Memory of you

Capitulo 5: Aron Eastwood

Pasaron los días, más rápido de lo que quería. Mequería quedar como siete días, pero mi mama me había insistido porque prontoseria la fiesta del pueblo y quería que fuera con ellos para que el pueblosupiera que estaba. Aunque conociéndola, ya todo el pueblo sabe que estoy aquí.Ya era el día número nueve así que pasado mañana me iba. Ese día mi mama me pidió que la acompañara almercado. No había ido anterior mente porque no quería dejar a papa solo encasa. Pero la quería complacer antes de que me fuera. Nos pasamos hablando todo el día de que se pondríapara la fiesta; porque yo obviamente iría con un jean y una chaqueta. Mi madresabía perfectamente que a mí no me gustaba arreglarme para nada. do Mientras íbamos por la zona de frutas me empezó ainsistió en que me arreglara con tono mando que tanto odiaba, pensé que yahabía superado esa parte de mi vida.-Kate eres una joven muy hermosa, no te debesesconder en esa ropa negra y gris que esconde lo maravillosa que eres- dijo contono de reclamación y desesperación mientras revisaba unas fresas. Puse losojos en blanco y le dije con tono irritado.-Mama, no me escondo de nada. Hemos hablado de estodesde que cumple catorce. A mí no me importa vestirme así. Además a nadie leimporta- -Kate por favor. Como vas a conseguir un noviovistiéndote así. Oculta todas tus cualidades--Sencillo. No tendré novio- en ese momento me acordede Tony no le había dicho nada de eso a mama.-Apuesto a que no saliste con nadie en EstadosUnidos porque estabas trabajando demasiado- dijo con tono igual de irritado queel mío.-Quien te dijo que no he salido con nadie- le dijemientras veía unas manzanas que tenía a mi derecha.-¡Espera que!- dijo y soltó el pepino que tenía enla mano. Tenía sus ojos abiertos como plato ese notaba que estaba muyimpresionada. -De acuerdo mama me alegra que no te impresione-dije con tono sarcástico e irritado.-¿Cómo no me entere? ¿Desde cuando salen?- me dijotomándome por los brazos como si fuera la noticia más importante de su vida. Suvoz estaba lleno de entusiasmo-Querrás decir desde cuando salíamos. Buenoempezamos a salir el día que me entere de lo de papa- -¿Espera terminaron?- dijo. El entusiasmo desparecióde su voz con cada palabra.-No se puede terminar algo que no comenzó- dije conla voz sin emoción alguna.-O vaya- dijo con voz llena de tristeza. Ella sabeque odio verla así. Me voltee y le dije con voz llena de dulce para que no sesienta mal.-Mama la persona que me ame de verdad será la que mevea a través de mi ropa negra. Tranquila ese día llegara- después le di unabrazo.-Tienes razón. Pero si te vistieras con un....- empecéa reír entre dientes ella conmigo. Luego le dije.-Hay mama no has cambiado nada- dije y puse los ojosen blanco.-Tu tampoco Kate- dijo con una risa ahogada.-Tienes razón- Llevamos las cosas al auto y empezó a hacer un ruidoinsoportable. La camioneta estaba empezando a hacer ese ruido horrible, y yo noherede ese don de mecánica de papa. Empezamos a llamar a alguien que nosayudara pero no había señal.De pronto se acercó un hombre alto de ojos azulescon pelo canoso, con un sweater caqui azul marino, unos pantalones grisesclaro, una bufanda negra y una chaqueta de lana. Se acercó con una sonrisa enla cara luego dijo.-¿Necesitan ayuda señoritas?- dijo mientras se subíalas mangas del sweater mi mama se volteo y pelo los ojos como platos. Luego dijocon voz llena de sorpresa y emoción.-Señor Eastwood, que hace usted por aquí-<¿Quién?> pensé en mis adentros al momento queescuche su nombre. Me sonaba familiar de algún modo pero no sabía de dónde.-Aron Emily, dime Aron- dijo mientras reía entre dientes.-De acuerdo Aron, ¿Qué haces aquí en Castle Combe? Normalmente se queda enLondres- dijo mi mama con voz de curiosidad mientras mostraba una sonrisa muyamable.-Bueno sabes que no me perdería la fiesta delpueblo. Vine a pasar las vacaciones con Susan- hay mi mama lo interrumpió.-¿Y Steve? ¿No vino?- dijo mi mama, seguíamanteniendo ese tono de curiosidad. El rostro del señor Eastwood se endureció peroseguía manteniendo su sonrisa, aunque un poco falsa. -No, Steve se fue ayer. Tenía un concierto en laC.I.R. sabes cómo es el no puede faltar a uno de esos conciertos.- luego sevolteo a mirarme y esbozo una gran sonrisa amistosa –Ella debe ser tu hija-dijo señalándome. Mi madre se detuvo a mirarme, esbozo una gran sonrisa y dijo.-Si ella es Kate mi hija- dijo tomándome por unbrazo para que lo saludara. Puse los ojos en blanco y dije mientras leestrechaba la mano.-Hola Señor Eastwood un placer conocerlo- le dijecon un falso entusiasmo luego dije con un ligero tono de sarcasmo <y con esome refiero a uno grande> - O prefieres que te diga Aron- el hombre para misorpresa empezó a reír y dijo.