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Caminando por los pasillos del castillo iba aquella joven, era una chica linda y tierna. Una joven pelirroja, tono de piel claro, no muy alta ni muy baja de estatura, complexión delgada. Era ella, una chica extraordinaria, la chica Weasley, Ginebra Weasley o como todos suelen decirleGinny.

Caminaba hacia el gran comedor, esperaba ver a sus hermanos, para suerte de ella, no estabanno se detuvo por eso así que decidió quedarse un rato y estudiar un poco.

-esto es demasiado- dijo la joven mirando el libro de Pociones - ojalá no sea tan pesado

Se perdió tanto en la lectura que no noto que el lugar estaba casi vacío, cuando noto eso, decidió regresar a la sala común -al menos podré estudiar mejor ahí-pensó y se dirigió hacia allá. Al llegar vio que no había nadie, se le hizo un poco extraño, pero no le tomo tanta importancia. Se sentó y continuo con su lectura, los exámenes se acercaban y no quería salir mal en ello. Se acomodo en el sofá y se quedó dormida.

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Ahí estaba de nuevo en medio del bosque, recargada en un árbol mirando el cielo, esperando a que oscureciera para poder ver esa luna, una luna maravillosa, hermosa.

-Esto es maravilloso, sola aquí, sin nadie que me moleste- dijo y mostro una sonrisa - me encanta este lugar, diría que es mi lugar favorito -

Duro unos minutos mirando el cielo hasta que escucho un ruido. Rápidamente saco su varita y se dirigió hasta donde provenía aquel ruido. - ¿Qué haces Ginny? -pensó- que no te han dicho que si oyes algo raro, o en este caso un ruido extraño, te tienes que alejar. Pero como siempre, ahí estas de curiosa.

Se escondió detrás de un árbol al llegar al lugar de donde provenía aquel extraño ruido, no vio a la persona, solo escucho su voz- ¿Qué es lo que pasa contigo? - se cuestionó aquella persona, que por el tono de voz, rápidamente se dio cuenta de que era un joven

- No puedes hacer todo mal, Lo estás haciendo mal de nuevo- se dio cuenta que la voz de aquel joven era la de Draco Malfoy, intento moverse un poco pero al hacerlo, piso una rama, la cual hizo un pequeño ruido.

¿Quién está ahí?-pregunto con tono molesto- Sal de tu escondite sabandija cobarde, muestra tu rostro, quiero verte y así saber a quién hare tanto daño- Al escuchar lo que Draco había dicho, ella decidió salir, ya que si se mantenía escondida le podría hacer algo malo, o eso pensó ella.

Pero miren a quien tenemos ahí, es nada más y nada menos que la pequeña Weasley- Dijo en tono malvado- ¿Qué hare contigo? - la miro con repulsión, ella solo lo miraba con algo de temor

Lo miro, era un joven alto, tez pálida, rubio, un joven apuesto. -Perdóname, no sabía que había alguien más aquí. Usualmente nadie viene - miro hacia el suelo, evitando contacto visual con el rubio - Yono quería molestarte -

-Entonces ¿por qué estás aquí? - miro con enojo a la pelirroja, esperando a que le respondiera

-Escuche unos ruidos y decidí averiguar lo que eran -dijo Ginny

-Así que, en vez de huir y alejarte, decidiste averiguar lo que eran - ríe y mira a la chica- Eres valiente Weasley, pero eso te costara - saco su varita y apunto hacia la chica- debería hacerte sufrir-sonrió con malicia y grito - ¡CRUCIO!- vio a la pelirroja retorciéndose y gritando de dolor. El rubio disfrutó ver eso.

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Se levanto de golpe y grito- ¡Ahhh! - sintió como unas gotas de sudor caían y dio gracias a Merlín de que todo había sido una pesadilla.

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Historia inspirada, gracias a @CarolHellsing y @AnnStein5

Strange Love   (Ginny y Draco)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora