TAXI . Ziall

Parte 1

Música, alcohol y mucha comida.

Lo más delicioso para ese rubio de raíces castañas era lo último.

Su nariz lo llevó hacia la mesa donde se encontraba el cóctel, y antes de que la pareja celebrará abriendo el primer trago, ese rubio teñido ya se encontraba comiendo de la catarata de chocolate con un malvavisco.

Delicioso.

Justo cuando se echó un canapé a su boca un sonido estremecedor de aplausos y gritos se escuchó en toda la sala, que era bastante grande.

Poco le importó, porque el apetito lo tenía hasta en otro mundo. Sus manos viajaban y viajaban por toda la mesa buscando cosas para saborear.

— ¡Hey, Ni!

La voz de su amigo Liam lo interrumpió.

—Sabía que te encontraría aquí.

Harry y Louis, otros dos amigos, aparecieron por atrás.

—¿Aquí has estado todo este tiempo? —Louis rodó los ojos cuando Harry preguntó lo obvio.

—Hemos traído trago, querido amigo —sonrió Louis.

Le pasó uno a Liam y luego uno a Niall, quién miró el líquido blanco del vaso con una mueca. Tenía hielo y algunas hojas que parecían ser de menta.

—¡Eh, eh, eh! —Liam le quitó el vaso a Niall— No hay motivo para que tomes tú, nene.

—Déjale que lo haga una vez, gordo —Harry dijo intentando quitarle el vaso con alcohol, pero Liam se echó hacia atrás.

—¿Ustedes saben que Niall tiene solo 18 años? —siguió excusándose.

—18 años le permiten tomar —Louis le quitó el vaso a Liam y se lo volvió a entregar a Niall.

—¡Soy el responsable de este crío, Louis! —Liam casi gritó— ¡Soy yo y ustedes los que lo debemos llevar a su casa sano y salvó por su madre!

—¿Y cuál es el puto problema de que se emborrache? —el castaño de ojos azules encaró a su amigo— Él ya tiene 18 y puede hace lo que se le dé la gana. Vamos, Niall, puedes tomar.

—Les juro que si se emborracha antes de medianoche, serán ustedes el que se las arreglarán, porque yo me iré de acá cuando esta puta fiesta se termine ¿me escucharon? —y luego algo cabreado se fue a felicitar a su hermano recién casado.

—¿Por qué exagera tanto? —preguntó Niall mirando aún el contenido del vaso.

—Porque tu madre nos encargó tu vida y será Liam el que nos lleve a su casa, tu debes llegar justamente a la TUYA... Y digamos que tu madre es muy sobreprotectora... —respondió el risado

—Liam no quiere que te emborraches, pero tú sólo decide por ti, hermano —Louis le sonrió incitando al rubio a beber de ese alcohol.

—N-No lo sé, quizás Liam tiene razón...

—Vamos, Niall, es solo un trago ¿Qué te puede pasar? —el rizado rodó los ojos—. Luego puedes decir que no, pero al menos toma algo.

El rubio miró dudoso su vaso, acercó su nariz al líquido e hizo una mueca extrañada.

—¿Qué mierda es? —preguntó volviendo a oler.

—Mojito —Louis sonrió mirando picaronamente a Harry—, vamos, toma.

Niall se llevó el vaso sin rechistar a la boca, tomó un sorbo que le hizo cerrar los ojos. Era como una explosión en su boca de sabores fuertes.