The gods of rome

Cuenta la leyenda que en tiempos antigüos los dioses libraban sangrientas batallas por mantener el equilibrio entre los mundo claro nada puede mantenerse perfecto pues bien eso paso en este caso un día en el Olimpo el Dios Zeus amo del rayo estaba en sus tierras reflexionando sobre si algún día Hades podría dominar su mundo teniendo en su mente la posibilidad de que cada vez cobraba más poder. Mientras en la tierra existía un hombre que poseía un Don el don de controlar a los demonios a su voluntad claro aunque todavía no lo sabia su poder era único y seria de mucha ayuda.
Tal hombre tenía el nombre de Arceo. Todos en el Olimpo sentían la frustración de que Hades pudiera tomar él control se murmuraban muchas cosas entre los presentes; Zeus enojado y a la vez preocupado dijo con su alzante voz exclamó
Callen todos el no saldrá mientras pueda mantenerlo bajo mi poder un Dios que estaba ahí dijo: entonces que pasaría si Hades a uno de sus sirvientes para escapar Zeus dijo: Calmad me encargaré de que seso no pase todos más tranquilos al oírlo estuvieron en calma.
Hades pensando como empezar su deseo de dominar el mundo empezó a pensar en algo para escapar de la prision en la que lo mantenían encerrado día y noche.
En la tierra en el pueblo donde Arceo vivía desde su niñez era gobernado por un cruel Rey el cual gobernaba a todos con crueldad y tiranía; Arceo era un soldado que trabajaba para el rey encarcelando a miles de personas inocentes por los caprichos del rey.
Arceo era de personalidad dura valiente y heroica el cual arriesgaría su vida con tal de dar una buena batalla en el campo. Él entrenaba duro cada día con los otros soldados,cada vez que un reino enemigo deseaba invadir sus tierras Arceo se los hacia imposible. Cómo mencioné antes Hades quería salir del su pricion como fuera posible buscando a esclavos qué lo ayudarán a salir Hades observó desde su prisión a Arceo el cual era un digno esclavo para ayudarle a salir.
Arceo estaba en su hogar en ese momento luego de un rato se echó a dormir profundamente en su largo sueño Arceo escuchó voces en su cabeza diciéndole sin parar: Arceo ven conmigo y te daré el poder de un dios serás mi sirviente y tendrás vida eterna Arceo despertó de su sueño exaltado y preguntándose. Quien había sido el que le dijo esas palabras en su sueños.
Dejando de lado ese pensamiento se vistió y fue al campo de batalla pensando que hoy iba a luchar contra un pueblo enemigo cuando llegó todos los soldados estaban tirados en el suelo derrotados Arceo fue rápidamente a vengar a sus amigo cuando derrepente...