Capítulo 11

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Cuando desperte en la mañana siguiente, el no estaba en la cama, me dejo una nota arriba de una mesita que habia en la habitacion.
"Jaz:
       Te dejo el papel que te dio tu  
       papá, creo que tendrís que ir, se  
       merece una oportunidad, como
       nos merecemos todos. Gracias
       por esta noche hermosa, espero   
      que entiendas porque no podemos
      estar juntos.
          Te amo con el alma.
                                           Tomás."

Esto que el me habia escrito me habia hecho reflexionar, y un recuerdo vino a mi, cuando nosotros con Tomas recien nos conociamos, el no queria saber nada conmigo, porque estaba con otra persona en una situacion complicada y yo le dije "Dame una oportunidad, todos nos merecemos una para poder demostrar de lo que somos capaces de hacer por amor", era lindo poder de a poco, recordar momentos con el, que fue tan importante en mi vida. No estaba enojada por lo que decia en la ultima parte de la nota, es mas, creo que comenzaba a entenderlo, que el estaba entre la espada en la pared, porque esta chica Sofia, cuando yo estuve en coma y el estuvo devastado, ella fue la unica que lo acompaño y lo acompaña, a pesar de saber que el me ama.
Tenia razon con respecto a mi papa biologico, tenia que darle una oportunidad. Mire la hora y eran las nueve de la mañana y la cita era a las diez y media, tenia tiempo de volver a mi departamento y arreglarme un poco.
Volvia mi departamento, me puse un jean negro, una camisa de jean claro y marque su numero para hablar con el y avisarle que iba a ir.
-¿Hola?
+Sargento Morla, ¿quien habla?
-Juan...Soy Jazmin
+Perdoname, este es el telefono del trabajo por eso, ¿como estas?
-Bien, por suerte, muy bien. Queria decirte que voy a ir a hacerme los analisis.
+No sabes lo bien que me hace escucharte decir eso, ¿te parece si te paso a buscar?
-Bueno, mejor, porque no se donde queda el laboratorio al que hay que ir.
Cortamos la comunicación y en media hora el estaba en la puerta de mi casa en un auto negro. Todo fue muy normal, una situacion un poco incomoda, pero bueno, es normal. Nos dijeron que los resultados iban a estar en una semana y que los mandaban por e-mail. Cuando volviamos, el me compro un café y medialunas para que desayunara en el camino y me dejo en mi casa, porque el tenia que volver al trabajo.
Pense en que podia ir a entrenar para aprovechar la mañana y luego ir a almorzar con Cami y Facu, para contarles lo que habia pasado la noche anterior con Tomas.
Le mande un mensaje a los dos, porque seguramente estaban durmiendo y fui a entrenar.
No hubo nada nuevo en el gimnasio, no tuve la oportunidad de cruzarme con Tamara para poder hablar de su padre y del accidente porque mi entrenador me dijo que estos dias no habia ido a entrenar, que habia desaparecido.
Por supuesto, tambien me reto por lo de mis manos, me dijo que una frase que me quedo y creo que me la voy a tatuar en algun momento.
"Si dejas que tus emociones nublen tu juicio, estas perdida"

Termine de entrenar y fui a lo de Cami, obviamente, estaban levantados y ya listos para ir a comer. Cuando conseguimos una mesa les empece a contar todo lo que paso...

-VISTE, YO TE DIJE QUE IBAN A VOLVER – Decia Cami explotando de emocion, mirando a Facu, como si ellos hubieran estado hablando de nosotros..
-Pero deja que termine de contarnos, no la interrumpas – Dijo Facundo serio, pidiendome que termine de contar todo. Saque de mi bolsillo la nota que me habia dejado y se las mostre, la emocion de Cami se bajo, y sus rostros se pusieron totalmente palidos, y se empezaron a mirar.

Era muy obvio que habia algo que ellos sabian y que yo no...
+Camila, sos mala intentando mentir, ¿que me estan escodiendo?
-No soy yo la que te tiene que decir esto Jaz, pero lo que te puso Tomas en la nota tiene algo mas grave en el fondo... - No pudo terminar de hablar porque mi celular comenzo a sonar y tuve que atender.
-¿Hola?
+Jaz, soy Tomas, ¿podemos vernos? Tengo que decirte algo.
-Te veo en una hora en el bar de ayer.
Terminamos de comer con los chicos y me tome un taxi para llegar hasta alla, cuando llegue, lo vi sentado en una mesa afuera, nervioso, no entendia que estaba pasando.
Me acerque y el se paro para saludarme con un beso en el cachete y pedirme que me sentara.
+Mira Jaz, no espero que esto te lo tomes bien, pero lo tengo que hacer –Su rostro tenia preocupacion y seriedad, cuando de su mochila saco un sobre. Me daba miedo abrirlo, sin dejar de hacer contacto visual con el abri el sobre.
Era una invitacion, a un casamiento, mejor dicho, a su casamiento.
+Podes enojarte, pegarme, putearme, dale descargate – El estaba mas nervioso que yo, que estaba tratando de asimilar lo que estaba leyendo. La noche anterior habia sido la noche mas feliz despues de mucho tiempo, y ahora, me estaba invitando a el casamiento con su novia, realmente no comprendia nada de lo que estaba pasando.
-Ahora tu nota tiene sentido, no te voy a putear ni nada de lo que me estas diciendo que haga, porque como te dije anoche, yo quiero tu felicidad Tomi, y voy a ir a tu casamiento, gracias por invitarme. - Me levante y le di un beso en la mejilla y fui a tomarme el colectivo para volverme a mi casa, guarde la invitacion en mi bolsillo y apague mi celular. Llegue a mi casa y me tire en la cama, unas cuantas lagrimas salieron de mi rostro, era inevitable no ponerme mal, en cierta forma es normal, o eso creo, el amor de mi vida me estaba invitando a su casamiento, tenia que ir. Por todo lo que habiamos pasado, el se merecia que yo este ahi en el dia mas importante de su vida, por mas que me destruyera, y tuviera que llorar el resto de mi vida, yo iba a estar ahi para el, se lo merecia.
Mire la fecha del casamiento y era la semana que viene, entonces llame a Cami y le dije que me tenia que acompañar a comprarme algo para ponerme, porque no tenia nada, ni zapatos ni vestido, nada. No es ropa que yo acostumbre a usar.

Vos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora