14. La prueba

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-¡Despierta!-Me grita mientras me despierto

-¿Que...pasa?-medio dormida froto mis ojos.

-Ya es la ora, cámbiate.

-La ora, ¿la ora de qué?

-De la prueba boba.-me levanto de golpe y me cambio a toda prisa.

Ahora llevo unos pantalones largos de color granate y una camiseta color azul marino, con una chaqueta negra. Salgo a marcha rápida detrás de Celta y me junto con las demás. Nos separamos en grupo y casualidad me toca con Celta y con Persa. gracias, me salvaste

Entramos en el bosque y caminamos a un paso normal. Celta y Persa iban hablando, mientras yo intento no perderme en el bosque, no me apetece quedarme a dormir con los animales. Supongo que Candy ya habrá salido de su habitación con sus amigos y luego se reunirá con Laika y Dylan. Bueno, es igual, yo ahora estoy con estas parguelas.

Voy algo distraída avanzando hacía adelante sin detenerme.

-¡Aelia! Tenemos que encontrar cintas azules por el bosque, no lo olvides.-Persa

-Lo se, pero me cuesta buscar si no paráis de hablar y yo intento no perderme.

-Bueno, vamos-Celta empieza a correr y nosotras la seguimos.

Cada vez esta más oscuro, ya son las diez de la noche y no me gusta estar aquí metida. No es que tenga miedo a la oscuridad ni nada, es solo que no me gusta estar en un sitio que no conozco a estas oras.

-Vallamos más despacio chicas-digo tranquila

-¡¡MIRA!! Ahí hay una cinta azul-señala un árbol al cual nos acercamos corriendo.

Persa arranca la cinta y la guarda en su bolsillo. Empiezo a escalar el árbol.

-¿QUÉ HACES?-me pregunta Persa algo extrañada

-Puede que haya más por arriba

Sigo escalando el árbol hasta ver unos ojos rojos, del susto caigo al suelo y golpeo mis rodillas. Alguien salta enfrente mio del árbol y cuando levanto la vista puedo ver que es un vampiro, todas mis amigas retroceden y me gritan para que haga igual que ellas, pero solo me quedo quieta.

-Hola, siento haberte asustado.

-Tranquilo-mis amigas están flipando

-Tengo hambre...-mira una herida en mi rodilla la cual sangraba

-No...me...

-Claro que no, yo no pero puede que ellos si-saltan otros tres chicos y una chica enfrente mio

-Esta es mia-dice el más alto del grupo acercándose a mi

-¿¡Aelia pero qué haces!?

El chico me levanta cogiendome del cuello y acerca sus colmillos. Yo me muevo intentando soltarme, pero parece inútil. Intento sacar mi cuchillo el cual lo llevo siempre, pero otro chico agarra de mi mano. Noto los colmillos clavarse levemente en mi cuello y derrepente...derrepente caigo al suelo. El chico alto también esta en el suelo, con Candy enfrente de el.

-¿Ca-candy? ¿¡Qué haces aquí!?

-¿Te salvo y así me agradeces?

-Perdón, gracias por salvarme de estos tipos, pero...¿qué haces aquí? pensaba que estabas con Laika.

-No, la deje sola un momento para venir a salvarte-Persa y Celta asustadas retroceden más.

-¿Con qué una chica a solas eeeh?-un chico vampiro de cabello negro y ojos grises con un toque rojo y verde.

Desaparece entre los árboles mientras que sus dos amigos huyen a otra dirección, seguramente a su habitación, o eso espero.

-¡Mierda! Ahora ese tipo va a done Laika, seguro-me levanto y saco mi cuchillo de mi pierna. Le doy vueltas en la mano y termino de cogerla, cuando empiezo a caminar hacia el vampiro de ojos grises.

-¡Espera Aelia!-me giro hacía Persa y Celta-No nos dejes solas con ella...

-Candy no os hará nada malo, es una amiga-le gruñe el estómago

-Perdón, no os chupare la sangre tranquilas.

Sin decir nada más, salgo corriendo, el chico ya estará cerca de Laika y no quiero que la toque. Salto de árbol en árbol y encuentro al chico. Salto detrás de él y veo a Laika tirada en el suelo.

-¿¡Qué le has echo!?-sollozando

-Por ahora nada, solo la he derribado de un golpe, pero ahora que estas tu tendré más cena.

-¡¡CALLATE!!

-Huy huy, la lobita se pone agresiva.... ¡¡Mami!! ¡¡Ayuda!!-ríe

Cojo mi cuchillo con tal fuerza que mis nudillos se tiñen de blanco. Corro hacía el vampiro y le intento clavar el cuchillo, pero desaparece. "donde esta...." susurro, pero al parecer me escucha y me indica que esta justo detrás mio. Salto sobre él, pero caigo al suelo, es demasiado rápido. Me agarra y me tira al suelo, me levanta y me estampa contra un árbol con tal fuerza que toso sangre.

-Demasiado fácil. Los licantropos nunca seréis oponentes dignos de nosotros.

Caigo al suelo de rodillas y se me resbala el cuchillo de la mano. Lo recojo con dificultad y sujetando mi brazo avanzo hacia él.

-¿No te has rendido aun?

Lo ignoro y avanzo hasta él, le intento clavar el cuchillo, pero solo con moverse un poco lo esquiva. He caído tan bajo....pensaba que podría, pensaba que era fuerte, pensaba que podría protegerla, pero... Mi mano derecha empieza a relucir de un color azul eléctrico, algo mas claro que el de mis ojos. Es la herradura, la marca que me regalo Laika. Todavía sentía dolor, pero ya no me costaba moverme.

Puedo moverme sin dificultad, con dolor, si, pero no importa. Aprovecho la oportunidad que se me ha sido concebida y corro hacía el chico, cuyo nombre aun no se. Al parecer mi velocidad aumenta, ya que el vampiro no es capaz de esquivarme y le clavo el cuchillo en el hombro.

Se queda agachado sujetando su hombro con su mano.

-No puede ser...

-Claro que si, ¿no decías que los lobos no somos rivales dignos de vosotros? vamos anda

Me siento genial. Le pego un puñetazo seguido de una patada en su rostro haciendo que sangre por la nariz y los labios. Finalmente voy a clavarle el cuchillo en el corazón, pero me frena el brazo con su mano. Le desgarro con mis garras de mi mano libre y le araño todo su brazo con el que sujetaba mi brazo, sacando mis colmillos. Le empieza a temblar el brazo, pero no deja de sujetarme la mano. La sangre le empieza a gotear por el rostro, algo que no le parece incomodarle. Me quedo paralizada con su aguante, pero enseguida le piso el tobillo y hago que se le rompa, él solo hace una mueca de dolor sin soltar mi brazo.

-Me rindo. Suelta mi brazo y déjame llevarme a Laika.

-¿Por qué no sigues intentando matarme? No te falta mucho-habla entre muecas esta claro que dice la verdad ¿por que no lo mato de una vez?

-No. Solo déjame irme con ella

Suelta mi brazo dejando caer el suyo. Recojo a Laika en mis brazos y camino hacia delante dejando atrás al chico de ojos grises cuando me dice algo.

-Nunca he visto a un licantropo con esos poderes.

-Siempre hay una vez para todo-freno

-Gracias...

-De nada-le miro

Sigo avanzando dejando en el suelo al chico, llego a la habitación y ahí me encuentro con todos...

MI RELFEJODonde viven las historias. Descúbrelo ahora