-Se parece mucho a Drew- dijo mientras reía entredientes. Mi mama puso los ojos en blanco y dijo con bastante sarcasmo.-No me diga- empezaron a reír y "Aron" empezó a verel motor del auto. Luego lo encendió y sonaba perfecto. Debo admitir que elhombre era agradable, pero le haría un interrogatorio a mama cuando llegara acasa.-Bueno ya está listo solo tenía...- en ese momento lointerrumpí y le dije con una mano mostrando la palma para que se detuviera.-Aron no nos expliques nada no vamos a entender- ledije mientras reía bajito. El también empezó a reír y dijo. -No heredaste eso de tu padre- dijo esbozando unagran sonrisa. Luego se despido y dijo que nos veríamos mañana. Mama y yo subimos las cosas al auto y luego me monteen el asiento del copiloto mirando hacia el frente. A continuación mi mama semonta en el auto y lo enciende. Me volteo para verla a la frente. -Ok, mama. ¿Quién era ese?- dije con voz dereclamación.-Kate no es ningún ese. Es Aron Eastwood elempresario más importante de Londres- dijo con voz regañona.-Aja ¿y que hace aquí si es tan importante?- dijeincrédula. Realmente no entendía si era así de importante que hacía en CastleCombe.-¿Recuerdas la gran mansión que hay en el centro delpueblo?- yo asentí y ella continuo mientras conducía a casa –Bueno ellos lacompraron. Además él es un buen amigo de tu padre de cuando estaban en lasecundaria.-Eso explica la confianza- dije en tono muy bajo.–Por eso me parecía tan familiar- -Así es. De hecho en su casa será la fiesta delpueblo, por eso quería que te vistieras mejor- dijo poniendo los ojos enblanco.-Bueno a él no le parecía importarle mi aspecto nimi actitud de hecho me agrada--¡Bien Kate¡ no uses nada especial pero por lo menosno actúes así quieres?- puse los ojos en blanco pero luego pensé que me iríamañana y me calme.-Está bien mama tu ganas mama lo hare por ti- dijemirando la ventana. Ella soltó un suspiro y dijo gracias. Conducimos a casa y hablamos de que preparar contantas cosas. Ella había hablado durante días sobre hacer algo especial porqueestaba en casa. Entonces le sugerí que hiciéramos una tarta. Se empezó burlarde mi porque decía que es un postre muy norte americano, pero que estaba bien.Llegamos a casa y nos pusimos a hacer la tarta. Papase sentía mal así que se acostó. Disfrute mucho cocinar con mama. No lo hacía hacemucho. La tarta nos quedó muy rica pero no muy dulce, como me gustan. Ella dijoque le faltaba algo que no sé cómo se llama, pero a mi parecer estaba bien. Papa se levantó y probo la tarta dijo lo mismo quemama, puse los ojos en blanco y seguí comiendo la tarta y luego prepare café. Empezamos a hablar de lo que pasaría mañana, y mamaseguía insistiendo con cambiar mi estilo. Mi papa le dijo que me dejar en paz yque me vistiera como quisiera. Eso amaba de papa, siempre me apoyaba.Paso el día y mama seguía insistiendo. Al final cedia ponerme algo de lo que me dijo y cambiarme el peinado, sola para complacerla.Pero en el fondo de mi ni quería ir, pero no sabía cuándo la volvería a ver, nolo iba a dejar en mal. Aunque sé que se aprovecha de mi amor por ella.El día pasó rápido. Era todo muy normal, estabahaciendo la cena junto a mama, ella tenía su delantal de flores, cuandoescuchamos un ruido en el cuarto de mama y papa. Salí inmediatamente, casi diun salto de la cocina al cuarto. Me quede perpleja cuando vi toda la sangre enel piso, la sangre salía de su nariz de manera descomunal, mi madre llegosegundos después y empezó a dar gritos ahogados. Sabía que no me podía quedar hay a ver así que saqueinmediata mente una toalla y la puse en su rostro, para que retuviera la sangre.Luego tome el teléfono que siempre lo tenía enzima por si acaso había unasituación como esta. Marque el número de emergencia y avise. Me dieron unasinstrucciones de que hacer mientras llegaban. Le dije a mama que me trajera mástoallas y que reaccionara. Un poco abrumada fue y lo trajo, los paramédicos medijeron que pusiera a papa boca arriba para que dejara de sangrar. Luego ledije a mi papa.-Papa no hables, solo aprieta mi mano dos veces paradecir no y una vez para decir si- le dije con mucha paciencia, aunque pordentro estaba colapsando. Después mi papa apretó la mano una vez para decir queestaba de acurdo.-Ok. ¿Te duele la cabeza?- le dije siguiendo con vozde calma. El apretó la una vez. Yo asentí. Luego le dije.-¿Papa puedes aguantar unos minutos?- el apretó lamano una vez. En ese momento me tranquilice. No estaba tan mal como pensaba.Luego mi mama llego con las toallas aun en shock. Luego escuche las sirenas,todo iba a mejorar.Los paramédicos entraron y lo tomaron empezaron ahacerles preguntas que no podía entender, ya que no conocía bien su ritmomédico. Después le hicieron esas mismas preguntas a mi madre y ella lascontesto. Luego se la llevaron con papa, los paramédicos me dijeron que mequedara aquí. Yo me negué pero mama insistió para que me quedara limpiar. Sololo hice por esa razón. Pasaron alrededor de dos horas y papa llego como sinada hubiera pasado. Ya yo había hecho la cena, había limpiado, cambiado lassabanas, hice todo lo posible para colaborar llegue y pare inmediatamente a ver como estaba papa.Luego le dije.-Papa que te dijo el doctor- mi voz sonaba ronca, yme rostro estaba mostrando mucha preocupación. Él se sentó y dijo con voz conmucha calma.-Dijo que fue un ataque... y que estaré bien paramañana pero quería que tomara otro medicamento que no remplaza la quimio perome ayudara hasta que la consiga- dijo con voz muy tranquila para las palabrasque estaba pronunciando. Trate de mantenerme tranquila para que no sealarmara. Mantuve mi expresión de una manera neutral pero a mi parecer no leconvenció, porque después me miro con la mirada dulce y tranquilizarme.-Kate te pido que por favor no te alarmes estarémejor dentro unos días eso fue lo que me dijo el médico- se levantó de su asiento y luego me estrechocontra su pecho para abrazarme. Me sentí segura como una niña pequeña en susbrazos. Extrañaba esa sensación, empecé a estremecerme y luego mi padre levantomi rostro y me quito una lagrima que caía lentamente de mi ojo. Logre respirar, me retire lentamente de su pecho, mostréuna sonrisa lo suficientemente convincente para que me soltara. Luego le dijecon tono apagado.-He hice la cena ¿quieren un poco?- le dije luego mequite las lágrimas con el dorso de la mano. Me voltee para buscar los huevos con espinaca quehabía cocinado. Mis padres asintieron. Les serví a cada una ración bien generosa a cada uno luego lesserví te. Se la comieron de un bocado me quede muyimpresionada luego dije esbozando una rosa burlona con tono de sarcasmo.-Bueno creo que quedo mal la cena- luego reí entredientes. Mi papa volteo a mirarme con un tono de burla en los ojos y dijo.-Hija en esta vida aprendí tres cosas- dijomostrando tres dedos-. Una que con hambre cualquier cosa sabe bien- puse losojos en blanco y el soltó una risita entre dientes- dos que el medicamento meha quitado el gusto- dijo riendo aun entre dientes- y tres que con la comidaque cocina tu madre uno aprende a tolerar algo no tan sabroso- dijo soltandouna carcajada y yo me le uní asintiendo con la cabeza a la vez. Mi mama sevolteo hacia nosotros una falsa indignación en los ojos, y dijo.-Pues han comido de esa comida durante años así queno entiendo porque se están quejando- dijo y luego le dio un ligero golpe en lacabeza. Yo me voltee y la mire riendo entre dientes, y mi rostro reflejabaincredulidad. -Mama a eso se refiere papa, ya nos acostumbramos-dije y luego papa se ahogó con un sorbo de té que había tomado. Nos reíamos acarcajadas, mi madre al principio puso cara de falsa tristeza pero no pudolograr contener la risa. Me di cuenta que la contenía desde hace rato porquelas comisuras de sus labios hacían una rara mueca y parece que ella se diocuenta de que me percate porque se tapó con el libro. La noche paso en risas porque papa siguió con eltema de la comida pero en instantes me sumergía en mis pensamientos y perdía elhilo de la conversación. Me quedaba pensando que me iba mañana y no sabíacuándo iba volver. Habían nos partes de mí que se debatían entre sí. Una deellas era quedarme aquí para cuidar a que mi papa no le de otro ataque, pero laotra era que si me quedaba aquí el cáncer seguiría expandiéndose y eso erapeor. Lo iba a extrañar demasiado, pero lo iba a extrañar más si se iba parasiempre. La voz de mi madre interrumpió el hilo de mis pensamientos y levantemi rostro bruscamente de pronto sentí un fuerte dolor en mi cuello. Puse mimano en la zona donde me dolía con un gesto de dolor. Mi mama soltó un ligerarisita entre dientes con los ojos entrecerrados y me dijo con voz severa perodulce.-Querida te quedaste dormida, al parecer él te de mentano ha perdido ese efecto de arrullarte- dijo tocando mi rostro dibujando unalínea desde mi ceja derecha a mi barbilla. Me mirada con esos ojos llenos deternura. Asentí esbozando una sonrisa torcida de la vergüenza de esos recuerdosde cuando me quedaba dormida en el mueble leyendo cumbres borrascosas cuandotenía tan solo quince años. -Ven vamos a dormir, también estamos agotados ya tupadre se acostó. Mañana voy a ir a ayudar a montar la fiesta ¿quieres venir?-asentí y solté un bostezo. Me llevo a la cama me dio un beso en la frente y sedespidió de mí. Me sorprendí de mi misma de lo rápido que me dormí.

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