dolida... aún no podía empezar ninguna relación.

-Yo: Lo siento Bob... te equivocas.

-Bob: Ok, lo siento, no te quiero presionar, perdóname.

-Yo: Bah, no pasa nada.

Esa tarde seguimos haciendo surf, olvidando aquel beso que no debió pasar. Al fin y al cabo, Bob me estaba ayudando a desahogarme a ratos, y se lo agradecía.

*Justin*

Llegamos al hotel, me duche y me acosté, no quise bajar a cenar.

Pensé que hoy sí podría estar solo y pensar, pero maldita sea la hora en la que me hice amigos.

En la puerta se hallaban Chaz y Ryan, esperándome para bajar a la piscina.

-Chaz: Vamos Biebs, hay una fiesta en el hotel, en la piscina.

-Ryan: Habrá chicas.

Decían mientras se encontraban al otro lado de la puerta, yo aún estaba en la habitación tumbado en la cama.

-Justin: ¿No entienden que no quiero salir? Y me da igual que haya chicas.

-Chaz: Exacto, las mujeres no sirven para mucho, pero estamos nosotros.

-Ryan: Sí que sirven idiota, y sino... ya me dirás porque babeas tanto por Nerea.

-Chaz: No babeo imbécil.