Es sólo mío #4

1.9K 158 49
                                    

- Goku, quiero qué te quedés.

- Lo siento Vegeta, pero ya escuchaste a tu padre.

- Lo sé , pero - un tenue sonrojo apareció en sus mejillas - Me....Me agradas Goku y quiero qué te quedés.

Éste lo miró un tanto sorprendido y le dio una leve sonrisa.

- Ven, dormiras en mi cuarto. - se sonroja.

- ¿En tu cuarto?
Mi suerte es de oro, tendré a Vegeta en poco en tiempo.

- Sip, yo dormiré en el sofá. - Bueno capaz mi suerte no es de oro, si no de cobre.

- No Vegeta. Dormiras en tu cama y yo en el sofá.

- Pero Goku, el sofá es incómodo y no tengo otra habitación. - hizo un adorable puchero.

- Pe...

- ¡Pero nada!, Son Goku dormirá conmigo y punto - tapó su boca con ambas manos.

- ¿Co-Cómo dijiste?

- Emm..y-yo - tomé su mentón y toqué sus carnosos labios con la yema de mi dedo.

- Me encantaría dormir contigo.

- C...Claro.

Lo seguí a su alcoba, esta era pequeña. Sólo equipaba lo necesario, cómo un ropero juntó a un espejo y su cama.
las paredes eran azul zafiro, un bello color.

- Emmm, No tengo nada de tu talla.

- No pasa nada - me quité todo menos mi ropa interior.
Se quedo admirando mis músculos con su bello sonrojo.

- ¿Pasa algo? — Sonrió.

- Nop, nada.

Su mirada la desvió y quito lentamente su ropa hasta quedar igual qué yo. Su cuerpo era dignó de admirar, su fina y delgada cintura juntó a sus esbeltas caderas Iban perfectas a esa actitud y sonrojo de Vegeta.
No pude evitar morder mi labio. Al fín tenía a Vegeta cómo quería, después de tantos años admirando su belleza desde lejos ahora lo tengo en frente y la verdad no sé cómo reaccionar.

- G...Goku, Vamos a dormir. - asenti y me acosté del lado derecho. Ambos nos dábamos la espalda.
Por qué no puedo reaccionar?
esto es lo qué siempre estuve esperando.
Hasta qué una duda surgió.

- Vegeta....

- Qué.

- ¿Cómo es qué sabías mi apellido? nunca te lo he dicho.

Un incómodo silencio nos rodeaba.
Me di la vuelta y el igual ambos nos mirábamos pero el cómo siempre bajó la mirada.

- Lo sé desde hace mucho tiempo. Goku, y...yo - suspiró.

- ¿Tú....?

- Te conozco desde hace mucho tiempo, te he estado observando en silencio. La primera vez qué te vi fue en el restaurante, ese dia sentí mi corazón a mil por hora. muchos lo llaman amor a primera vista.

- Éso quiere decir qué tu me espiabas todo éste tiempo?- Se sonrojo y me miró con sus ojos vidriosos estaba por romper en llanto.

- L...Lo lamentó, es qué me obsecione contigo. Se todo sobre ti, tu família tus géneros favoritos en música, tu comida favorita. ¡Todo! — No podía estar más fascinado con éste hombre —.

- Vegeta 
tomé su mejilla lo más delicado posible.

- Nunca pensé qué el observado sería yo, Porqué yo hacía lo mismo contigo. Te he mirado desde lejos, desde el día que tomaste mi orden. Yo te amó.

- Que curioso, nos observamos mutuamente todo éste tiempo—.
Le sonreí y me acerqué a sus labios, esos qué tanto quise probar.

Era un besó tranquilo, lento. cómo si tuvieran toda la noche para ambos.
Sus lenguas daban un leve compás mientras sus miradas se cruzaban durante ese fogoso besó. Las caricias se hacían presentes, se acomodaron quedando uno arriba y otro abajo.

- Seré cuidadoso...

- S-Si.

Sus manos tocaban ese pequeño cuerpo qué tanto anhelo en años.
Mordió su cuello dejando varias marcas en el, quería qué todos supieran qué desde éste dia, era sólo suyo.

- ahh...- Su sonrojo delataba lo mucho qué disfrutaba. Goku Prosiguió a morder sus suaves pezones, ésos grandes botones rosados lo hacían excitar demasiado.

Bajó sus boxer y los arrojó al suelo. Quedo embobado viendo sus esbeltas piernas, eran lo qué más llamaba su atención en ese chico peliflama.

- G-Goku...- Su mano subía y bajaba sobre su duro miembro, aveces daba leves apretones qué lo hacía gemir más alto.

- Vegeta, ya es hora. - Susurro en su oído, con esa voz tan ronca y varonil qué hacía poner sus pelos en punta. Capaz estaba yendo muy rápido pero ya no Aguantaba más.

- S...Si.

Con suma desesperación bajó su boxer y se adentró lentamente en el pequeño orificio dilatado por sus propios fluidos.

- ¡Ahhh!, D-Duele...
Pequeñas lagrimitas caían de sus mejillas.

- Lo siento... - Susurró en sus labios y lleno de dulces besos su sonrojada carita.

Sus lágrimas dejaron de caer y su respiración comenzó a acelerarse al igual qué su poseedor.

- Amm...¡ahhh!
Cerraban fuertemente sus ojos para poder experimentar mejor el placer qué ambos estaban sintiendo.
Las embestidas aumentaban acordé a lo qué su pequeño Decia.

- ahh...G..Go...ku...ahh..más...
Sentirlo dentro era una nueva sensación para el, una sensación qué le gustaba sentir.

- Ve...Geta..¡ahh!...Siempre he querido follarte y ver tu jodida expresión. Es lo mejor qué he visto en todo el mundo. - Sus miradas volvieron a cruzarse, desprendían un brilló especial y unieron sus bocas para callar sus gemidos un poco. Sólo no querían ser descubiertos por el padre de Vegeta.

- ¡ahhh! G-Goku está palpitando... - Éste sonrió, Era tan obsceno.  comenzó a masturbarlo duplicando sus gemidos y placer.

- Ve...Vegeta...
Una última estocada bastó para venirse dentro de ese estrecho orificio y Vegeta no tardó en venirse en el abdomen de su pareja.

- Te amo mi acosador.

- Y yo a ti, acosador con pelo de palmera.

- Quién diría qué el acosador tendría otro acosador.
Ambos rieron y se acomodaron para dormir tranquilos y cómodos.







La noche transcurrió rápido dando un bello amanecer a un peliflama y uno con forma de palmera.

- Buenos días Vegee.

- Buenos días palmerita. - se dieron un piquito y se quedaron abrazados un momento hasta qué unos fuertes golpes los hizo separar.

- ¡VEGETA!, ¡ABRÍ LA MALDITA PUERTA!. - sin duda era su padre.

Vegeta se quedó observando a Goku, no sabía que hacer. sabía qué su padre lo mataría si los veía a ambos.

- Vegeta tranquilo. Estaré contigo.

- Pe....

- Pero nada, Ya somos grandes y debemos contarle a tu padre sobre lo nuestro.

- Tienes razón. - suspiró y se cambiaron.

Una vez cambiados se tomaron de la mano y abrieron la puerta dando encuentro a su padre el cuál quedó atónito ante el agarré de sus manos y sus caras decididas a todo por estar juntos.




Fín....

Mini Historias Yaois.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora