La fiesta

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~Clara~

A la mañana siguiente estaba agotada, había dormido apenas cuatro horas. Lo que había hecho Daniel me tenía pensativa, ¿A qué venía todo esto? ¿A qué juega? Iba camino del instituto cuando me lo crucé:
-Buenos días Clara.- Me saludó con una sonrisa radiante.
-Hola.- Respondí secamente. No entendía a qué jugaba y a qué venía recogerme.
-Ey nena, ¿qué te pasa?
-No me llames nena.- Dije molesta- solo somos amigos, te recuerdo.- Remarqué mucho las dos últimas palabras.
-¿A caso quieres ser algo más?- Preguntó con una sonrisa pícara.

Se burlaba de mí. Ya lo tengo claro, es eso. Me ha visto como una chica facilona y ha decidido que va a jugar conmigo, pero no se lo pienso permitir.
-No. Obviamente no.
-Mejor, así en la fiesta a la que voy el viernes me follo a las que quiera.
-Pues hala, disfrútalo.- Concluí de esta manera la conversación y aceleré el paso para perderle de vista.

No tardé en llegar al instituto y encontrarme con mis amigas en clase. Hoy había venido Eva:
-Tía, perdona por lo del otro día, estabas ilusionada y me comporté como una gilipollas.- Se disculpó conmigo, mientras me abrazaba.
-No te preocupes, yo tampoco tengo que ilusionarme por tíos que no valen la pena.
-¿Qué ha pasado?- Preguntaron mis tres amigas a la vez.
Les conté lo que pasó la tarde anterior, el friendzoneo que me hizo, y lo ocurrido hace un rato.
-Pasa de él, no te merece.- Me aconsejó Vero
-Esa clase de tíos solo valen para follar, están buenos, y normalmente la tienen grande, pero lo que es el cerebro hay que buscárselo con una lupa.- Añadió Eva.
Todas nos reímos ante ese comentario. Seguimos hablando unos minutos hasta que entró el profesor y comenzó a dar clase.

Tras tres horas de clase sonó el timbre y por fin salimos al recreo.
-¿Qué hacemos?- Preguntó Ana.
-Yo voto por sentarnos a hablar y ya está.- Propuso Eva.
Hicimos lo que ella había dicho y nos sentamos en la cafetería, de repente vino Daniel:
-Clara, ¿luego a la salida te vienes conmigo como ayer?- Preguntó.
-No, vete con una de las que te vas a follar el viernes.- Respondí algo picada.
-Me parece que alguien está un poco picada. - Dijo acercándose lentamente hacia mi.
-¿¡Qué coño haces!?- Grité mientras me levantaba y le empujaba.
-Venga Clara, calma, vámonos.- Me tranquilizó Ana.
Y tras esto nos fuimos al baño, y me pidieron explicaciones, "¿Por qué te has puesto así?", la verdad es que no lo sabía ni yo, las respondí que estaba un poco alterada y bebí agua, acto seguido sonó la campana anunciando el fin del recreo y nos dirigimos a clase.

El resto de la semana transcurrió con normalidad, hasta que llegó el viernes. Estaba en mi casa cuando alguien llamó al timbre de mi casa, y me acerqué a la puerta para abrir:
-¡Clara!- Exclamaron Ana, Vero y Eva a la vez.
-¿Qué pasa?- Pregunté extrañada.
-¡Sabemos quién organiza la fiesta de hoy!- Respondió Eva.
-¡Y dónde!- Añadió Vero.
-¡Y estamos invitadas!- Concluyó Ana.
-Venga, vamos a arreglarte- decidió Eva-. Tenemos que darnos prisa, hay que estar allí a las nueve.
-Pero, no me habéis preguntado si quiero ir.- Dije.
-No lo necesitamos, sabemos que vas a decir que no- respondió Vero- pero que en realidad te mueres de ganas de ir.
-Así que vamos a prepararte.- Finalizó Ana.

-¡Estás impresionante!- Exclamó Vero.
-Seguro que te follas a Daniel.-Dijo Eva riéndose.
A continuación nos fuimos a la fiesta, nada más llegar nos quedamos impresionadas ante la magnitud de la casa. Subimos lentamente las escaleras que llevaban a la puerta de entrada, la cual estaba abierta. Entramos y a la primera persona que vimos fue a Daniel, como no. Parecía que estaba esperando nuestra llegada, mis amigas se dirigieron a él y le saludaron:
-Hola Daniel.- Saludaron todas.
-Hola chicas- respondió-. Hola Clara.- Añadió dirigiéndose hacia mí y acercándose para besarme la mejilla.
-Hola.- Dije apartándome a un lado para esquivarle.
-Bueno, bienvenidas a mi casa, espero que lo paséis bien en la fiesta, ya ha llegado casi todo el mundo.- Nos informó y acto seguido se fue.
-¿Por qué no me habéis dicho que era en casa de Daniel?- Pregunté a mis amigas cabreada mientras me volvía en su dirección.
-Tampoco lo has preguntado.- Respondió Eva encogiéndose de hombros.
-Anda, no seas quejica y disfruta.- Añadió Vero.
Estuvimos dando una vuelta a la planta baja de la casa y el jardín, nos cruzamos con muchos conocidos a los que saludamos. Después nos volvimos dentro y cogimos unos vasos en los que nos echamos alcohol. Empezamos a beber pero sin pasarnos mientras nos reíamos y nos lo pasábamos bien, poco después nos pusimos a bailar. No me di cuenta hasta poco después de que estaba restregándome con un chaval al que no conocía, por lo que me separé y me fui a otro lado. Mis amigas me dijeron que me fuese al baño a lavarme un poco la cara, por lo que fui y al salir me dispuse a mirar en varias habitaciones ya que me apetecía tumbarme un poco para descansar.
La primera puerta que abrí tenía a dos personas follando, me dirigí a la habitación de al lado y me encontré a Daniel liándose con Lucía.

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Gracias por leer este capítulo, pronto subiremos el siguiente, esperamos que os haya gustado.
¡Hasta pronto!
Pd: La chica de la foto de este capítulo es Eva (@_angelcum_ en instagram)

50 SOMBRAS DE CLARADonde viven las historias. Descúbrelo ahora