Capitulo 1 | Prólogo

1.1K 61 17
                                    


Maia

- ¿Maía, te pasa algo? - preguntó Axel

- ¿Que? Ahh, disculpa no te escuche -

El rodó los ojos divertido

- La misma de siempre - pasó su brazo por mi hombro

- Si bueno, todos me quieren así - le pique la oreja, el chillo como niña y empecé a carcajear

- Maia, cuidado - dijo Jude

- ¿Que? -

- cuidado - dijo de nuevo

- ¡MAIA! - gritaron y lo siguiente que sentí fui un balón.

Acabe en el suelo con una marca de balón de basquet, les juro que le quitó la cabeza en cuanto consiga abrir los ojos.

Abría los ojos y al segundo después los cerraba, el sol estaba muy radiante hoy.

- ¿Maia estás bien? - Pregunta Dean

<No idiota, solo me estoy haciendo.> Pensé en ese momento pero para mantener la postura conteste otra cosa

- Si, solo siento un pequeño ardor.

La verdad, es el único que siempre ha estado para mi y hay algunas veces que prefiero quedarme callada para no gritarle y romper su sensible corazón.
Por cierto el es mi primo y único familiar al que en verdad quiero mucho.

- Tu cara dice lo contrario - me responde

- ¿A si?... ¿Y que dice? - respondo divertida

- Pues de aseguro querías decirme, no idiota, solo me estoy haciendo.

En ese mismo instante tenía la peor cara imaginada. De aseguro estudiaba Brujería y no me lo había dicho.

- Creo que solo con verte a la cara, descubro que te puedo entender fácilmente. - hizo una pausa - Se que cuando estás enojada por alguna extraña razón tus ojos se vuelven más azules de lo normal, cuando estás triste miras al cielo, cuando estas enferma cierras los ojos -
Y otra vez mi cara asustada, el se rió nada más.

Me tendió su mano y me ayudó a levantarme.

- Deberías de dejar de pensar en esas tonterías de Inazuma Eleven - dijo y yo rodé los ojos.

- No son tonterías idiota, si los vieras al menos una vez, te enamorarías y hasta te volverías gay - dije alzando las manos al cielo, el jamás entiende - Además yo no te digo nada con lo de Dragon Ball - me cruce de brazos

Suspiró frustrado - Lo que tú digas.-

- Ajá - dije.

Empezamos a caminar hacia mi casa, con sinceridad, yo no quería ir. Mis padres siempre me maltrataban, bueno no siempre, solo cuando estaban de mal humor.
Lo que me pone aún peor es que eso no es lo malo, lo qué pasa es que mi padre engaña a mí madre con una mejor familia y si madre se llegara a enterar, la paliza la recibiría yo.

Por lo menos viene mi primo y cuando está el a mí no me hacen nada.

- ¿Te encuentras bien? - preguntó Ori, la mucama de la casa o más bien mi segunda madre, tiene como unos 43 años mas o menos.
Nos acababa de abrir la puerta.

- Si solo estaba pensando - dije y puse la mejor sonrisa forzada

- Emm... te lo dejaré pasar solo porque tus padres están muy enojados y no quiero que te hagan nada - sonrió

Awww... como la quiero

- Vamos Maia, apresúrate - dijo Dean.

Esta última semana, han estado muy enojados, hasta un día llegue a urgencias y por eso Dean se preocupa mucho por mi.

- Tu también cuídate Ori, si te quieren hacer algo, avísame rápido y voy como los relámpagos - ella rió

- Claro cariño, ahora ve a descansar - dijo y se fue a la cocina

Llegue a mi cuarto acompañada de mi primo, el fue a mi baño y saco la cajita de primeros auxilios, siempre lo escondo por si las dudas.

- Déjame colocarte hielo para que no se te inflame y al final una vandita para el rasguño - se rasco la cabeza - Pero déjame ir a la cocina... haber si nos están tus padres para que pueda coger el hielo libremente -

El se fue y regresó con cautela

- No estaban - susurró

Suspiré - Porque me vida es así -

El me miró triste.

- A veces tienes que pasar obstáculos para seguir aprendiendo, y así te harás cada vez más fuerte y nadie lograra detenerte - Dijo

Puede que a veces sea inmaduro pero es muy inteligente.
Me gana por 4 años, yo nací en diciembre y el en Julio. Yo tengo catorce y el dieciocho.
Es un poco estupido que me trate como una niña de 5 años pero no hay nada que se pueda hacer con el.

- Ya... si tú lo dices, pues yo confío en ti - me pase una mano por la cara - eres el único - susurre

DETRÁS DE LA REALIDAD IEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora