-Tranquilo, yo puedo salvarte. Yo cuidaré de ti, pequeño...
-YoonGi hyung, yo... Te amo.
-También te amo, mi pequeño TaeTae.
~
*Narra Suga.*
Luego de aquella confesión, sentí mis mejillas arder y mi corazón comenzó a latir aceleradamente. Levanté delicadamente su cabeza y vi su rostro completamente ruborizado, tú siempre tan lindo, TaeHyung.
Aún dudaba si lo que él me dijo sería real, debido a que se encontraba con muchos problemas y no quería presionarlo, pero de alguna manera me sentí bien al decirle lo que mi corazón estaba callando desde hacía ya un tiempo.
Nos mantuvimos abrazados un buen rato, hasta que él se puso de pie y se perdió por el pasillo, sin decir nada.
De pronto, vi que volvió con su abrigo y un maletín, se acercó a mi y se aferró a mi brazo.
-Suga hyung, no sabes cuánto esperé este momento.- dijo sonriendo de la misma forma en la que solía hacerlo, mientras salíamos del teatro.
-¿Dé qué hablas, pequeño?- me quedé mirándolo un poco confuso, perdido en sus hermosas facciones, limpiando suavemente las lágrimas que aún corrían por sus mejillas.
-Me refiero a volverme a encontrar contigo, contarte mis sentimientos y poder tomar tu brazo al caminar.- un leve rubor apareció en su rostro.
-Yo... No sé qué decir, Tae. Es todo tan perfecto que aún no puedo descifrarlo, por decirlo así.- reí tímidamente, qué cambios logra él en mí.
-YoonGi hyung, ¿tú me quieres?- se detuvo justo frente a una banca en el parque y me invitó a sentarme a su lado.
-Tae, ya lo dije. Te amo. Pensé que estarías diciendo cosas al azar cuando hablaste de eso en el teatro, pero aunque fuera así el caso, yo no podría ocultar más mis sentimientos. No tienes idea de lo mucho que me importas, todo lo que me preocupo y todo lo que siento por ti. Eres la persona más hermosa e inocente que he conocido, eres simplemente perfecto ante mis ojos.
-Yo también te amo, hyung. Debo admitir que estuve pensando mucho tiempo acerca de lo que sentía por ti, no quería simplemente ilusionarme y que luego al contarte, me rechazaras. Fue bastante complicado para mí lograr entender qué era eso tan lindo que sentía cuando estaba a tu lado, me costaba entender por qué no podía esperar cada noche para verte al siguiente día en la escuela... Fue horrible cuando me contó NamJoon hyung sobre tu accidente, sentí que me quedaría solo nuevamente. Eres la primera persona de la que me he enamorado y que me aceptó tal y como soy, sin juzgarme... Sin burlarse de mí.
No aguanté más y lo abracé, comencé a llorar y a besar delicadamente su mejilla mientras pasaba mi mano suavemente por su espalda.
-TaeHyung, te voy a proteger como lo más sagrado que tengo, no permitiré que nadie te haga daño de nuevo, nunca más. Desde hoy solo quiero que vivas momentos alegres conmigo, ¿te parece?- me arrodillé frente a él y tomé sus manos con cariño.- Kim TaeHyung, ¿aceptarías ser mi novio?