Casada Con Un Extraño

Capitulo 26

Odiaba tener que estarme ocultando de la gente, en este caso de Chris, desde hace un mes que todo el desastre pasó no lo he podido ver, bueno no quería verlo por que aun no encontraba las palabras correctas para decirle que estoy casada, si, Will se lo dijo pero al parecer por la borrachera el no lo recuerda, si yo no recordé el beso no creo que el recuerde eso. Mi escondite mientras estoy en la escuela es la biblioteca, hablo con los maestros y ellos me dan el trabajo que debo de hacer y con otra chica que a sido como mi maestra trabajamos juntas, y así me ahorro ver a Chris y sentirme culpable, hasta ha sido mejores días la verdad, y si, ella sabe que estoy casada

-Lynae momento de irnos- me habla Zoe chasqueando sus dedos enfrente de mi cara y yo parpadeo

-Se me fue el tiempo- le digo guardando mis cosas

-Si me di cuenta que ni tu celular contestas- me dice, tomo mi celular y mierda santa, tengo muchas llamadas perdidas de Will, lo llamo de vuelta

Primer tono.... Segundo nada.... Tercero y contesta

-Para qué quieres un teléfono si no vas a contestar? Estoy esperandote afuera de tu escuela apurate, no tengo tu tiempo- antes de protestar el cuelga, frunció el ceño bloqueando el teléfono

-Problemas en el paraiso?- pregunta Zoe cuando salimos de la biblioteca que da directo a la salida

-Esta imbécil con días difíciles- le digo mirando el auto de Will afuera, me despido de mi amiga y camino hacia el auto. Pongo mi bolso junto a mis libros en el asiento trasero cierro la puerta y entró al asiento del copiloto, dirijo mi mirada a Will, y está enojado, vista fria, mandíbula apretada, ceño fruncido y está tenso, maldita sea lo conozco tan bien, maldito infierno el que me espera

-Me puedes decir que mierda te pasa?- le digo a lo que él no hace caso e inicia a manejar.

Silencio tenso es todo lo que se siente en el ambiente, no me quiere hablar y no voy a rogar, pero lo único bueno es que con una mano sostiene el volante y con la otra sostiene mi mano. Llegamos a casa y no fue capaz de abrirme la puerta o bajar mis cosas, no el señor solo se bajo y no le importó lo demás, me estoy iniciando a enojar

-Una ayuda me vendria bien- gritó al aire Will voltea y rueda sus ojos, me arrebata las cosas e inicia a caminar hacia la casa, tan siquiera me ayudó. Entramos a casa y él deja mis cosas en la mesa del living room

-Ahora sí, imbécil- le digo posicionando enfrente de él bloqueando el paso

-Muévete- me dice, lo golpeó en el pecho

-No, dime que mierda te pasa, estúpido- le digo ahora yo enojada, tomó su mano y lo arrastró hasta el sofá y él me sigue

-Y bien?- le digo y nada por su parte

-Bueno, yo hablare, no se cuantas veces te lo e dicho pero odio que me grites por el teléfono- le digo alzando la voz y levantandome del sofa pero el me jala del brazo haciéndome caer encima de él, estoy un poco mucho enojada como para dejarme llevar, intenté levantarme de mi lugar pero Will me rodea con sus brazos haciendo que me acomode, poniendo mi cabeza en su pecho

-Lo siento, solo a sido un dia muy dificil, lo siento tu no tienes la culpa- dice besando mi cabeza, eso es lo bueno de nuestra relación, tenemos nuestras discusiones pero no pasan de 10 minutos por que nos damos cuenta que no podemos estar enojados, mientras Will sepa disculparse todo está bien

-Obviamente no tengo la culpa de que tu seas tan gruñón, tan imbécil- le digo volteando a verlo

-Que sea como? Si aqui la unica...- le tapo la boca dejándolo con la palabra en la boca