1 . El día

166 9 0
                                    

Me despierto con el pelo algo revuelto. Para que me conozcan mejor:

Mi pelo es de color rubio ceniza, cortado a capas que me deja la parte de arriba corto con unos pocos mechones largos un poco más de los hombros. Mis ojos son de color azul eléctrico y mis pestañas largas. Mido 1.61 y siempre pienso que soy un estorbo para los demás. No digo que no tenga amigos, si los tengo, pero siempre pienso que estarán mejor sin mi, aunque ellos me lo nieguen.

Me dirijo al baño y me peino un poco, bajo a desayunar con mi abuela y me lavo los dientes, me visto. Llevo puesto unos pantalones negros rotos con una camiseta de manga corta azul y un gorro blanco, de los que se quedan un poco colgando, para que me entiendan, como el de la portada. Me hago la cama a pesar de que no me apetece y luego me pongo mis addidas que estan de moda con las rayas negras. Me pongo los pendientes de cadena, es decir, el pendiente es de oro blanco y luego tiene una cadena dorada atada a otro pendiente que va arriba como un pircing en la oreja. Me pongo la pulsera y el collar de la luna. Me miro en el espejo por última vez y salgo de casa con mis auriculares. Camino hacia el instituto, no esta muy lejos y por eso voy a pie. Hace algo de frío, menos mal que me puse el gorro y tapé mis orejitas de lobo.

Olvide mencionarlo: En este mundo, en el instituto cada raza tiene una clase distinta. No quiero decir que no podamos tener amigos de otra raza, pero antiguamente hubo rencores entre las razas, por ejemplo los Licantropos ( lobos) entre los Hijos de la Noche (vampiros). Nunca habéis oido la frase: os lleváis como el perro y el gato, pues eso es porque entre la raza canina y gatunos también hubo luchas. Ahora todo esta calmado, pero todavía la mayor parte de la población vive tras el pasado.

Bueno, cuando llego a clase todas mis amigas ya estaban dentro y las saludo con la mano y una sonrisa, parecían enfadadas y mi sonrisa se esfuma. Dejo mi mochila en mi asiento y me acerco a ellas con algo de miedo como hago siempre.

-¿Qué os pasa?

-¿No lo sabes todavía?-mi mejor amiga Celta, la conozco desde los 3 años

-¿Saber el qué?-las tres se miran entre ellas asombradas- venga decírmelo ya...!

-Ay una chica nueva-frunce el ceño- es...es una gata!

-Bueno, ¿qué tiene de malo ser un Neko?

-No recuerdas las guerras que han habido estos últimos 100 años por su culpa-Kiara otra amiga

-Nosotros también tuvimos parte de la culpa-les digo con mi voz neutra de siempre

-¡Nuestros familiares los perros sufrieron mucho por su culpa!-Kiara algo enfadada

-Nosotros no hicimos nada para evitarlo.

-¡Pero...!

-Aelia tiene razón-Persa, que asta ahora había permanecido en silencio.

-Gracia Persa. Además, no tendrás que estar con ella, no puede estar en nuestra clase.

-Ya pero...con saber que habrá otro Neko más..-Kiara más tranquila

-Son peores los Hijos de la Noche, aunque son muy guapos...-Celta empieza a babear y sus orejas se echan al lado izquierdo como le pasa siempre que piensa en cosas pervertidas

-Oh! por Dios! por qué seré amiga de alguien tan pervertido? - mi ironía se nota bastante.

-¡Habla aquí la siempre solitaria!-parece que no notó mi ironía.-perdón...

-No te preocupes, no me molesta.

-Que lleves el gorro y no pueda ver tus orejas no significa que no te conozca como para que no pueda ver cuando te molesta ¿sabes?-se coloca en mi lado izquierdo- somos mejores amigas por algo no?

-Si, si

-Oye! a mi no te me pongas así eh?-ríe

-Perdón señora...-río

El profesor entra en clase y me ordena quitarme el gorro haciendo dejar mis orejas al aire. El profesor pasa lista y nos manda tarea para hacer, yo enseguida me pongo ha hacerla y se la entrego. Cuando lo hago me deja salir de clase para ir al lavabo.

se me olvido decir: a pesar de por la raza ir a clases distinta los baños son compartidos. Estuvieron apunto de cambiar eso, ya que habían muchas peleas, pero al final no lo cambiaron.

Por el pasillo me encuentro con la que debía de ser la nueva Neko. Parece algo perdida, puede que con tanta clase se aya perdido. Me paro lejos de ella.

-Ey! tú!-la chica me mira

-¿Sí?-voltea su cuerpo para mirarme, no parecía enfadada por que sea una Okami (lobo)

-¿Estas perdida? ¿Eres la nueva?

-Si, soy nueva, ¿me podrías decir donde esta la clase 4-A N?

-Sí claro, pero no digas a nadie que te ha acompañado una Okami, por favor.

-Nunca lo haría-me sonríe.

La llevo hasta su clase, la N dice que es de los Nekos y el 4 que esta en cuarto curso, el último, yo todavía estoy en tercero, mi clase es la 3-D O.Cuando llego decido irme sin decir nada como acostumbraba hacer, pero ella me detiene.

-Gracias-me sonríe, yo hago que suelte mi mano- lo siento, pensaba que no eras como los demás.

-Y no lo soy-la miro seria, como si hubiera dicho algo malo de mi-no me importa de que raza seas, es que nos pueden ver.

-Bueno, púes lo siento, ¿como te llamas?-me mira fijamente

-Aelia, ¿y tú?

-Mi nombre es...

-¿La..i...ka?-pongo ojos achinados ya que no veo bien al leer.

-Si-me sonríe-¿no puedes leer sin gafas?

-No

-¿Y por qué no las llevas?

-Uno por qué para ir al lavabo no me hacen falta y dos por que no me gusta llevarlas, me quedan fatal.

-Bueno, ahora ya tengo un motivo para volver a verte, quiero verte con las gafas puestas-le sale un risita.

-Bueno...me tengo que ir, ya nos veremos...espero...-le digo adiós con la mano y me voy.



MI RELFEJODonde viven las historias. Descúbrelo ahora