Cambiado Por Amor | Athar

Capitulo 21

P.O.V Bahar:

7:23pm

Fui a darme una ducha para poder calmar mi tensión de lo que me dijo Ates de mi padre, cosa que no sé si es cierta. Cuando terminé cerré la llave y me envolví en una toalla para ir a mi habitación. Cuando estaba verificando la gabeta de mi ropa interior no quedaba nada. Excelente, ahora tengo que bajar en toalla a buscarla - Pensé.
Salí de prisa al Laundry y busqué toda mi ropa interior para llevarla y guardarla, de vez me la puse rápidamente ahí. Iba a salir rápidamente pero en una esquina vi la camisa que había tomado prestada de Ates la primera vez. Estaba pensando si tomarla o no hasta que me dio igual y la tomé para ponérmela.
Una vez en mi habitación la cerré con seguro y me quité la toalla para dejarla secando en una esquina de mi cuarto y guardar mi ropa interior en el cajón.

Cuando ya había terminado de organizar las pocas cosas que estaban ahí iba a buscar mi pijama pero recordé la camisa de Ates... Estaba pensando si ponérmela o no hasta que me dio igual y rápidamente me la puse. Me encantaba como me quedaba, a mitad de muslo, era súper cómoda. Me tiré en mi cama y abraze mi almohada para estar más cómoda, diré algo muy extraño - Pensé - Pero amo el aroma de Ates - Dije en mi mente mientras respiraba profundamente el olor de el que se había quedado impregnado en su camisa. Estaba muriendo de sueño así que opté por acomodarme para dormir.

P.O.V Ates:

Estaba en la habitación secreta observándola por las cámaras. Se estaba vistiendo y se veía demasiado sexy y excitante ¡ay Allah! Ates, no seas tan sucio - Pensé dándome una cachetada mentalmente y observándola hasta que vi algo que me llamó la atención... Se estaba poniendo mi camisa sin nada más. Allah, ahora se ve mil veces más sexy, ayúdame - Pensé.

Salí de ahí y fui directo a su habitación para ver si estaba bien por lo de su padre, pero me llevé la sorpresa de que se había quedado dormida.
Me acerqué a ella, no estaba arropada y tampoco llevaba pantalón por debajo así que si... Le estaba viendo el trasero. No puedo controlarme, se ve demasiado tierna pero a la vez sexy - Pensé.

No pude contenerme y comenzé a acariciar sus muslos, ella estaba fría. Fui subiendo hasta que sin darme cuenta ya estaba tocando su trasero y ella se movió un poco soltando un gruñido.
- Mmm - Gruñó ella.
- Dios Bahar, no sabes lo que provocas en mi - Dije mirándola con deseo y a la vez con negación... No podía estar pensando en esto - Pensé y salí rápidamente de su habitación para entrar a la mía.

- No puedo creer que esto me esté pasando - Dije mientras me sentaba en el borde de la cama - Mis sentimientos hacía ella están cambiando y eso no me gusta.

P.O.V Bahar:

Mientras estaba dormida sentí que me tocaban la pierna y eventualmente la mano quedo en mi trasero pero estaba muy cansada, así que probablemente son cosas mías.

- ¿Ates que haces aquí? - Dije mirándolo mientras se acostaba en mi cama y el solo me miraba pervertidamente mientras se acomodaba ensima de mi.
- Te deseo demasiado - Dijo y yo solo puse mi mano en su cabeza para atraerlo a mi y besarlo. Mientras nos besábamos yo jalé su cabello haciendo que el soltara un gemido en mis labios.
- Yo también te deseo - Dije separándome y mirándolo a los ojos, el me miraba deseoso.

Rápidamente agarré su cabeza y lo apegue a mi para besarlo nuevamente. El me siguió el beso y cuando se iba a separar mordí su labio rápidamente haciendo que el soltara otro gemido.
- Eres una chica muy traviesa - Dijo el haciendo que yo riera - Vamos a ver cuan traviesa puedes ser - Dijo mientras bajaba su cabeza a mi cuello dando varios besos en el haciendo que suspirara. Mientras pasaba su mano por mi figura lentamente.

- Quiero que grites y no te reserves nada como la chica traviesa que eres - Dijo con voz áspera mientras metía su mano bajo mi ropa interior.
- Mierda - Dije de un momento a otro porque desperté y me di cuenta que solo fue un sueño que se sintió demasiado real. Me pare de la cama para ir a la cocina y servirme un poco de agua mientras procesaba lo que acabo de soñar con mi secuestrador. ¿Cómo es esto posible? ¿Qué me pasa? - Pensé y dejando el vaso en el fregadero.

Eran la 1:30am, había dormido mucho pero aún estaba cansada. Subí a mi habitación pero me dio curiosidad entrar a la de Ates, así que teniendo cuidado fui a su habitación a ver si estaba dormido. Abrí la puerta y efectivamente lo estaba. Había un gran bulto bajo las sábanas, estaba más arropado que un burrito - Pensé y traté de aguantar mi risa.

Entré a la habitación para acercarme hacía el para poder ver su rostro. Estaba profundamente dormido, se veía muy indefenso comparado a como es cuando está despierto. Iba a irme hasta que sentí que una mano agarró fuertemente mi muñeca haciendo que cayera ensima de el.

- ¿Que haces aquí muñeca? - Preguntó el con voz ronca, Dios mío...
- Emm... Solo quería ver si estabas dormido - Dije un poco nerviosa.
- Lo estaba y pues ahora estoy despierto - Dijo para luego caer en un silencio mientras nos mirábamos uno al otro.
- ¿No tienes sueño? - Preguntó el moviendo su mano la cuál rozó con mi trasero haciendo que me pusiera nerviosa.
- Un poco - Dije.
- ¿Quieres dormir conmigo nena? - Dijo el con tono provocativo.
- Claro que no - Dije renuente y tratando de bajarme de el para irme a mi habitación.
- Mejor no te muevas si no quieres que pase lo de la otra vez - Dijo el riendo
- Ja ja - Dije - Que graciosito - Dije mirándolo con cara sarcástica.
- Muñeca, estoy jugando... - Dijo - Aunque mejor no lo hagas si no quieres recibir un castigo - Dijo el seriamente.
- ¿Castigo como cuál? - Pregunté con los ojos muy abiertos.
- No te diré - Dijo poniendo sus manos en mis caderas.
- No me toques - Dije molesta tratando de quitar sus manos de mi.
- Te vez demasiado sexy con mi camisa - Dijo y ahí recordé que la tenía puesta y estaba solo en ropa interior... Bravo Bahar - Dije mentalmente.
- Ehh... Y-Yo - Dije nerviosa y seguramente poniéndome roja de la vergüenza.
El solo estaba ahí mirándome con una sonrisa pícara.
- Te vez tierna sonrojada - Dijo el sonriendo a medias.
- Suficiente - Dije - No me digas esas cosas, no eres nada mío - Dije enojada - Es muy bipolar el, por lo tanto hace que yo también me ponga así.
- Soy tu secuestrador - Dijo el.
- Exacto - Dije - Secuestrador, se supone que no me digas estas cosas - Dije.
- Bueno, yo las digo si quiero muñeca - Dijo el guiñándome un ojo. ¡Ugh maldito! - Pensé.
- Yo me voy - Dije bajándome de ensima de el para al fin poder estar de pie.
Iba a irme hasta que sentí que me dio una nalgada.
- ¡Oye! - Dije sorprendida e indignada, el solo soltó una carcajada - Eres un idiota, no me vuelvas a tocar - Dije molesta.
- Eso dices ahora muñeca - Dijo - Además no me alces el tono porque puedo castigarte fácilmente... Y no es cualquier castigo - Dijo seriamente con tono perverso. Yo solo opté por irme lo más rápido de ahí para encerrarme en mi habitación y tirarme en la cama.

- Primero me hizo una marca - Pensé - Luego le provoco una erreción. Tengo un sueño casi húmedo con el y ahora me amenaza de un castigo - Pienso - Sin contar la nalgada - Dios - Dije - Este hombre me va a volver loca.